La carrera electoral rumbo al 2026 comenzó oficialmente el 25 de marzo, cuando el Gobierno publicó la convocatoria a elecciones generales. La decisión se tomó dos semanas antes del límite legal, el 12 de abril, lo que encendió motores en una escena política marcada por la fragmentación y la desconfianza ciudadana. Hoy, 41 partidos políticos figuran en el Registro de Organizaciones Políticas del Jurado Nacional de Elecciones. Todos tienen luz verde para presentar candidatos a la presidencia, vicepresidencias, Congreso y Parlamento Andino.
Jorge Zapata, presidente de la Confederación Nacional de Instituciones Empresariales Privadas (CONFIEP), expresó su preocupación por el volumen de candidaturas. “En el Perú no tenemos más de 40 ideologías, ni en el mundo. No debemos tener más de 40 candidatos, porque será una elección inmanejable”, afirmó. Según su lectura, la dispersión política no solo puede confundir al votante, sino también minar la legitimidad del resultado final.
El mensaje de Zapata no apunta a eliminar partidos, sino a impulsar alianzas. “Tenemos que hacer todos los esfuerzos posibles para no llegar a una elección de esa forma que se viene planteando hasta ahora”, advirtió.
El exceso de oferta política

Desde hace más de una década, la fragmentación partidaria se convirtió en una característica constante del sistema político peruano. La mayoría de agrupaciones no cuenta con bases sólidas ni presencia territorial estable. Muchas desaparecen después de cada proceso electoral por no superar la valla mínima de representación.
A esto se suma un problema de fondo: la desafección ciudadana. “El clima de falta de institucionalidad y de representatividad de los partidos políticos está muy deteriorado”, señaló Zapata. La desconfianza hacia la clase política crece en medio de denuncias por corrupción, cambios improvisados de bancada y ausencia de propuestas claras. En este contexto, la proliferación de partidos complica más que enriquece la oferta electoral.
El empresariado, desde CONFIEP, no se plantea respaldar candidaturas específicas. “Ese no es nuestro rol”, aclaró su presidente. Pero sí llama a “ordenar un poco para llegar a una elección con alternativas claras, concretas y fáciles de ser percibidas por el ciudadano”. Una papeleta sobrecargada, según remarcó, podría generar caos. “La gente se va a confundir, se va a aburrir de votar, probablemente no encuentre a su candidato”.
La división ideológica también influye en este escenario. Pero Jorge Zapata considera que, paradójicamente, puede abrir la puerta a pactos programáticos. “La polarización también agrupa. Hay grupos que están en los dos extremos y polarizan. Que se junten en una sola propuesta, igual ¿no?”, planteó. La idea de bloques que representen líneas programáticas reconocibles aparece como una salida frente a la sobrecarga de opciones.
En ese sentido, el presidente de la CONFIEP considera fundamental que las alianzas no respondan únicamente a cálculos electorales, sino a afinidades reales. “Necesitamos hacerlo porque el clima de violencia que está viviendo el país (…) nos obliga a buscar una elección coherente, una elección que la gente la pueda entender”.
Una elección que pone a prueba al sistema

La presencia de 41 partidos en competencia es, también, un reflejo de las reglas vigentes. Los requisitos para inscribirse como partido político fueron flexibilizados por decisiones del Congreso, que aprobó reformas para eliminar la obligación de presentar firmas físicas, reemplazándolas por afiliaciones digitales. Este cambio redujo las barreras de entrada, pero abrió la puerta a organizaciones con escaso respaldo real.
Además, la eliminación de las elecciones primarias abiertas debilitó la posibilidad de depuración interna. Varios partidos optan por elegir a sus candidatos a través de métodos indirectos o cerrados, lo que limita la participación ciudadana y facilita decisiones cupulares. “Necesitamos ir a una elección donde la gente pueda inclinarse fácilmente por su preferencia, por unos programas y propuestas que se identifiquen con ellos plenamente”, sostuvo Zapata.
El escenario plantea un reto no solo para los organismos electorales, sino también para los medios de comunicación, que deberán cubrir campañas de decenas de listas con recursos limitados. Y para los votantes, que enfrentarán una cédula extensa, posiblemente con nombres desconocidos.
Lista de los 41 partidos inscritos

- Acción Popular
- Ahora Nación
- Alianza para el Progreso - APP
- Avanza País - Partido de Integración Social
- Batalla Perú
- Fe en el Perú
- Frente Popular Agrícola FIA del Perú
- Fuerza Popular
- Juntos por el Perú
- Libertad Popular
- Nuevo Perú por el Buen Vivir
- Partido Aprista Peruano
- Partido Ciudadanos por el Perú
- Partido Cívico Obras
- Partido de los Trabajadores y Emprendedores PTE-Perú
- Partido del Buen Gobierno
- Partido Demócrata Unido Perú
- Partido Demócrata Verde
- Partido Democrático Federal
- Partido Democrático Somos Perú
- Partido Frente de la Esperanza 2021
- Partido Morado
- Partido País para Todos
- Partido Patriótico del Perú
- Partido Político Cooperación Popular
- Partido Político Fuerza Moderna
- Partido Político Nacional Perú Libre
- Partido Político Perú Acción
- Partido Político Perú Primero
- Partido Político Peruanos Unidos: ¡Somos Libres!
- Partido Político Pueblo Unido
- Partido Popular Cristiano - PPC
- Partido Primero la Gente
- Partido Progresemos
- Partido Progresista del Perú
- Partido Proyecto Integral del Perú
- Partido Reconstrucción con Obras
- Partido Renacer Andino
- Partido Renovación Popular
- Partido Todos por el Perú
- Unión por el Perú