Darinka Ramírez se confesó frente a Magaly Medina y contó detalles de su vínculo con Jefferson Farfán, el mismo que no llegó a un romance como tal, pese a que tienen una hija juntos. El exfutbolista mantuvo en secreto la existencia de su última hija, aunque por mucho tiempo se convirtió en un secreto a voces.
Esta vez, la joven relató todo lo que vivió en la privacidad de su cercanía con Farfán. Sin embargo, en su descargo confesó que llegó a desarrollar sentimientos por el exdeportista, aunque desde el inicio tenía claro que no eran una pareja. En conversación con Magaly Medina, Darinka Ramírez abrió su corazón y afirmó que llegó a enamorarse de Jefferson Farfán.
“Después me di cuenta que yo estaba enamorada”, confesó, mientras explicaba las razones por las que nunca le daba la contra al exseleccionado peruano.
En ese sentido, confesó que luego de convertirse en madre creyó que la menor podía unirla con Farfán. En su cabeza se hizo idea de estar juntos como una familia, sin embargo esto nunca iba a suceder. “Al ya tener una hija, me hice una ilusión, en lo que saco mis conclusiones, de tener una familia, como toda mamá”, mencionó al respecto.
Además, explicó que el exdeportista era cercano a ella por su hija; sin embargo, también compartían tiempo juntos, hasta durmiendo, pero al día siguiente Farfán se iba de su casa, señalando que debía trabajar.
“Tenía un interés de estar presente, se hacía notar. Jugaba con ella y se quedaba a dormir con nosotras y ya por la mañana me decía que tenía que irse temprano porque tenía que trabajar”, expresó al respecto, destacando que sí tuvo intenciones de mantener un romance.
Jefferson Farfán nunca quiso una relación con Darinka Ramírez
Jefferson Farfán brindó declaraciones exclusivas en el programa América Hoy, donde aclaró las recientes acusaciones de Darinka Ramírez, madre de su hija, quien había señalado que él la había sacado de su casa para ganar privacidad. Farfán desmintió que hubiese existido alguna relación amorosa entre ellos, explicando que su único compromiso era con su hija. “Le dije a sus padres que me iba a hacer cargo de mi hija y que iba a ser responsable de ella”, afirmó, enfatizando que nunca prometió una relación sentimental.
En cuanto a la mudanza de Darinka, Farfán explicó que la decisión no fue para obtener privacidad, sino para mejorar las condiciones de vida de la niña. “Ella estaba en un tercer o cuarto piso de la casa donde vivía, y no había espacio”, comentó, detallando que el objetivo era proporcionar un entorno más adecuado y cómodo para su hija, alejado de cualquier preocupación sobre su vida personal.
Farfán también dejó claro que, aunque tenía una relación cordial con Darinka, esta nunca fue de pareja. Subrayó que su interacción con ella se basó en la paternidad y no en una relación amorosa, lo que fue comprendido tanto por él como por los padres de Darinka. Según el exfutbolista, siempre quedó claro que su compromiso era con su hija y no con ninguna otra persona.
Finalmente, Jefferson Farfán recalcó que las acusaciones de una relación formal con Darinka eran infundadas, y que lo único que quería era ser un buen padre para su hija. En todo momento, se mostró firme en su postura de que su vínculo con Darinka estaba centrado exclusivamente en su paternidad, sin que existiera una intención de formalizar ningún tipo de romance.
