“Es categórico, no se va a renovar ese contrato de concesión del Proyecto Olmos”, aseguró el premier Gustavo Adrianzén al ser consultado sobre la continuidad del acuerdo adoptado con la concesionaria Trasvase Olmos S.A. (CTO), cuyo principal accionista es Novonor (nuevo nombre de la constructora Odebrecht). Ello, a seis meses de expirar la concesión y la solicitud de una prórroga por 10 años presentada por la empresa.
Adrianzén explicó que la decisión responde a la postura del Ejecutivo de no mantener vínculos con empresas relacionadas con casos de corrupción. “No se va a renovar ese contrato porque no hay condiciones, y porque el Estado peruano y el gobierno de la presidenta Dina Boluarte no nos casamos con la corrupción, ni con Odebrecht ni con ninguna de sus empresas fachada”, expresó en el marco de la inauguración del X Salón Internacional de Tecnología para la Defensa y Prevención de Desastres (SITDEF PERÚ 2025).
Sus declaraciones se dan a menos de seis meses de que expire la concesión del Proyecto Especial Olmos y la solicitud de la empresa al Gobierno Regional de Lambayeque a fin de prorrogar por 10 años más la concesión. La decisión de no renovar el contrato se alinea con un anuncio previo realizado en octubre de 2024 por el entonces ministro de Desarrollo Agrario y Riego (Midagri), Ángel Manero, quien ya había adelantado que no se otorgaría una prórroga a la concesionaria.
“Vamos a identificar un operador que se encargue de administrar esta infraestructura apenas venza el contrato que está vigente, y en paralelo se va a convocar a una asociación público-privada para buscar ahí no solo un operador que administre bien el proyecto, sino que permita su crecimiento”, declaró entonces en una conferencia de prensa.

En respuesta, el gobernador regional de Lambayeque, Jorge Pérez Flores, exhortó al premier a hacerse cargo de la indemnización. “¿El señor ministro va a sacar de su bolsillo casi medio millón de soles diarios para pagarle la indemnización a las empresas? Si es así, que esté listo con su billetera, porque tiene que pagarle la indemnización a los 3 mil millones de dólares que se han afianzado en Olmos”, declaró a la prensa.
Cabe mencionar que no es la primera vez que se expone el rechazo a las decisiones del Ejecutivo. Anteriormente, también ha descartado la posibilidad de transferir el proyecto al Midagri al considerar que no tendría la capacidad para manejar un proyecto de tal magnitud y que una transición podría causar retrasos perjudiciales. “Si el MEF, por medio de ProInversión, y el Midagri elongan capacidad de negociar las alternativas, no vamos a llegar ni siquiera a setiembre. Por cada día que no se da agua a la agroindustria, el Perú tiene que pagar cuantiosa millonada de plata”, criticó en diálogo con RPP.
Incluso, el pasado 4 de abril, el Consejo Regional de Lambayeque rechazó por mayoría la propuesta del integrante del gabinete ministerial de Dina Boluarte. Indicaron que la presentación del viceministro Iván Ramos no fue satisfactoria al responder solo tres de las 20 preguntas realizadas a fin de explicar las pretensiones del sector.
¿Qué es el Proyecto Olmos?
El Proyecto Especial Olmos es una de las obras de infraestructura más relevantes para la región de Lambayeque. Su objetivo principal es el trasvase de agua desde la cuenca del río Huancabamba hacia los valles de Olmos, lo que permite irrigar miles de hectáreas de tierras agrícolas y abastecer de agua a diversas comunidades. Este megaproyecto ha sido clave para el desarrollo económico de la región, al fomentar la actividad agrícola y generar empleo. Sin embargo, ha estado en el centro de la polémica debido a los vínculos de la concesionaria con la empresa brasileña implicada en múltiples casos de corrupción en América Latina.