
Una persona al día reclama que un policía no quiso recibirle una denuncia. Otra, que fue víctima de abuso de autoridad. Al menos dos más aseguran que la Policía actuó con negligencia frente a una situación que requeriría intervención inmediata. En apenas tres meses, los reclamos ciudadanos contra agentes del orden sumaron más de 1,100 en todo el país. La mayoría apuntó directamente a miembros de la Policía Nacional del Perú.
Este panorama ha sido detallado en el más reciente informe de la Oficina General de Integridad Institucional del Ministerio del Interior, que documenta el comportamiento de los servidores del sector. Entre enero y marzo del 2025, se registraron 1.121 quejas, de las cuales 889 estuvieron dirigidas exclusivamente a policía personal. Esto equivale a más de siete quejas por día hábil, lo que revela una preocupante tensión entre ciudadanos y efectivos encargados de brindar seguridad.
Negligencia, abuso de autoridad y negativa a atender denuncias
El principal motivo de queja fue el actuar negligente del personal policial, con 407 informes que señalan omisiones, inacción o respuestas inadecuadas ante situaciones que requerían intervención. Le siguen las acusaciones por abuso de autoridad (288), realización de actividades ajenas al deber institucional (93), negativa a recibir denuncias (87) y falta de atención frente a casos de violencia familiar (53).

Estos reclamos, canalizados a través de la Central Única de Denuncias (CUD), no necesariamente implican la comisión de un delito, pero sí alertan sobre conductas que contravienen los principios del servicio público. Aunque no tienen el mismo peso que una denuncia penal, permiten al Estado identificar patrones de mal desempeño y áreas críticas dentro de la Policía Nacional.
De las 1.121 quejas recibidas, 1.060 fueron derivadas a la Inspectoría General de la PNP para su evaluación y eventual sanción administrativa. Las demás fueron remitidas a otras dependencias, según la naturaleza y ubicación de los hechos reportados.
Lima lidera el ranking de inconformidad ciudadana
La capital del país concentra la mayor parte de las quejas presentadas: 697, lo que representa el 62% del total nacional. Le siguen La Libertad (55 quejas), Callao (52), Cusco (47) y Junín (29). Este patrón se ha mantenido en trimestres anteriores, según registros anteriores del Ministerio del Interior.
Especialistas en gestión pública explican que esta distribución podría estar relacionada tanto con el tamaño poblacional como con el mayor acceso de los ciudadanos urbanos a canales digitales de atención. También se sugiere que, en zonas donde la actividad policial es más intensa, aumentan las probabilidades de conflictos y, por ende, de reclamos.

Los mecanismos disponibles para presentar quejas incluyen la línea telefónica gratuita, formularios virtuales, atención por correo electrónico y oficinas físicas. Sin embargo, el subregistro sigue siendo una posibilidad, especialmente en zonas rurales o de difícil acceso.
¿Quiénes presentan más quejas? Perfil del denunciante
Los datos revelan que las personas de entre 41 y 65 años lideran la presentación de quejas, con un 36,2% del total. Les siguen los ciudadanos de entre 21 y 40 años (31%) y los mayores de 65 (9,6%). En cuanto al sexo, el 42.7% de las quejas fueron formuladas por hombres, mientras que el 38.9% provinieron de mujeres. El resto corresponde a informes que no especifican esta información.
El Ministerio del Interior destaca que estos datos permiten perfilar el tipo de usuario que más recurrir a los canales institucionales para expresar su disconformidad. Además, se observa que las mujeres presentan más quejas vinculadas a violencia familiar o negligencia en la atención de casos sensibles.
Jueves, once de la mañana: el pico de los reclamos

Un dato curioso del informe es que el mayor volumen de quejas se concentra los días jueves, con el 17% de los reportes. En cuanto a la hora, las 11:00 de la mañana fue el momento más frecuente de presentación, con un 7.6% de los casos ingresados en ese horario.
Estas cifras podrían estar vinculadas a los horarios laborales de los usuarios, pero también reflejan la actividad operativa de la Policía durante la semana. La mayoría de los reclamos son procesados a través del sistema de la CUD, que permite una trazabilidad del caso desde su ingreso hasta su resolución.
Desde el Ministerio del Interior se insiste en que estas quejas, aunque no son denuncias penales, cumplen un papel esencial en la mejora institucional, ya que permiten detectar medidas fallidas recurrentes en el trato al ciudadano y tomar correctivas. Mientras tanto, los datos continúan creciendo y evidencian una realidad que, para muchos, no sorprende: la distancia entre la Policía y la ciudadanía sigue siendo un reto por cerrar.