El incendio que consume un almacén clandestino en el jirón Cangallo, Cercado de Lima, podría tardar más de un día en ser controlado. Según informó el Brigadier General de los Bomberos, Alfonso Panizo Otero, la falta de acceso y el colapso parcial del inmueble han complicado las labores de los bomberos, quienes enfrentan condiciones de alto riesgo para sofocar las llamas.
“El edificio está construido con concreto, lo que le da resistencia, pero dentro hay colapsos parciales. Hay pedazos de techo que se han caído, vigas y viguetas dobladas por el calor, fierro expuesto, y todo esto genera un gran riesgo para los bomberos”, declaró Panizo Otero a RPP Noticias.
Por su parte, el vocero de la Municipalidad Metropolitana de Lima, Mario Casaretto, confirmó que el lugar operaba como un depósito clandestino de juguetes, sin licencia de funcionamiento ni certificación de Defensa Civil.
Falta de escaleras complica las labores de los bomberos
Uno de los problemas más graves que enfrentan los bomberos es la ausencia de escaleras adecuadas para acceder al fuego. Panizo Otero cuestionó cómo el edificio obtuvo licencia de construcción sin estos elementos básicos de seguridad o por qué la municipalidad no lo clausuró a tiempo debido a la falta de instalaciones de prevención contra incendios. Estas estructuras son indispensables para que los bomberos puedan actuar en emergencias de esta magnitud, y su ausencia ha complicado gravemente las labores de extinción.
“La regulación establece que deben existir escaleras porque son nuestra vía expresa. Son los accesos que usamos para ingresar y apagar un incendio. Si un edificio no las tiene o no son a prueba de fuego y humo, se convierte en una trampa mortal”, afirmó.
Sin embargo, en este caso, la edificación no disponía de ninguna de estas estructuras, lo que ha limitado severamente la capacidad de respuesta. “Claramente es imposible hacer nada. Nos han quitado todos los elementos que cualquier regulación del mundo establece para que podamos trabajar en este tipo de emergencias”, concluyó Panizo Otero.
Sin embargo, indicó que el personal de bomberos está logrando acceder a las zonas donde el fuego sigue activo utilizando escaleras telescópicas. Este equipo les permite llegar a sectores elevados de la estructura para seguir combatiendo las llamas, aunque las condiciones siguen siendo de alto riesgo.
Mientras las llamas continúan activas en algunos sectores del edificio, los bomberos enfrentan condiciones adversas en su lucha por sofocar el incendio y evitar que el fuego se propague a inmuebles vecinos.
Falta de rociadores y equipos de agua dificultan el control del incendio
El Brigadier General de los Bomberos advirtió que el edificio siniestrado tampoco contaba con rociadores de agua, un elemento fundamental para el control del fuego y exigido por la normativa de construcción. Según explicó, estos sistemas deben estar instalados para que una edificación pueda obtener su licencia de construcción.
“Las edificaciones tienen que cumplir con una regulación para que les den licencia. No tienen rociadores, no tienen sistemas de agua, no tienen acceso, no hay escaleras, cortafuegos. No somos magos”, señaló. La ausencia de estos equipos ha complicado las labores de los bomberos.
Incendio en Cercado de Lima expone deficiencias en la fiscalización de edificaciones
El incendio que lleva más de 20 horas en un edificio del Cercado de Lima ha puesto en la mira la eficacia de la fiscalización en materia de seguridad contra incendios. En el Perú, el Reglamento Nacional de Edificaciones (RNE) establece normas claras para la protección contra incendios, incluyendo escaleras de evacuación, sistemas de alarma y medios de extinción. Sin embargo, el cumplimiento de estas disposiciones depende de una fiscalización constante por parte de las autoridades.
De acuerdo con la Norma Técnica A.130, los edificios deben contar con escaleras de emergencia con un ancho mínimo de 1.20 metros, resistencia al fuego de hasta 2 horas y salidas despejadas. Además, es obligatorio implementar detectores de humo, rociadores de agua y extintores para minimizar los riesgos en caso de siniestros.
A pesar de estas regulaciones, muchos inmuebles no cumplen con las medidas exigidas, ya sea por falta de supervisión o control insuficiente por parte de las municipalidades y entidades fiscalizadoras. El incendio en Cercado de Lima ha reavivado el debate sobre si los mecanismos de inspección son efectivos para garantizar la seguridad en las edificaciones y prevenir emergencias de gran magnitud.
