Oro ilegal, empresas fantasma y mochilas de efectivo: así operaba ‘Los Kilates’, la red criminal que movió 13 millones de dólares

Durante un megaoperativo en varias regiones, se incautaron lingotes valorizados en millones de dólares y grandes sumas de dinero en efectivo

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La Fiscalía desmanteló una organización que acopiaba oro de origen ilícito, lo refinaba en talleres clandestinos y lo enviaba al extranjero usando compañías de fachada. Youtube: Ministerio Público | República del Perú

El oro extraído ilegalmente, producto de la explotación de minas sin control, llegó a convertirse en un lucrativo negocio con destino en mercados internacionales. Con la complicidad de empresas fachada y cuentas bancarias controladas por testaferros, la organización ‘Los Kilates’ llegó a mover sumas millonarias, de acuerdo con las investigaciones fiscales. Durante un operativo realizado en diferentes regiones del país, la Policía y la Fiscalía lograron incautar lingotes de oro, miles de dólares y soles, e incluso desmantelar parte de la infraestructura utilizada para exportar el mineral hacia Emiratos Árabes Unidos, India y otros destinos.

La operación no solo reveló el modus operandi de la organización, sino que también destacó la creciente preocupación por el uso de documentos falsificados y el blanqueo de dinero proveniente de actividades ilegales. Las autoridades se centraron en la detención de varios miembros clave, incluyendo empresarios y operadores de empresas que actuaban como fachadas para ocultar el origen ilícito del oro. De esta manera, ‘Los Kilates’ logró eludir los controles aduaneros durante años, exportando el metal precioso de forma clandestina.

La ruta del oro: de las minas ilegales a las empresas de fachada

‘Los Kilates’ se benefició de la minería ilegal en varias zonas de Perú, donde miles de trabajadores extrajeron oro sin ningún tipo de regulación. Este oro, en su mayoría provenía de regiones como Madre de Dios, Nasca, Arequipa y Puno. Tras ser extraído de forma ilegal, el mineral pasaba por un proceso de refinado en talleres clandestinos, donde se transformaba en lingotes de oro que, una vez procesados, recibían un toque de legitimidad mediante documentos falsificados.

La ruta clandestina del oro
La ruta clandestina del oro ilegal: ‘Los Kilates’ y su red de lingotes y dinero en mochilas. Foto: Gobierno del Perú

Los cabecillas de la organización, como Erick Cuaresma, utilizaban las cuentas de empresas fachada para darle una apariencia legal a lo que en realidad era oro de origen ilegal. Estas empresas, con nombres aparentemente legítimos, eran las encargadas de exportar el oro a destinos internacionales.

Según los fiscales, se estableció una red de intermediarios que facilitaba las transacciones, logrando que el oro llegara a mercados como los de India, Emiratos Árabes Unidos y Hong Kong. Sin embargo, el sistema no era infalible. Los controles de Aduanas fueron burlados por la red, gracias a la falsificación de documentos, y en varios casos, el oro ilegal fue verificado como legítimo por expertos de los compradores extranjeros.

La complicidad de empresarios y testaferros

Uno de los hallazgos de las investigaciones fue el papel clave que desempeñaron los empresarios y los testaferros en la operación de ‘Los Kilates’. Los miembros de la organización no solo se dedicaban a la extracción ilegal del oro, sino que también contaban con aliados en el mundo empresarial que les ayudaban a lavar el dinero generado por sus actividades ilícitas.

La Fiscalía desmanteló una organización
La Fiscalía desmanteló una organización que acopiaba oro de origen ilícito, lo refinaba en talleres clandestinos y lo enviaba al extranjero usando compañías de fachada. Foto: Gobierno del Perú

Durante el operativo, se descubrió que las transferencias millonarias no solo involucraban a los cabecillas de la red, sino también a empresarios vinculados a empresas que operaban como fachadas. Entre los detenidos figura Geraldine Elizabeth Flores Romucho, quien tenía vínculos con una de las empresas utilizadas para exportar el oro ilegal. Según la investigación, la compañía Diamante Ge Metal Sur E.I.R.L., bajo su dirección, recibió más de dos millones de dólares por la exportación de oro extraído de manera ilegal.

De manera similar, se identificaron varias otras empresas que servían como cortinas de humo para blanquear el dinero proveniente de la venta ilegal de oro. Los involucrados en estas actividades transferían el dinero a cuentas bancarias que posteriormente eran retiradas por testaferros, quienes entregaban el efectivo en mochilas a los cabecillas de la organización. En total, se descubrió que la banda movió alrededor de 13 millones de dólares, la mayoría de los cuales fueron obtenidos mediante exportaciones fraudulentas de oro.

Operativo sorpresa: un golpe a la minería ilegal

En un esfuerzo por erradicar esta actividad, la Fiscalía realizó un megaoperativo coordinado entre diversas regiones del país. A través de allanamientos, la Policía y el Ministerio Público lograron desmantelar varias de las estructuras operativas de la banda. En total, se incautaron más de 2,2 kilos de oro, con un valor cercano a los dos millones y medio de dólares. Esta incautación representó solo una parte de lo que ‘Los Kilates’ había logrado exportar durante los últimos años.

'Los Kilates' burlaron durante años
'Los Kilates' burlaron durante años los controles aduaneros, exportando oro extraído de minas ilegales a destinos como India y Emiratos Árabes Unidos. Foto: Gobierno del Perú

Además de los lingotes de oro, las autoridades también confiscaron una significativa cantidad de dinero en efectivo. Se encontraron aproximadamente 180 mil dólares y más de 200 mil soles en efectivo en diversos inmuebles, algunos de los cuales pertenecían a los líderes de la banda. Uno de los puntos clave en la operación fue la captura de varios miembros de la organización, que fueron detenidos en Lima, Arequipa, Puno y Nasca.

Aunque las investigaciones continúan, el operativo de la Fiscalía permitió dar un golpe importante a la minería ilegal en el país, demostrando la complejidad y el alcance de las redes que operan en el sector.

‘Los Kilates’ no solo se dedicaban a la extracción ilegal de oro, sino que también implicaban a una red de empresarios, intermediarios y funcionarios que permitían que el oro llegara a los mercados internacionales sin que se levantara ninguna sospecha.