Han pasado casi cinco meses desde el colapso del puente Chancay, y hasta la fecha no hay rastro del paradero de Patricia Liberto, maestra que desapareció el día del accidente. Su familia mantiene la esperanza de encontrarla, mientras las labores de demolición del puente recién comenzaron.
Isaac Trujillo, esposo de la docente desaparecida, llegó hasta la zona del siniestro, donde pidió a las autoridades extremar las precauciones durante los trabajos de demolición. Considera que es posible que el cuerpo de su esposa se encuentre bajo los restos del puente, arrastrado por la corriente del río tras el colapso.
“La gran espera es poder ubicar a mi esposa. Hasta el día de hoy no tenemos noticias. Supuestamente la han visto por ahí andando, pero no hay nada. Parece un delirio. En su desesperación, parece que ella llegó a caer debajo del puente”, declaró Trujillo a Panamericana Noticias.
Además, solicitó que rescatistas especializados supervisen las labores para evitar que posibles restos humanos queden atrapados entre los escombros. “Pido a las autoridades que, ni bien empiecen a demoler, pongan personas tipo rescatistas, que estén ahí presentes y tomen precaución al demoler, por si el cuerpo está en la parte baja”, señaló.

Trujillo aseguró que permanecerá en la zona hasta obtener una respuesta concreta.
“Tengo que estar acá pendiente de que empiecen hasta, no sé, intermediario, venir o estar acá presente para poder ver, no ya sacarme. Como si esa espina de repente llega a estar acá el cuerpo de mi esposa”, dijo.
Inicia demolición del puente
El lunes 30 de junio comenzaron las labores de demolición del puente Chancay, ubicado en el kilómetro 76 de la carretera Panamericana Norte. La Fiscalía Penal de Huaral autorizó los trabajos luego de recibir los informes técnicos elaborados por peritos que investigaron el incidente.
La disposición fiscal N.º 09-2025 indicó la necesidad de remover los escombros para permitir la instalación de un puente modular metálico que restablezca el tránsito en la zona. También se señaló que los trabajos permitirán continuar con la búsqueda de Patricia Liberto, hasta hoy la única persona desaparecida a causa del colapso.
Durante la jornada de inicio de la demolición, los familiares de la docente recorrieron la ribera del río Chancay, donde han mantenido una búsqueda constante desde enero, fecha en la que ocurrió la tragedia.

El puente, que resultó seriamente dañado por el impacto de un vehículo de carga, colapsó sobre el cauce del río, dejando atrapados a varios vehículos y provocando la desaparición de la maestra. Las labores de rescate en los días posteriores no lograron ubicar su paradero.
Familiares reclaman falta de información oficial sobre la demolición
Los familiares de Patricia Liberto denunciaron que se enteraron del inicio de la demolición del puente a través de redes sociales, y no mediante una notificación formal de las autoridades encargadas del proceso.
Según información de la agencia Andina, los parientes de la desaparecida se trasladaron desde Lima hasta la zona del colapso al conocer por medios no oficiales el inicio de los trabajos. En el lugar, solicitaron apoyo directo de la presidenta de la República para el envío de equipos especializados en rescate.
De acuerdo con el medio, la zona donde ocurrió el colapso se encuentra actualmente aislada y bajo custodia de la empresa concesionaria de la vía y de la Policía Nacional. Los familiares esperan que, al finalizar la demolición, puedan obtener alguna pista que les permita cerrar este capítulo de incertidumbre.

El caso permanece en investigación por parte del Ministerio Público. Hasta el momento, no se ha confirmado si los restos de la docente se encuentran o no en la zona del puente colapsado.
Tragedia dejó tres muertos y una desaparecida
El 14 de febrero, el puente de Chancay colapsó en el kilómetro 76 de la Panamericana Norte, en Huaral, causando la caída de un bus interprovincial y un auto al río. El hecho dejó tres personas muertas, más de 40 heridas y una desaparecida: la docente Patricia Liberto, quien hasta ahora no ha sido localizada.
La tragedia generó indignación nacional por el estado de la infraestructura. Autoridades locales habían advertido previamente sobre daños en el puente. Las investigaciones apuntan a una posible falla estructural agravada por la socavación del río y la falta de mantenimiento.
La concesionaria Norvial, a cargo del puente desde 2003, había descartado riesgos antes del colapso. Actualmente, la Fiscalía busca determinar responsabilidades mientras el Ministerio de Transportes avanza con la instalación de un puente modular.



