La Municipalidad de Lima anunció el inicio de un ambicioso proyecto de infraestructura que busca aliviar la congestión vehicular y mejorar la calidad de vida de más de un millón de habitantes de Lima Sur. Según informó la entidad, se trata de la construcción de un puente vehicular elevado en la avenida Huaylas, en Chorrillos, que abarcará una extensión de 4,5 kilómetros y reducirá significativamente los tiempos de viaje en una de las zonas más transitadas de la capital peruana.
El plan, denominado “Creación del Servicio de Movilidad Urbana en un Paso a Desnivel Elevado”, forma parte del Plan Metropolitano de Desarrollo Urbano al 2040 (PLAN MET 2040) y tiene como objetivo principal reordenar el tránsito en el sur de la ciudad.
La obra, que contará con una inversión de 300 millones de soles, busca conectar de manera más eficiente el circuito de playas con la Panamericana Sur. De esa manera, mejora la infraestructura vial y promueve un desarrollo urbano sostenible.

Detalles de la obra
El puente vehicular elevado tendrá una longitud de 4,42 kilómetros y estará diseñado con dos carriles por sentido. La estructura contará con una altura libre de 5,50 metros, lo que permitirá un tránsito más fluido y seguro. Además, se incluirán cuatro rampas de bajada y tres rampas de acceso, distribuidas estratégicamente para optimizar la circulación en los puntos más críticos de la avenida Huaylas.
El proyecto también contempla la intervención de las calzadas a nivel, donde se implementará pavimento rígido, señalización vial horizontal y vertical, paraderos modernos y senderos peatonales. Estas mejoras buscan no solo beneficiar a los conductores, sino también a los peatones, ofreciendo una experiencia vial más eficiente y segura.

Tecnología avanzada
La construcción de esta infraestructura utilizará tecnología de última generación, según detalló la Municipalidad de Lima. Entre las técnicas que se emplearán destacan las columnas circulares y monocolumnas de concreto armado, pilones atirantados, vigas postensadas y rampas de suelo reforzado. Estas innovaciones garantizarán la durabilidad de la obra y su capacidad para soportar el tránsito constante en una de las zonas más concurridas de la ciudad.
El uso de estas tecnologías no solo asegura la resistencia de la obra, sino que también permite una ejecución más eficiente del proyecto, que tiene un plazo de construcción de 540 días calendario. Este enfoque busca minimizar las interrupciones en el tránsito durante el desarrollo de las obras.
El impacto de esta obra será significativo para los habitantes de Lima Sur, quienes actualmente enfrentan largos tiempos de viaje debido a la congestión vehicular. Según las proyecciones de la Municipalidad de Lima, el tiempo de traslado en la avenida Huaylas se reducirá de una hora y 20 minutos a tan solo 20 minutos, gracias a la implementación de esta vía rápida. Esto será posible al evitar 32 intersecciones a lo largo del recorrido, de las cuales 14 cuentan con semáforos.

Además de agilizar el tránsito, el proyecto incluye la creación de ciclovías, la reubicación de paraderos, la optimización del sistema semafórico y el mejoramiento de áreas verdes. Estas medidas no solo buscan mejorar la movilidad, sino también fomentar un entorno urbano más seguro y sostenible. La recuperación de espacios públicos complementarios también será parte de esta iniciativa, contribuyendo al bienestar de los ciudadanos.
La construcción de esta infraestructura se enmarca dentro del Anillo Vial 4, una de las principales estrategias del PLAN MET 2040 para mejorar la conectividad en la ciudad. Este anillo vial busca integrar de manera eficiente las principales arterias de Lima al facilitar el tránsito entre el sur de la ciudad y otras zonas clave, como la Costa Verde y la Panamericana Sur.