Bad Bunny en Perú: las veces que visitó el país y cuánto costaron las entradas de sus shows

El cantante de música urbana volverá a Lima en 2026 como parte de su “Debí Tirar Más Fotos World Tour”. Este retorno genera expectativas tras su última presentación en el Estadio Nacional, en 2022

Guardar
Bad Bunny durante sus primeros show en El Callao | Youtube - Omar Antonio Producciones

Bad Bunny, uno de los artistas más influyentes del género urbano, regresará a Lima en 2026 como parte de su esperado Debí Tirar Más Fotos World Tour. La noticia de su regreso ha emocionado a miles de peruanos que lo han seguido desde sus inicios. El concierto, programado para el 30 de enero de 2026 en el Estadio Nacional, marcará su vuelta a suelo peruano después de tres años de ausencia, por lo que es una oportunidad para repasar sus visitas pasadas a Perú y cómo sus conciertos han dejado huella en el público limeño.

La primera visita de Bad Bunny a Perú

La primera vez que Bad Bunny pisó tierras peruanas fue en marzo de 2017, cuando el artista aún no había alcanzado el nivel de fama mundial que tiene actualmente. En ese entonces, su hit "Soy Peor" lo había posicionado como una promesa dentro del género urbano, pero su popularidad estaba lejos de lo que sería poco después. No obstante, su llegada a Lima fue un fenómeno en sí misma.

En esta primera visita, el reguetonero se presentó en varios locales y discotecas, entre ellos Boulevard Premium en Chiclayo, La Isla del Paraíso en el Callao, Blaza Club en Independencia y Club Kenkos en Santa Clara, haciendo vibrar a los jóvenes peruanos que ya lo seguían de cerca. Las entradas para estos shows eran accesibles, con precios que variaban entre los S/25 y S/100. A pesar de ser un artista emergente, la respuesta del público fue abrumadora, y las discotecas se llenaron rápidamente.

En este entonces, Bad Bunny cobraba alrededor de cinco mil dólares por presentación, un precio que hoy parece insignificante comparado con lo que exige en la actualidad.

Las entradas para el concierto
Las entradas para el concierto de Bad Bunny en Santa Clara, en 2017, costaban solo 25 soles.

Joel Yarleque, gerente de A&D Producciones, fue el encargado de traer a Bad Bunny en esa ocasión y recuerda que, en sus primeros shows, el reguetonero no era el hombre de los trajes ostentosos y las joyas lujosas que conocemos hoy, sino un joven lleno de energía que estaba empezando a abrazar la fama.

No era una persona normal, era calladito, solo bajaba a comer, saludaba, luego se retiraba. He trabajado con muchas personas y él era diferente, muy tímido. Cuando sube al escenario es otro, el día que estuvimos en el Callao, no quería bajar. Decía: ‘dos más’, pero lo tuvimos que bajar porque el público se descontroló”, manifestó, en diálogo con El Comercio.

Bad Bunny llegó por primera
Bad Bunny llegó por primera vez al Perú en marzo de 2017.

La consolidación en 2017

En julio de 2017, Bad Bunny regresó a Perú para su segunda visita, esta vez con un recorrido por varias ciudades, incluyendo Lima, Chimbote y Trujillo. En esta gira, el artista puertorriqueño ya comenzaba a consolidarse en la escena musical, aunque aún no alcanzaba la fama global que disfrutaría en los años siguientes.

Durante esta gira, Bad Bunny se presentó en lugares emblemáticos de la vida nocturna peruana, como Club Kenkos en Santa Clara, Ophera en Plaza Norte, Kapital Sur en San Juan de Miraflores, Estación Watanabe en Chimbote, Palo Marino en Trujillo, Fuleteo Club en Zárate, Mangos en Lince, Estadio Lizarraga en Callao y Barranco Bar en Barranco. Estos recintos, que tradicionalmente albergaban a artistas de menor renombre, fueron testigos de cómo el artita empezó a llenar salas con su música, convirtiéndose en un referente en la escena urbana local.

