
El Servicio Nacional de Meteorología e Hidrología del Perú (Senamhi) emitió un aviso de alerta naranja para 15 regiones del país, entre ellas Lima (provincia), debido a un fenómeno meteorológico peligroso que se prevé iniciará mañana, lunes 17 de marzo.
La alerta, que tendrá una duración de 24 horas, anticipa precipitaciones de diversa intensidad, que incluyen lluvias, granizo, nieve y aguanieve. Este fenómeno afectará principalmente a la costa norte y la sierra central y sur del Perú.
El aviso naranja, que es una de las tres categorías del sistema de alertas del Senamhi, se activa cuando se prevén fenómenos meteorológicos que pueden generar condiciones de riesgo para la población. En este caso, la alerta afecta a los departamentos de Lima, Piura, Tumbes, Lambayeque, La Libertad, Áncash, Apurímac, Arequipa, Ayacucho, Cajamarca, Cusco, Huancavelica, Junín, Pasco y Puno.

Según el pronóstico del Senamhi, se esperan acumulados de lluvia que podrían superar los 35 mm/día en algunas zonas de la costa norte y hasta 25 mm/día en las zonas más altas de la sierra norte.
De acuerdo con las proyecciones, este fenómeno se extenderá hasta la noche del martes 18 de marzo, cuando el nivel de alerta será reducido a amarillo, indicando que la situación seguirá siendo monitoreada, aunque sin los riesgos de intensidad del aviso naranja. No obstante, los efectos de las precipitaciones y sus consecuencias podrían seguir siendo evidentes, como lo señaló el Instituto Nacional de Defensa Civil (Indeci), que también alertó sobre los peligros potenciales del evento.
Posibles consecuencias
Las precipitaciones que se esperan son de moderada a fuerte intensidad y estarán acompañadas de descargas eléctricas y ráfagas de viento de hasta 35 km/h. El Senamhi ha especificado que el evento se caracterizará por la ocurrencia de granizo en áreas por encima de los 2.800 metros sobre el nivel del mar (msnm), y nieve en aquellas que superen los 4.000 msnm. Las lluvias podrían provocar inundaciones repentinas en áreas rurales y urbanas, afectando tanto la infraestructura vial como las actividades agrícolas.

En el pasado, las precipitaciones pluviales han sido ya responsables de varios impactos en el territorio nacional. En la costa norte y en la sierra, se ha registrado desbordes de ríos, así como anegamientos y deslizamientos de tierra, lo que ha afectado las comunicaciones y la seguridad vial. Por otro lado, los cultivos más afectados incluyen arroz, maíz y plátano, productos esenciales para la economía local, especialmente en zonas de Piura y Lambayeque.
Medidas de prevención
Frente a la gravedad del fenómeno, el Indeci emitió una serie de recomendaciones para las autoridades locales y regionales, así como para la población en general. En primer lugar, solicitó que se mantengan despejadas las rutas de evacuación, y que estas estén debidamente señalizadas para garantizar que los ciudadanos puedan acceder a zonas seguras si las condiciones empeoran. Además, se exhortó a las autoridades de salud, bomberos y comisarías a estar preparadas para actuar ante cualquier emergencia.
Para los residentes de las áreas más vulnerables, el Indeci recomendó reforzar los techos de sus viviendas y establecer sistemas de alerta temprana, como silbatos, campanas o alarmas, en coordinación con las autoridades locales. Esta medida busca reducir el riesgo de afectaciones más graves en caso de que las precipitaciones se intensifiquen.

A su vez, el Centro de Operaciones de Emergencia Nacional (COEN) ha intensificado su monitoreo y coordinación con las autoridades regionales para mitigar los efectos del evento meteorológico. Se han desplegado equipos especializados para la limpieza de ríos y la habilitación de vías de comunicación, especialmente en las regiones más afectadas por las lluvias.
Monitoreo de las condiciones
El COEN y las autoridades meteorológicas continúan vigilando el desarrollo de este fenómeno, que se podría ver influenciado por otros factores climáticos en el futuro cercano. En particular, el Estudio Nacional del Fenómeno El Niño (Enfen) está evaluando si el calentamiento de las aguas del mar en la costa norte podría derivar en un evento de El Niño Costero, lo que intensificaría aún más las precipitaciones.
Aunque por el momento se ha descartado la presencia de La Niña Costera —que implicaría un enfriamiento anómalo del mar— las lluvias seguirán siendo una constante en las próximas semanas, especialmente en las regiones mencionadas. La especialista en gestión de riesgos Katy Rivera destacó que las lluvias seguirán afectando todo marzo las zonas de Tumbes y Piura, regiones que ya están experimentando desbordes de ríos y problemas con las infraestructuras.