El asesinato de Alicia Delgado, ocurrido el 24 de junio de 2009, marcó un antes y un después en la historia del folclore peruano y de la crónica policial.
Conocida como la ‘Princesa del Folklore’, su trágico final no solo desató una investigación cargada de polémicas, sino que también dejó abiertas heridas que, 15 años después, aún no han sanado. Hoy, una declaración reciente podría cambiar por completo el relato judicial que llevó a Abencia Meza a la cárcel.
La revelación llegó a través del programa dominical ‘Evidencia Oculta’, donde María Velásquez, más conocida como la ‘Mecánica del folclore’, narró una conversación privada que sostuvo con César Mamanchura, el hombre que confesó haber asesinado a Alicia.
Según reveló Velásquez, Mamanchura reconoció su responsabilidad sin vacilaciones, pero negó haber actuado bajo órdenes de Abencia Meza.
“Le pregunté ‘¿tú lo hiciste?’ y él me dijo que sí. Me detalló y fue terrorífico lo que me dijo. Después le pregunté ‘dime la verdad, ¿Abencia te mandó?’. Me dijo que no y se cortó la comunicación”, contó Velásquez en televisión nacional.
Este testimonio podría marcar un giro en un caso que ha estado cerrado judicialmente pero abierto en la memoria colectiva. La confesión inicial de Mamanchura, realizada poco después de su captura, señalaba a Meza como la autora intelectual del crimen.
Fue esa versión la que permitió que la cantante fuera condenada a 30 años de prisión en 2012. Sin embargo, las dudas sobre la veracidad de esa declaración han persistido desde entonces, alimentadas por inconsistencias en los testimonios, pruebas indirectas y denuncias de presiones durante el proceso.
Mamanchura, quien fue chofer y asistente de Delgado, fue arrestado luego de que el vehículo de la artista apareciera en manos de un familiar de Meza. La escena del crimen mostraba signos de violencia brutal: tortura, múltiples heridas con arma blanca y presuntos indicios de abuso sexual.
Todo apuntaba a un asesinato cargado de saña y planeado con anticipación. Sin embargo, la reciente afirmación del asesino confeso abre nuevas interpretaciones sobre su motivación y sobre quién, si alguien más, estuvo detrás del crimen.
Durante años, Abencia Meza ha proclamado su inocencia desde el penal de Santa Mónica, donde actualmente cumple condena. En entrevistas recientes, ha reiterado que fue víctima de una injusticia y que el verdadero responsable fue Mamanchura, actuando por razones que aún no han sido plenamente esclarecidas.
Esta nueva versión, respaldada por la ‘Mecánica del folclore’, podría motivar una revisión judicial del caso. El impacto de la revelación ha sido tal que, en redes sociales, muchos seguidores de Meza y de Delgado vuelven al debate sobre el crimen.
Mientras algunos creen firmemente en la culpabilidad de la ‘Reina de las parranditas’, otros sostienen que el sistema judicial pudo haber cometido un grave error. La tensión entre ambas posturas es fuerte, especialmente considerando el cariño popular que ambas cantantes despertaban.
Cabe recordar que antes de su muerte, Alicia Delgado había grabado un video casero donde advertía que, si algo le sucedía, su colega Abencia Meza debía ser considerada responsable.
Este registro fue clave durante el juicio, aunque también ha sido cuestionado por su contexto emocional y por no haber sido parte de una denuncia formal.
El episodio especial de ‘Evidencia Oculta’, emitido el domingo 4 de mayo, se enfocó en estas nuevas pistas. El equipo periodístico accedió a archivos inéditos y testimonios no presentados anteriormente, entre ellos la conversación completa entre Velásquez y Mamanchura.
También se mostraron entrevistas con especialistas en criminología y derecho penal que sugieren que la confesión inicial del asesino podría haber estado condicionada por miedo, manipulación o promesas judiciales.
Abencia Meza, quien en la actualidad tiene 49 años, tiene prevista su liberación para el año 2041, cuando tendría 66. No obstante, sus abogados no descartan solicitar una revisión extraordinaria del caso, especialmente si se logra formalizar este nuevo testimonio ante las autoridades.
