Perú ya opera 17 centrales solares que aportan energía limpia al sistema eléctrico nacional

Estas instalaciones están ubicadas principalmente en el sur del país, donde las condiciones climáticas permiten aprovechar al máximo la radiación, y juntas generan más de 1,600 gigavatios hora al año

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Las centrales fotovoltaicas ayudan a
Las centrales fotovoltaicas ayudan a cerrar brechas de acceso a electricidad en comunidades aisladas de la Amazonía. (Imagen Ilustrativa Infobae)

El Perú cuenta actualmente con 17 centrales solares de generación eléctrica en operación, que juntas suman una potencia instalada de 748 megavatios (MW), informó el Ministerio de Energía y Minas (Minem) a través de una nota de prensa difundida esta semana. Estas plantas, ubicadas principalmente en regiones con alta radiación solar como Arequipa, Moquegua y Tacna, son responsables de inyectar 1,671 gigavatios hora (GWh) al Sistema Eléctrico Interconectado Nacional (SEIN) y a sistemas aislados, consolidando el papel de la energía limpia en la matriz energética nacional.

“Estas centrales solares inyectan un total de 1,671 GWh al SEIN y sistemas aislados, contribuyendo a que el Perú incremente el componente de energía renovable de su matriz energética”, señaló el Minem.

Una apuesta estratégica por el sur del país

La mayoría de las plantas solares se ubican en el sur del país debido a las condiciones climáticas favorables para la captación de energía solar. La central San Martín, ubicada en Arequipa, lidera la lista con una potencia instalada de 252.4 MW, seguida por la central Rubí (Moquegua, 144 MW), la planta Clemesí (Moquegua, 114 MW), la central Matarani (Arequipa, 105 MW) y la central Tacna Solar (Tacna, 20 MW).

Estas plantas no solo garantizan un suministro eléctrico más estable y menos contaminante, sino que también diversifican las fuentes de generación energética del país. Además, en zonas aisladas de la Amazonía, se han instalado parques solares que permiten llevar electricidad a comunidades que antes no tenían acceso a la red eléctrica tradicional.

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Las 17 centrales solares en operación inyectan más de 1,600 GWh al Sistema Eléctrico Interconectado Nacional y a sistemas aislados en zonas rurales.

Potencial solar desaprovechado

Pese a los avances, el Perú apenas ha comenzado a explotar su vasto potencial solar. Según el Minem, el país cuenta con una capacidad de generación solar estimada en 937 gigavatios (GW), de los cuales apenas se aprovecha el 0.08 %. Esto significa que hay un amplio margen para seguir invirtiendo en energías renovables, lo que podría colocar al país como líder regional en desarrollo energético sostenible.

“Estas plantas de generación con recursos renovables fortalecen la seguridad energética del país e impulsan la creación de empleo en diversas regiones, dinamizando la economía local y potenciando los recursos con los que cuenta el Perú”, indicó el ministerio.

Además del ahorro en emisiones de gases de efecto invernadero, la instalación y operación de estas centrales genera empleo directo e indirecto, promueve el desarrollo de proveedores locales y dinamiza la economía de las regiones en las que se ubican.

Beneficios sociales y ambientales

La implementación de energía solar en el Perú tiene un fuerte componente social. Muchas de estas plantas permiten cerrar brechas de acceso a la electricidad, especialmente en sectores rurales y vulnerables. Este acceso no solo mejora la calidad de vida de los ciudadanos, sino que también contribuye al desarrollo educativo, productivo y sanitario de las poblaciones beneficiadas.

La central San Martín en
La central San Martín en Arequipa es la planta de energía solar con mayor potencia instalada en el país, con 252.4 MW.

A nivel ambiental, la transición hacia fuentes renovables como la energía solar es fundamental para reducir la dependencia de combustibles fósiles como el diésel, el gas natural y el carbón. Estas fuentes tradicionales representan actualmente una porción significativa de la generación eléctrica nacional, pero su impacto ambiental y su volatilidad en costos hacen urgente una diversificación sostenible.

Desafíos y oportunidades

Aunque el avance es significativo, persisten retos. La inversión privada aún es limitada en comparación con otros países de la región, y la normativa para agilizar proyectos renovables necesita fortalecerse. Además, las líneas de transmisión deben expandirse para llevar la energía generada a los principales centros de consumo del país.

No obstante, la tendencia es positiva. La creciente preocupación global por el cambio climático, junto con los compromisos asumidos por el Perú en el marco del Acuerdo de París, hacen prever que el impulso a las energías limpias continuará. El Minem ha señalado que seguirá promoviendo mecanismos de inversión y alianzas público-privadas para ampliar el uso de la energía solar en más regiones del país.

Una visión de futuro

El desarrollo de estas 17 centrales solares no solo refleja un compromiso con la sostenibilidad, sino que también abre la puerta a una nueva etapa para el sector energético peruano. Con más de 936 GW de potencial por aprovechar, el país tiene la posibilidad de posicionarse como un referente en energías renovables en América Latina.

El reto será mantener el impulso, garantizar el financiamiento adecuado y articular políticas públicas con visión a largo plazo. Si el Perú logra esto, no solo reducirá su huella ambiental, sino que también llevará electricidad limpia y sostenible a más peruanos, construyendo un futuro energético más justo y resiliente.