
Las enfermedades laborales asociadas al esfuerzo físico excesivo y a condiciones de trabajo adversas han cobrado protagonismo en sectores como la minería, la manufactura y la construcción. En particular, los trastornos musculoesqueléticos (TME), que afectan músculos, tendones, huesos y articulaciones, representan una de las principales causas de ausentismo laboral y pérdida de productividad en el país. Frente a esta realidad, un grupo multidisciplinario de estudiantes de la Universidad de Ingeniería y Tecnología (UTEC) ha diseñado un prototipo de exoesqueleto ergonómico e inteligente para prevenir este tipo de lesiones, según informó la misma institución.
Un problema creciente en la industria peruana
Los TME suelen originarse por la exposición continua a factores como vibraciones mecánicas, posturas forzadas, manipulación de cargas y movimientos repetitivos. Estas condiciones, frecuentes en ambientes industriales y extractivos, no solo comprometen la salud física del trabajador, sino que además generan altos costos para las empresas en términos de bajas laborales, rotación de personal y reducción en el rendimiento.
Según datos del Ministerio de Trabajo y Promoción del Empleo (MTPE), los TME representan más del 30% de las enfermedades ocupacionales registradas en el Perú. Su tratamiento implica largos periodos de rehabilitación, y en muchos casos, puede conducir a discapacidades permanentes si no se detectan y corrigen a tiempo.

Tecnología vestible para prevenir lesiones
Frente a esta problemática, el equipo de UTEC ha desarrollado un exoesqueleto enfocado en los miembros superiores del cuerpo, con énfasis en prevenir la sobrecarga física y proteger contra las vibraciones provenientes del uso de maquinaria pesada. El dispositivo incorpora sensores biométricos e inerciales que permiten medir en tiempo real la postura, el esfuerzo muscular y el tipo de movimiento del usuario.
“El exoesqueleto que hemos desarrollado integra sensores que permiten monitorear en tiempo real la postura, el esfuerzo muscular y el movimiento del usuario”, explicó Deyby Huamanchahua, docente de Ingeniería Mecatrónica de UTEC y líder del proyecto. Este monitoreo continuo no solo permite detectar desviaciones perjudiciales para la salud, sino que también puede generar alertas o ajustes automáticos para corregir posturas o reducir el esfuerzo en zonas críticas del cuerpo.
Un sistema de amortiguación ajustable
Una de las innovaciones destacadas del dispositivo es su mecanismo de amortiguación ajustable, que actúa como una barrera frente a las vibraciones transmitidas por la maquinaria. Este sistema protege tanto la zona lumbar como las extremidades superiores, disminuyendo la fatiga muscular sin interferir con la movilidad del trabajador.
Las simulaciones realizadas por el equipo de investigación demuestran que el uso del exoesqueleto reduce significativamente la carga mecánica que soportan los trabajadores, ayudando a evitar lesiones crónicas y a mejorar la calidad de vida laboral. “El diseño busca ser funcional y cómodo, permitiendo un uso prolongado durante la jornada sin generar incomodidad”, añadió Huamanchahua.

Trabajo colaborativo e impacto social
El equipo de desarrollo está integrado por Yerson Taza Aquino, estudiante de la maestría en Investigación de UTEC Posgrado, y los estudiantes de pregrado Adrián Sasieta Zúñiga, Fabrizzio Cabello, Sebastián Loayza, Josué Abad, Farid Abuid Franco e Iván Núñez Soto, todos de la carrera de Ingeniería Mecatrónica. Además, el proyecto contó con el apoyo académico y técnico de la Universidad Nacional del Centro del Perú, ubicada en Junín, y la Universidad de Alberta, en Canadá.
Esta colaboración internacional permitió consolidar un enfoque interdisciplinario, que combina ingeniería mecánica, electrónica, ergonomía y salud ocupacional, apuntando no solo a mejorar las condiciones de trabajo en el Perú, sino a generar soluciones tecnológicas replicables en otros países con problemáticas similares.
Apuesta por una industria más humana
El prototipo desarrollado por UTEC representa un paso importante hacia una industria más segura, sostenible y centrada en el bienestar humano. Al enfocarse en la prevención de lesiones, el dispositivo no solo puede reducir los costos médicos y operativos asociados a los TME, sino que también fortalece la responsabilidad social empresarial y mejora la calidad de vida de miles de trabajadores.
Con este avance, los estudiantes reafirmaron el papel de la ingeniería nacional en la búsqueda de soluciones reales a desafíos estructurales del país, demostrando que la innovación puede ser una herramienta poderosa para proteger la salud, aumentar la productividad y transformar positivamente los entornos laborales.