A partir de mañana, viernes 14 de marzo, Lima y 12 regiones del país se verán afectadas por un fenómeno meteorológico de características peligrosas, según el aviso n.º 077 del Servicio Nacional de Meteorología e Hidrología (Senamhi). La alerta naranja se emitió para las autoridades y la población, ya que este evento trae consigo una serie de condiciones adversas que podrían poner en riesgo la seguridad.
De acuerdo al pronóstico del Senamhi, se trata de la ocurrencia de nevadas, granizo, aguanieve y lluvias intensas que azotarán la sierra centro y sur del país. La afectación será específicamente en las regiones de Áncash, Apurímac, Arequipa, Ayacucho, Cusco, Huancavelica, Huánuco, Junín, Lima, Moquegua, Pasco, Puno y Tacna.
Aunque Lima será una de las más afectadas, cabe destacar que no se trata de la zona metropolitana, sino la parte rural, particularmente la sierra, que se enfrentará a las peores condiciones del fenómeno, cuya duración se extiende hasta el sábado 15 de marzo.
Según el aviso meteorológico, este evento será marcado por intensas precipitaciones que provocarán acumulados de nieve de hasta 9 cm en la sierra sur, y hasta 6 cm en la sierra centro. Además, las lluvias estarán acompañadas de ráfagas de viento superiores a los 35 km/h, lo que podría generar condiciones aún más peligrosas en las zonas más altas, donde se prevé que las precipitaciones alcancen los 2800 metros sobre el nivel del mar.
Pasará a alerta amarilla
Para el sábado 15 de marzo, la intensidad del fenómeno disminuirá y se reducirá a una alerta amarilla, que indica un menor nivel de peligro en comparación con el nivel naranja actual. Mientras que el aviso naranja es una advertencia de peligro inminente debido a las condiciones meteorológicas extremas, el nivel amarillo solo implica la posibilidad de que el fenómeno continúe, pero con menores intensidades y un menor riesgo directo para la población.
Las autoridades competentes ya advirtieron sobre los daños que este fenómeno peligroso podría causar en las rutas de acceso de las zonas más remotas, en especial para las personas que habitan a gran altura, por lo que se recomienda a los habitantes de estas áreas estar preparados y seguir las recomendaciones de las autoridades.
Por otro lado, se prevé que las intensas lluvias que acompañarán al fenómeno también afecten a las zonas del norte y centro de la sierra, con acumulados de hasta 30 mm/día en la costa norte, 25 mm/día en la sierra norte, y hasta 18 mm/día en la sierra centro.
En la sierra sur, el pronóstico es aún más preocupante, ya que las precipitaciones podrían superar los 15 mm/día. Además de los inconvenientes que esto puede generar en las vías de comunicación, las autoridades advierten sobre el peligro que representa la caída de granizo y la posible formación de deslizamientos.
¿Qué dice el Indeci?
El Instituto Nacional de Defensa Civil (Indeci) también emitió una serie de recomendaciones a las autoridades locales y regionales para que se aseguren de que las rutas de evacuación estén despejadas y que los centros de salud y unidades de emergencia estén operativos ante posibles eventualidades.
Asimismo, instó a la población en las zonas posiblemente afectadas a tomar medidas preventivas, como no caminar sobre la nieve y mantener a los animales en refugios seguros para evitar que queden expuestos a las inclemencias del clima. Además, se recomendó evitar viajar en vehículos durante el fenómeno y mantenerse informado sobre el estado de las carreteras.
Si bien el nivel de alerta naranja es sinónimo de grave peligrosidad, la transición a alerta amarilla significa que el fenómeno pierde fuerza, pero aún se mantiene la posibilidad de condiciones adversas que deben ser monitoreadas. Las autoridades enfatizan que el hecho de que se emita una alerta amarilla no significa que el riesgo haya desaparecido por completo, sino que solo hay una disminución de la severidad de los efectos del fenómeno.
A medida que el fenómeno avanza, se espera que el Indecia siga monitoreando de cerca su evolución y coordine con las autoridades locales y regional para garantizar una respuesta rápida y efectiva. Sin embargo, es crucial que la población continúe atenta y siga las instrucciones para evitar sorpresas y daños innecesarios.
Este fenómeno meteorológico es solo un recordatorio de la vulnerabilidad de ciertas zonas ante los cambios bruscos en las condiciones climáticas. A pesar de que el pronóstico indique una mejora para el 15 de marzo, las autoridades insisten en que la alerta debe mantenerse activa para no bajar la guardia.
