En medio de una fuerte controversia por la reciente modificación de la guía de aborto terapéutico en el Instituto Nacional Materno Perinatal, la ministra de la Mujer y poblaciones vulnerables, Fanny Montellanos, ofreció declaraciones al respecto.
La resolución directoral N° 200-2025-DG-INMP/MINSA, eliminó cuatro causales específicas que anteriormente permitían a los médicos sustentar un aborto terapéutico por afectaciones a la salud mental, entre ellas: embarazos producto de violación en niñas y adolescentes, y malformaciones fetales incompatibles con la vida.
La ministra afirmó en declaraciones para Canal N, que el artículo 119 del Código Penal, es decir, la legalidad del aborto terapéutico dentro de las primeras 22 semanas, “se sigue respetando”. A la par, aseveró que se mantienen las juntas médicas, encargas de evaluar la posibilidad del aborto terapéutico.
Sin embargo, señaló que “el aborto terapéutico es un tema netamente de salud”, remitiendo la responsabilidad de estos cambios exclusivamente al Ministerio de Salud. Según explicó, Montellano contactó a Eric Peña Sánchez, viceministro de salud, para obtener detalles de la medida cuando se dio a conocer la publicación. “He conversado hoy (27 de junio) con el viceministro para tener el detalle y entender bien”.
Ministra contradice atención de la salud mental
Fanny Montellanos señaló que no se comunicó con la congresista Milagros Jáuregui, impulsora de esta medida desde el Congreso y aliada del bloque conservador. “No me he comunicado con ella, pero hemos venido coordinando sobre otros temas”, manifestó.
“Nosotros vamos a seguir trabajando desde nuestras competencias”, declaró Montellanos, reiterando que su cartera se enfoca en la atención y orientación de víctimas. No se refirió a la eliminación específica de causales que permitían fundamentar el aborto terapéutico.
Pese a ello, la ministra aseguró que se seguirá brindando una atención integral, incluida la salud mental. Garantizó incluso que las juntas médicas serán conformadas por equipos “interdisciplinarios” en los que participarán psicólogos y psiquiatras para evaluar los casos particulares de las gestantes. Sin embargo, la nueva guía no hace mención expresa a la participación de profesionales en salud mental ni contempla estos supuestos como motivos válidos para recurrir al aborto terapéutico.
Cambió en la guía del Instituto Materno Perinatal
La nueva versión de la guía de aborto terapéutico, redujo de quince a once los supuestos por los cuales puede practicarse esta intervención médica en Perú. Entre las causales eliminadas se encuentran:
- Cuadro clínico de psicosis puerperal no controlada, con riesgo de homicidio o suicidio.
- Daño a la salud mental por un embarazo con feto con malformaciones congénitas incompatibles con la vida.
- Daño a la salud mental por embarazo producto de violencia sexual en niñas y adolescentes.
- Otras patologías con impacto en la salud mental, según lo dictamine la junta médica.
Estas condiciones habían sido incluidas en 2024 luego de un consenso técnico entre sociedades médicas, la Sociedad Peruana de Obstetricia y Ginecología y el Colegio Médico. La modificación actual fue impulsada tras presiones de grupos conservadores como “Padres Peruanos” y celebrada públicamente por la congresista Milagros Jáuregui, de Renovación Popular.
¿Qué implica el cambio para niñas víctimas de violación?
Según datos de Promsex, en los últimos tres años se han registrado 4.000 casos de embarazo por violación que fueron evaluados como potenciales para aborto terapéutico. De estos, la mitad correspondían a niñas menores de catorce años. Solo en lo que va de 2025, 319 menores de catorce años han sido forzadas a continuar embarazos.
Susana Chávez, obstetra y directora de incidencia de Promsex, advirtió que la modificación representa un retroceso. “Estas disposiciones permitían que los médicos tuvieran mayor certidumbre para actuar frente a casos de niñas embarazadas por violación. El embarazo forzado es un daño real a la salud mental”, explicó.
Sin embargo, la ministra Montellanos insistió en que su despacho “no permitirá retrocesos en políticas ni servicios”, pero no precisó si se adoptará alguna medida frente a la guía recientemente modificada ni si intervendrá para que se reevalúe su contenido.
Por su parte, la exministra de la Mujer, Diana Miloslavich, advirtió al medio La Mula que “quienes impulsan estos cambios ni siquiera entienden bien lo que tachan” y cuestionó el rol de la congresista Milagros Jáuregui. “Lo que han hecho es evidenciar que no les importan las niñas ni las víctimas de violación”, sentenció.
El aborto terapéutico sigue siendo legal en Perú, el cual permite la interrupción del embarazo cuando existe riesgo grave para la salud física o mental de la gestante. La modificación de la guía no elimina esta base legal del Código Penal como tampoco las obligaciones internacionales que tenemos, pero sí restringe la posibilidad de argumentar con claridad en favor de quienes atraviesan embarazos forzados, especialmente en niñas.
