Shirley Rodríguez, una joven residente en el distrito de San Martín de Porres, Lima, denunció haber sido detenida “arbitrariamente” por la Policía Nacional del Perú (PNP) tras ser acusada de estafa. Según lo expresado por la joven, todo comenzó cuando ella vendió su laptop en 2024 a una persona, pero no recibió el pago acordado. A pesar de que intentó denunciar este hecho, las autoridades no le tomaron la denuncia. Sin embargo, lo que parecía ser un caso de estafa en su contra se convirtió en una pesadilla cuando fue detenida por el mismo delito.
De estafada a ser denunciada por estafa
Rodríguez relató en Buenos Días Perú que la venta de la laptop fue realizada con la esperanza de recibir el pago rápidamente, pero nunca recibió el dinero acordado. “Todo empezó cuando yo inicié la venta de mi laptop el 4 de julio de 2024, en la cual fui estafada. Me contactaron por Marketplace, a través de Facebook, y una señorita llamada Noelia me indicó que estaba interesada”, contó Shirley quien luego, por pedido de la supuesta compradora, se creó una cuenta en Mercado Libre, plataforma por donde supuestamente le hicieron el pago. Sin embargo, pese a que envió su equipo, el dinero nunca figuró en su estado de cuenta.
Conmocionada por la estafa, acudió a la Comisaría De Barboncito para denunciar el hecho, pero las autoridades policiales no habrían recibido su denuncia. “Me dijeron que no podía (denunciar) porque no tenía las pruebas contundentes. Yo fui muy mal de verdad, fui llorando. Quizás eso no fue prudente para los policías, y por eso fue que me negaron. En ese momento no tuve la fuerza de poder exigir que me tomaran la denuncia”, señaló.
A pesar de no recibir ayuda en la comisaría, ella intentó continuar con su vida, pero la situación se complicó de manera inesperada cuando meses después agentes de la Policía irrumpieron en su vivienda señalándola de ser responsable de una estafa. Shirley intentó explicarles a los agentes que la víctima de estafa había sido ella, pero luego de unos minutos, procedieron a ejercer la fuerza para conducirla a la comisaría.
Joven denuncia abuso policial y suplantación de identidad
La persona que la habría estafado durante la venta de su laptop, había suplantado su identidad luego de recuperar toda la información eliminada del equipo, según alude la joven. Con sus datos, crearon una cuenta en Mercado Libre y habrían procedido a estafar a otras personas, entre ellos, a un hombre que tiene como familiar a un policía que presta servicios en Barboncito.
“El día 23 de noviembre estafaron al hijo del policía Zapata, que trabaja aquí en la comisaría de Barboncitos. Su colega, el policía Olortegui, tuvo la casualidad de que ese día el policía Zapata se encontraba de franco, por lo cual, él le pidió de favor al policía Olortegui que le apoyara en toda esta intervención”, menciona.
Según Shirley, los agentes llegaron a su casa aproximadamente a las 6 de la tarde. Encontraron a la joven en pijama y ellas les indicó que primero se cambiaría para ir a la comisaría a dar su descargo. “No pasó ni 10 minutos, en los cuales ellos ingresan. Yo no había puesto resistencia”, menciona la joven quien señala que entre los agentes estaba el policía Olórtegui quien pidió refuerzo de policías féminas quienes la habrían maltratado sin tomar en cuenta que ella tiene un daño en la columna.
Pese a que ella pidió que le mostrasen alguna orden de detención o la denuncia, los agentes nunca le mostraron nada el día de la intervención. Además, Shirley denuncia un tema relevante: en la parte policial de su detención, la PNP detalla que esta diligencia se hizo a las 08:40 p.m. No obstante, su ‘captura’ se hizo alrededor de las 07:00 p.m.
La detuvieron en tiempo récord porque pedido de un policía
“Actuaron a su manera, a su modo, por hacerle el favor a su colega. Por la misma boca del policía Olórtegui nos enteramos que el chico es hijo de un policía. A él sí le tomaron la denuncia (...) Luego, por mis abogados nos enteramos que todo fue paralelo porque mostraron que la denuncia fue puesta a las 6:50 p.m.”, detalló.
“Ha sido el peor día de mi vida, porque el policía Olórtegui, en todo momento, trató de amedrentarme para que yo aceptara los cargos, y yo, pese a todo, no lo hice. Me arrinconaron en un lado, como si fuera una delincuente”, agregó.
La joven relató que en medio del momento difícil, un policía de la misma comisaría de Barboncitos la ayudó guiándola cómo puede demostrar su inocencia. “Le di la clave de mi celular, le mostré las fotos, y él fue quien se encargó de entregarlas”. Con esto, pudo ser puesta en libertad.
En su denuncia, Shirley también destacó la rapidez con la que las autoridades actuaron en su caso, en comparación con otros ciudadanos que tienen que lidiar con largas demoras y trámites burocráticos para presentar denuncias. “Si uno denuncia una estafa, las denuncias se hacen eternas, pero en mi caso, la diligencia avanzó con demasiada rapidez”, indicó.
Shirley también expresó su preocupación por su seguridad y la de su familia, ante las amenazas que ha recibido desde su detención. “Pido garantías por mi vida, por la vida de mi hija y mi familia”, señaló con firmeza. “No tengo enemigos, pero si algo me pasa, las únicas personas responsables serán las que me intervinieron y las que se encargaron de todo esto”, añadió.