En su segunda visita al
En su segunda visita al Perú, Bad Bunny también visitó Trujillo y Chimbote.

Uno de los conciertos más recordados de esa gira fue el que ofreció el 28 de julio de 2017 en la discoteca Mangos, ubicada en la Avenida Arequipa, Lima. Aquella noche, el recinto se llenó de fanáticos ansiosos por ver al artista en vivo, interpretando sus temas más populares. Canciones como “Si tu novio te deja sola”, “Soy peor” y “Diles” fueron coreadas por el público, que se entregó completamente a la energía y carisma de Bad Bunny. Las entradas para ese concierto variaban entre S/50 para la zona general, S/80 para la zona VIP y S/100 para la zona Súper VIP.

Por otro lado, el Estadio Lizarraga, ubicado en el Callao, fue otro de los escenarios que acogió a Bad Bunny en esa gira de 2017. El recinto albergó una de las presentaciones más singulares de la gira, ya que el cantante compartió escenario con el recordado Tito Rojas, el “Gallo de la Salsa”. Aquella noche, los precios de las entradas fueron bastante asequibles: la zona general, conocida como la zona Pilsen, costaba solo S/15, mientras que la zona VIP, que estaba reservada para los hinchas del Sport Boys, tenía un precio de S/30.

Si bien Lima fue el epicentro del fenómeno Bad Bunny en esa gira, las ciudades de Chimbote y Trujillo también fueron parte del recorrido, aunque con precios mucho más bajos que los de la capital. La acogida en esas ciudades fue igualmente calurosa, aunque la popularidad de ‘Conejo Malo’ en Lima era, en ese entonces, mucho más palpable debido a la alta concentración de jóvenes seguidores del reguetón y el trap.

Bad Bunny en El Callao,
Bad Bunny en El Callao, como parte de las celebraciones por el aniversario del Club Sport Boys.

Bad Bunny en el Estadio Nacional

El regreso de Bad Bunny a Perú en noviembre de 2022 fue uno de los eventos más esperados por sus seguidores. Después de convertirse en una superestrella global, el cantante se presentó en dos noches consecutivas en el Estadio Nacional de Lima, los días 13 y 14 de noviembre. Estas presentaciones se realizaron en un ambiente completamente diferente: con entradas agotadas y un público completamente entregado.

Las entradas para los conciertos de 2022 variaron entre S/175 y S/680, dependiendo de la ubicación, lo que reflejaba tanto la magnitud del evento como la alta demanda que había por ser parte de esta histórica presentación. Por supuesto, la reventa alcanzó precios exorbitantes.
Bad Bunny cantó para más
Bad Bunny cantó para más de 50 mil peruanos en el Estadio Nacional. (ANDINA/Renato Pajuelo)

A pesar de que su fama había alcanzado niveles mundiales, la esencia de Bad Bunny seguía siendo la misma. Durante el show, no solo mostró su habilidad para conectar con el público con su música, sino que también evidenció su cercanía con sus seguidores. En medio de una ola de emoción, el artista sorprendió a todos cuando se acercó a un fan para tomarse una selfie, firmó una zapatilla de otro seguidor y se puso un chullo peruano que le regalaron en el escenario.

Sin embargo, el evento no estuvo exento de polémica. Un grupo de 3,000 personas fue estafado con entradas clonadas, lo que generó frustración entre los asistentes que no pudieron acceder al concierto. Además, las tensiones por la elección de los teloneros –el grupo peruano Tourista, cuya participación fue criticada por algunos de sus integrantes– también afectaron el desarrollo del espectáculo. No obstante, a pesar de estos inconvenientes, el show de Bad Bunny fue un éxito rotundo.

Primer concierto de Bad Bunny en el Estadio Nacional. Infobae Perú