
La reciente firma del Tratado sobre la Diversidad Biológica Marina en Áreas Fuera de la Jurisdicción Nacional (BBNJ) por parte del Gobierno de Perú ha generado un intenso debate entre diversos gremios empresariales y sectores vinculados a la pesca. La presidenta Dina Boluarte, quien suscribió el acuerdo durante su visita a Francia, aseguró que este no vulnera las 200 millas marítimas del país, según declaraciones del canciller Elmer Schialer. Sin embargo, la controversia se centra en las posibles implicancias del tratado, que ahora deberá ser aprobado por el Congreso peruano.
¿Qué dijeron los gremios ligados a la pesca sobre el Tratado de Alta Mar?
El Tratado de Alta Mar, firmado en el marco de la Tercera Conferencia de Naciones Unidas sobre el Océano, realizada entre el 7 y el 11 de junio en Niza, ha sido criticado por gremios como la Sociedad Nacional de Industrias (SNI), Comex Perú y la Sociedad Nacional de Pesquería (SNP). Esta última, parte de la Confiep, cuyo presidente se encuentra en Ginebra, Suiza, en un evento de la OIT.
En un comunicado conjunto emitido el 9 de junio, estas organizaciones expresaron su rechazo al acuerdo, argumentando que este podría representar una pérdida de soberanía en la gestión de los recursos pesqueros. Según el documento, el tratado “impone restricciones innecesarias” y podría debilitar la labor de las Organizaciones Regionales de Ordenación Pesquera (OROP), de las cuales Perú forma parte.
Los gremios también señalaron que el tratado fue impulsado por algunas ONG con intereses ideológicos que, según ellos, podrían afectar sectores productivos como la pesca, un motor clave para el empleo y el desarrollo descentralizado en el país. Además, criticaron que no se haya consultado previamente a entidades técnicas como el Ministerio del Ambiente, el Ministerio de la Producción o el Instituto del Mar del Perú, ni a los gremios empresariales y trabajadores del sector.

ADEX y una posición más cautelosa: exportadores piden un análisis independiente
Sin embargo, la Asociación de Exportadores (ADEX) adoptó una postura más disruptiva sobre el tratado. En un comunicado emitido este martes 10 de junio, la organización manifestó que analizará el contenido del tratado mediante una opinión jurídica especializada antes de emitir una posición oficial.
César Tello Ramírez, presidente de ADEX, declaró posteriormente a Infobae Perú que el gremio busca una evaluación neutral para determinar si el acuerdo es compatible con el marco legal nacional y si afecta el aprovechamiento sostenible de los recursos marinos.

“Nosotros queremos consultar con alguien que no sea juez y parte. Queremos una persona neutral, como un estudio de abogados, que nos diga exactamente cuáles son las implicancias de la firma”, remitió Tello para ese medio.
En esta línea, Tello destacó que, aunque algunos de sus asociados comparten preocupaciones similares a las de otros gremios privados, los integrantes de ADEX “prefieren actuar con independencia técnica antes de pronunciarse”.
Las 200 millas peruanas: una cuestión también de harineras y conserveras
El debate también ha puesto en evidencia la falta de comunicación entre el Ejecutivo y los gremios antes citados. En el caso de los exportadores, ellos también manejan su propio Comité de Pesca y Acuicultura, en el que comparten socios, como harineras y conserveras, con la SNI y la SNP.
Según Tello, el viaje de la presidenta Boluarte a Francia y la firma del tratado se manejaron de manera apresurada, lo que dejó a los gremios sin tiempo suficiente para analizar las implicancias del acuerdo.

“Lo que sucede es que el comité de pesca de la SNI es bastante grande y, prácticamente, tiene a las mismas empresas que tiene la SNP. Entonces, ellos han alertado sobre su preocupación. Pero hasta ahora no encontramos el motivo de por qué se oponen a la firma. Lo que nosotros vamos a pedir es la opinión de un especialista para que nos diga por dónde se debe actuar”, aseveró.
Aunque el Ejecutivo informó al Congreso sobre la intención de firmar el tratado mediante un documento enviado el 3 de junio, los gremios consideran que una consulta previa habría sido recomendable para garantizar un consenso más amplio.
Sociedad Nacional de Industrias sienta posición: Cancillería debe responder
Pero el debate apenas se está abriendo. El presidente de la Sociedad Nacional de Industrias (SNI), Felipe James, reiteró para Infobae Perú que las empresas del sector pesquero, especialmente aquellas que operan fuera de las 200 millas marítimas del territorio peruano, han manifestado preocupación por las posibles implicancias del tratado.
En este sentido, James destacó que especies como el atún y el perico, que son capturadas en aguas internacionales, podrían verse afectadas por las disposiciones del BBNJ. El empresario textil recordó igual que su par de ADEX que los aportes de la pesca son cruciales para el PBI nacional.

“La SNI tiene 52 comités, uno de ellos, el Comité de Pesca de Consumo Humano Directo. Ese comité está formado por varias empresas. Algunas de esas empresas hacen su su operación pesquera dentro de las 200 millas, pero otras la hacen fuera. Estas últimas nos han mostrado su preocupación porque su faena fuera del mar peruano territorial podría verse afectada. Entonces, claro, son dudas que se tienen porque no ha quedado claro”, dijo para Infobae Perú.
De cualquier modo, el titular de la SNI coincidió en criticar la falta de consulta previa a los gremios y sectores involucrados antes de la firma del acuerdo, señalando que ni la Cancillería ni el Ministerio de la Producción (Produce) se acercaron para dialogar con los actores clave del sector.
Felipe James sobre el Tratado de alta Mar: “Una explicación jurídica es lo más correcto”
En medio de estas tensiones, James señaló que la SNI espera dialogar con el canciller Schialer una vez que regrese al país, con el objetivo de obtener aclaraciones sobre el tratado. Asimismo, indicó que la organización planea presentar sus observaciones ante el Congreso durante el proceso de evaluación del acuerdo. Respecto al pronunciamiento de ADEX, James expresó respeto por la postura de la asociación y coincidió en la necesidad de contar con un análisis técnico y jurídico antes de emitir un juicio definitivo.
“Respetamos el pronunciamiento de ADEX, somos muy amigos de ellos y siempre coordinamos y hablamos sobre varios temas. Para este, puntualmente, no hemos mantenido ningún contacto todavía, pero sé que ellos tenían algunas dudas, como nosotros, y hacen bien, pues, en pedir alguna explicación jurídica. Eso me parece muy bien”, destacó el líder industrial.

El Tratado de Alta Mar y un debate por las 200 milas lejos de terminar
El Tratado de Alta Mar, que ya ha sido firmado por 88 países desde su creación en 2023, busca regular la conservación y el uso sostenible de la biodiversidad marina en áreas fuera de la jurisdicción nacional. Sin embargo, su implementación ha generado tensiones en varios países debido a las posibles restricciones que podría imponer sobre actividades económicas como la pesca. En el caso de Perú, los gremios temen que el tratado afecte la seguridad alimentaria, destruya empleos formales y desincentive la inversión privada en el sector pesquero.
En este contexto, el Congreso peruano tendrá la tarea de evaluar el tratado y decidir si lo ratifica. Mientras tanto, los gremios empresariales y las autoridades gubernamentales deberán continuar el diálogo para abordar las preocupaciones planteadas y garantizar que cualquier decisión tomada sea en beneficio de los intereses nacionales.