Una adulta mayor tiktoker, quien aparentaba que todo iba bien, fue descubierta vendiendo droga en su domicilio, ubicado en el Callao. A pesar de que negó en un primer momento, luego confesó realizar esta actividad ilícita. Pero la señora no solo vendía, sino que también fiaba a sus clientes que no tenían dinero.
“No me grabes, por favor”, fueron sus primeras palabras al observar que iba a ser intervenida por la Policía Nacional del Perú en su vivienda. La detenida fue identificada como María Calandria Pacora Prado, de 69 años, quien no era la primera vez que su nombre estaba registrado en los atestados policiales.
De acuerdo con Panamericana Televisión, no solo se encargaba de vender a un precio accesible, sino que también les fiaba. Es así como los jóvenes acudían con frecuencia. El comandante precisa que esta se ha vuelto una modalidad utilizada por parte de los ciudadanos para pasar desapercibidos.
“Ahora se está utilizando a las personas adultas. Efectivamente, una persona de la tercera edad que ya debería estar en su casa. Esta es la nueva impunidad. Así como se utilizaba a los menores, ahora se busca a las personas adultas”, mencionó.
Sin embargo, algunos familiares buscaron impedir la intervención y el traslado de esta mujer a la comisaría. El comandante aseguró que se vieron sorprendidos de que ella se encontrara libre, debido a que continuaba con la venta.
Pacora Prado recibía a los clientes en la puerta de su casa, donde en el mismo momento le pagaban. Esta vez, no tenía temor de volver a ser arrestada.
¿Qué dice la ley?
El año pasado, se implementaron modificaciones significativas en el Código Penal, estableciendo nuevas disposiciones para los adultos mayores de 80 años que enfrentan procesos judiciales o cumplen sentencias condenatorias. Según informó el diario oficial El Peruano, la norma incorpora un tercer párrafo al artículo 22, que detalla medidas alternativas a la prisión preventiva y a las sentencias privativas de libertad para este grupo etario.
Es así como los adultos mayores de 80 años estarán sujetos a las disposiciones de los artículos 288 y 290 del Nuevo Código Procesal Penal, que regulan las condiciones bajo las cuales se pueden aplicar medidas sustitutivas a la prisión. Estas modificaciones buscan garantizar que las personas de edad avanzada puedan cumplir sus condenas bajo condiciones menos restrictivas, como el arresto domiciliario, en lugar de ser recluidas en centros penitenciarios.
De acuerdo con las declaraciones del juez Chávez, antes de aprobarse esta ley, la legislación peruana no discriminaba entre los tipos de delitos cometidos por adultos mayores. Esto significa que, incluso en casos de delitos graves, como terrorismo o violación sexual, los responsables serán procesados y sancionados conforme a la legislación vigente. Sin embargo, el magistrado subrayó que existen disposiciones legales que permiten una reducción de la pena en circunstancias específicas, como problemas de salud, siempre que estas condiciones sean verificadas por especialistas médicos.
El juez explicó que esta reducción de la pena no está vinculada al tipo de delito, sino a factores biológicos y físicos inherentes al envejecimiento humano.
