Había dedicado su vida a disfrutar de la naturaleza, con especial cariño por el mar. Con 71 años, era conocida por su energía y constancia: todos los días acudía a la playa Waikiki de Miraflores para caminar y pasar el día en compañía de amigas. Sofía del Pilar Paredes encontró la muerte en el mismo lugar donde solía encontrar tranquilidad, tras un accidente que conmocionó a quienes presenciaron la escena.
La tragedia ocurrió al finalizar una jornada de playa. Sofía se encontraba dentro de su camioneta, junto a una amiga, cuando el vehículo comenzó a moverse de forma inesperada. En cuestión de segundos, el auto perdió el control, se volcó y la puerta del lado del piloto se abrió. Paredes cayó al pavimento, y el peso de la camioneta —de más de una tonelada— terminó aplastándola.
Intentó maniobrar el vehículo, pero ocurrió lo inesperado
Según sus familiares, Sofía habría confundido el pedal del freno con el del acelerador. En lugar de detenerse, el vehículo avanzó bruscamente, tumbó un poste de señalización y cayó desde un desnivel sin protección. Uno de los presentes relató para América Noticias : “Ha querido retroceder su auto y ha acelerado. Ha tumbado un poste con señal, y parece que cuando el carro ha caído, la aplastó”.
Las primeras personas en llegar a auxiliar a las víctimas fueron bañistas y socios del club cercano. Más de diez hombres se unieron para voltear el vehículo y liberar a Sofía, atrapada debajo del pesado auto. Su acompañante, que también sufrió heridas, fue trasladada con múltiples contusiones.
Los familiares confirman que no llevaban cinturón de seguridad
Hasta el lugar del accidente llegaron familiares de la víctima, quienes confirmaron que Sofía no llevaba puesto el cinturón de seguridad al momento del siniestro. También señalaron que la mujer había cometido un error al momento de conducir. “Ella amaba el mar, siempre venía a Miraflores a disfrutar de la playa”, indicaron con pesar.
El accidente ha generado cuestionamientos sobre las condiciones de seguridad en la zona utilizada como estacionamiento. No hay barreras de contención que impidan que un vehículo se desplace hacia la frontera, lo que pudo haber prevenido el desenlace fatal. El espacio, frecuentado por deportistas y vecinos de la zona, carece de infraestructura adecuada para emergencias de este tipo.
Testigos actuaron antes que llegaran los bomberos
En medio de la confusión y desesperación, fueron los propios usuarios del club quienes actuaron para intentar salvar a la mujer atrapada. Algunos testigos revelaron que muchos pensaban esperar a los bomberos, pero otros decidieron intervenir de inmediato. “Fueron los mismos socios los que movieron el carro porque las personas querían esperar a que lleguen los bomberos”, contó un comerciante a América Noticias.
Pese a los esfuerzos, Sofía fue trasladada en estado crítico a la clínica Good Hope, donde los médicos no lograron estabilizarla. Su amiga, aunque herida, se encuentra fuera de peligro.
Zona sin protección y riesgo para bañistas
La ausencia de un muro de contención en la zona de estacionamiento ha sido una de las principales observaciones tras el accidente. Quienes frecuentan esta área advierten que es común que los vehículos queden estacionados cerca de los bordes, sin mayor protección. Esto representa un riesgo permanente, especialmente para personas mayores o conductores con dificultades de movilidad.
Sofía Paredes era parte de una comunidad activa que día a día se reúne en la playa Waikiki. Su muerte ha dejado consternados a quienes la conocían y ha abierto el debate sobre la necesidad de mejorar las condiciones de seguridad en espacios públicos frecuentados por adultos mayores.
