La noche del lunes 17 de marzo, en su esperado concierto en Lima, Joaquín Sabina hizo una pausa en su espectáculo para pronunciarse sobre una noticia que conmocionó a todo el Perú, el asesinato de Paul Flores, el querido ‘Russo’ de la orquesta Armonía 10.
El reconocido cantautor español, quien se encontraba en la capital peruana como parte de su gira de despedida “Hola y adiós”, no pudo evitar expresar su dolor ante tan trágica noticia. “Es una cosa abominable”, fue lo primero que dijo Joaquín Sabina, al comienzo de su presentación, cuando se dirigió a los miles de fanáticos presentes en el Multiespacio Costa 21.
El trágico deceso de Paul Flores, quien fue víctima de un ataque armado en la madrugada del domingo 16 de marzo mientras viajaba en autobús con sus compañeros de Armonía 10, dejó un vacío en la música peruana. Su asesinato ocurrió en circunstancias desgarradoras, cuando el cantante, conocido por su carisma y talento, se encontraba en camino a su próximo concierto., en Santa Clara.
La noticia se esparció rápidamente, y la consternación invadió al país. En este contexto, Joaquín Sabina, quien es una de las figuras más destacadas de la música internacional, se sumó a las voces que lamentaron la pérdida de un artista tan querido por el público peruano.
La despedida de Joaquín Sabina a Paul Flores
En medio de su actuación, Joaquín Sabina no solo habló de la tragedia, sino que reflexionó sobre el impacto de la muerte de un cantante en la población, en este caso, Perú. “No puedo dejar de decir que ayer (16 de marzo) nos despertamos con una malísima y trágica noticia. A Paul Flores, el cantante de la banda Armonía 10, lo asesinaron”, dijo Sabina.
“Asesinar a un cantante o a un músico es una cosa abominable, porque es asesinar el alma de la gente, como pasó con John Lennon o con Selena en México”, expresó con profundo sentimiento. Para él, la muerte de artistas como Paul Flores tiene un peso aún mayor, ya que estos músicos no solo dejan un legado de canciones, sino que forman parte de la identidad cultural de la comunidad.
Con su estilo característico, Joaquín Sabina no solo lamentó la pérdida de Paul Flores, sino que también reflexionó sobre la importancia de la música en la vida de las personas. “Es una atrocidad”, añadió, haciendo eco al dolor de muchos peruanos.
La ovación de un conmovido público
El cantante, vestido con su característica camiseta negra, blazer y sombrero hongo, tomó asiento en medio del escenario mientras dedicaba unas palabras a Paul Flores. Este homenaje, aunque breve, fue uno de los momentos más emotivos de la noche, donde Joaquín Sabina demostró su solidaridad con Perú y recibió la ovación de su público.
Dicho esto, continuó ofreciendo un recorrido por sus grandes éxitos, entre ellos Por el bulevar de los sueños rotos, 19 Días y 500 Noches y Dónde habita el olvido. A lo largo de la noche, el español compartió momentos de su vida personal, lo que permitió a sus seguidores conocer un lado más cercano y humano de él.
“No podía dejar de incluir a Lima en esta gira porque ocupa la mitad de mi corazón”, confesó a sus fans, mostrando su afecto por la ciudad que lo ha acogido durante tanto tiempo. Además, reveló una entrañable anécdota sobre su vida personal: “Desde hace más de 30 años, vivo felizmente casado con una limeña que me ha dado mucha alegría”.
El cantante se despidió de la audiencia con la poesía y nostalgia que siempre lo han caracterizado, deleitando al público con clásicos que han marcado su carrera del cantautor.
