
El paro de transportistas anunciado para este jueves 10 de abril ya viene generando incertidumbre entre estudiantes, docentes y personal administrativo de diversas universidades en Lima y Callao. Ya algunas casas de estudios vienen informando, a través de sus canales oficiales, que por este día las lecciones serán virtuales.
La Universidad Peruana Cayetana Heredia fue una de las primeras que comunicó a su personal docente y alumnado que mañana jueves se decidió que se suspendan las clases presenciales “para garantizarla seguridad y el bienestar” de su comunidad. “Por tal motivo, informamos que todas las actividades académicas y administrativas se desarrollarán de manera virtual durante dicha jornada”, indicó en su pronunciamiento difundido en redes sociales.
Otra que sumó fue la Universidad de Lima. De igual forma, mediante un comunicado compartido en su Facebook, confirmó que suspenderá sus clases presenciales. “Debido al anuncio del paro de transportistas, el jueves 10 de abril todas la clases serán virtuales. Las labores administrativas continuarán de forma presencial”, detalló. Además, la institución educativa precisó que, en caso de dificultades en el transporte, habrá tolerancia en el horario de ingreso y la posibilidad de recuperar horas para quienes no puedan asistir.
La Universidad de Piura también informó que mañana las clases de pregrado serán virtuales. “Por ello, les pedimos estar atentos a la publicación que harán sus profesores en CANVAS, con el link de Teams al que accederán para sus clases”, agregaron.
En la víspera, fuentes del sector académico adelantaron que varias universidades evaluaban adoptar medidas similares a las aplicadas durante el paro del pasado lunes 7 de abril. En esa ocasión, instituciones como la Pontificia Universidad Católica del Perú (PUCP), la Universidad Nacional Mayor de San Marcos (UNMSM) y otras optaron por dictar clases virtuales y aplicar esquemas de asistencia flexible (no se cuentan tardanzas ni faltas), con el fin de evitar exponer a sus comunidades a dificultades de transporte o riesgos de seguridad.
Aunque todavía falta el pronunciamiento de algunas universidades respecto al 10 de abril, es bastante probable que se repita la dinámica del lunes anterior. Ese día, varias universidades decidieron permitir que su personal docente y administrativo ingresara más tarde o trabajara de forma remota. En otros casos, las actividades se desarrollaron completamente en entornos digitales.

Las medidas adoptadas anteriormente respondieron al paro parcial realizado por un sector del transporte en Lima norte, que causó una reducción significativa de unidades en circulación. Ello provocó retrasos, desorden en los paraderos y dificultades para decenas de pasajeros.
El escenario previsto para este jueves es aún más amplio: la Asociación Nacional de Integración de Transportistas (Anitra) anunció acatarán la medida más de 20 mil vehículos, pertenecientes a 460 empresas, lo que podría afectar zonas clave de la capital, como la Panamericana Norte, la Panamericana Sur, la Vía de Evitamiento y el centro de Lima.
20 mil unidades
De acuerdo con Martín Valeriano, presidente de Anitra, esta paralización busca visibilizar la falta de respuesta del Estado frente a los casos de extorsión y asesinatos que sufren conductores del transporte urbano. “Ya no podemos esperar más, nos siguen pidiendo plazos y más plazos, pero siguen matando a nuestros compañeros choferes”, declaró a América Noticias. El gremio también convocó a una marcha hacia la sede del Congreso de la República, en el centro histórico de la ciudad.

En la jornada del 7 de abril, el asesinato de Loymer Noé Benigno, chofer de la empresa Etuchisa, motivó una movilización desde Puente Piedra hasta la sede parlamentaria. La protesta incluyó bloqueos en importantes vías del norte de Lima y dejó al descubierto el impacto que estas paralizaciones pueden tener en el funcionamiento regular de los servicios urbanos, incluido el educativo.
El Ministerio del Interior, bajo la dirección de Julio Díaz Zulueta, no ha emitido hasta ahora un pronunciamiento sobre medidas especiales de seguridad ante el paro. Tampoco se ha informado de un operativo de contingencia para el transporte público. En ese contexto, la decisión de algunas universidades de modificar su operatividad para el 10 de abril dependerá en buena parte de cómo evolucione la situación en las calles en las próximas horas.
Paralización más amplia
Por ahora, lo único claro es que el transporte público en Lima y Callao enfrentará posiblemente una de las paralizaciones más amplias de los últimos meses. La posibilidad de que las clases presenciales se suspendan o migren al entorno virtual permanece abierta, aunque sin confirmaciones oficiales hasta este momento.

Al cierre de esta edición, no se ha difundido ningún comunicado formal por parte de las principales universidades del país. Sin embargo, se espera que durante el miércoles 9 o en las primeras horas del jueves 10, las instituciones actualicen a sus comunidades sobre las modalidades de enseñanza que se adoptarán ese día.
La comunidad universitaria permanece atenta a cualquier novedad, mientras estudiantes y docentes comienzan a prepararse para posibles clases virtuales o reprogramaciones. Todo dependerá de la evolución de la jornada y del nivel de impacto que logre el paro en la operatividad del transporte urbano en la capital.