Hernando Tavera, jefe del Instituto Geofísico del Perú (IGP), advirtió sobre la probabilidad de un sismo de gran magnitud, estimado en al menos 8.8, que podría impactar gravemente a zonas cercanas de la costa central. De acuerdo con el especialista, este evento sísmico es previsible debido a la fuerte actividad tectónica en la región, respaldada por recientes investigaciones científicas de la entidad.
Las regiones de Lima, Ica, y Áncash serían las más afectadas por este evento. “Esperamos un sismo por lo menos de magnitud 8.8 hacia arriba, que vaya a afectar a la zona costera de la región central. Y evidentemente Lima, Ica, Áncash son las zonas, ciudades o las regiones que podrían resultar mucho más afectadas”, señaló el jefe del IGP. Ante este escenario, la preparación y educación de la población se presentan como medidas clave para reducir las consecuencias de un evento sísmico de gran magnitud.
Durante una entrevista con Canal N, Tavera hizo un llamado a la población para que revise cómo y sobre qué tipo de suelo han construido sus viviendas, y también participen activamente en los simulacros nacionales. “No podemos controlar a la naturaleza, pero lo que sí está en nuestras manos es reducir nuestro nivel de riesgo”, advirtió.
Cabe resaltar que, en la noche del sábado 10 de mayo, una inusual secuencia de temblores sacudió el distrito de Máncora, en la región Piura, causando preocupación entre los residentes del norte peruano. De acuerdo con el IGP, se registraron siete movimientos telúricos entre las 8:30 p. m. y la 12:53 a. m., con magnitudes que variaron entre 3.8 y 5.2 grados.
329 movimientos telúricos perceptibles en lo que va del año

Hasta el momento, el IGP ha registrado 329 sismos perceptibles en lo que va del 2025. “Por lo general, los sismos con magnitudes de 3.5 o más el sacudimiento de suelo es percibido por la población”, indicó Tavera. En promedio, el país experimenta entre cinco y seis movimientos sísmicos diarios.
Muchos de estos eventos son de baja magnitud o gran profundidad, por lo que no son percibidos por la población. Sin embargo, el hecho de que haya una constante actividad sísmica subraya la vulnerabilidad del país. Entre los eventos más relevantes del año, destacan un sismo de magnitud 5.5 en la sierra de Lima y varios movimientos telúricos en Tumbes y Piura, con magnitudes de entre 5.0 y 5.2.
Tavera explicó que, más allá de la magnitud, lo que realmente define el impacto de un sismo es el nivel de sacudimiento del suelo. Este factor depende de la profundidad del epicentro y de la cercanía de la zona afectada a las áreas urbanas. El jefe del IGP afirmó que “la magnitud no es lo que destruye las estructuras; es el sacudimiento del suelo”. En este sentido, un sismo de magnitud intermedia podría causar más daño que uno de mayor magnitud si ocurre más cerca de la superficie o en una ciudad densamente poblada.
La importancia de una ciudadanía preparada

En relación con la preparación ante sismos, Tavera subrayó que la participación activa de la ciudadanía en los simulacros nacionales es esencial. El IGP realizará un simulacro a nivel nacional a fin de mes, al cual Tavera invitó a la población a sumarse para mejorar la preparación.
Además, destacó la importancia de que las personas reconozcan los sonidos de las alertas sísmicas emitidas por las bocinas en las zonas urbanas. “Es muy importante que la población conozca los sonidos que van a emitir estas bocinas y, evidentemente, también los tiempos que tendría cada persona en el área urbana determinada para poder ponerse a buen recaudo”.
Tavera también destacó el progreso en la implementación del Sistema de Alerta Sísmica Peruano (SASPE), un proyecto conjunto entre el IGP y el Instituto Nacional de Defensa Civil (Indeci). Según el especialista, el sistema cuenta con sensores instalados a lo largo de la costa peruana, y se han implementado centros de control.
En cuanto al funcionamiento del sistema, Tavera explicó que el IGP ya realiza pruebas técnicas, y Indeci está en proceso de instalar bocinas en zonas urbanas. indicó Tavera. El sistema, que se espera esté operativo en el transcurso de este año, emitirá alertas sonoras segundos antes de un sismo, lo cual podría ser crucial para salvar vidas.
¿Cuáles son las funciones del IGP?
- Monitorear la actividad sísmica, volcánica y geodinámica en todo el territorio nacional.
- Realizar investigaciones científicas sobre fenómenos geofísicos.
- Emitir alertas y reportes ante eventos naturales como sismos, erupciones volcánicas o tsunamis.
- Brindar asesoramiento técnico al Estado y a la población en temas de prevención y gestión de riesgos.
- Operar y mantener estaciones de observación geofísica.
- Promover la cultura de prevención a través de la educación y divulgación científica.
- Desarrollar tecnologías aplicadas al monitoreo geofísico.
- Participar en proyectos nacionales e internacionales relacionados con la geofísica.