Perú cerró el año 2024 con un notable incremento en el ingreso de remesas, alcanzando un total de 4.945 millones de dólares, lo que representa un aumento del 11,2 % en comparación con los 4.446 millones registrados en 2023. Así lo informó el Banco Central de Reserva del Perú (BCRP), que destacó que este flujo monetario equivale al 1,7 % del Producto Interno Bruto (PIB) nacional, un nivel similar al del año anterior.
El crecimiento de las remesas se reflejó también en los resultados trimestrales. Durante el cuarto trimestre de 2024, los envíos de dinero desde el extranjero sumaron 1.280 millones de dólares, superando en un 6 % los valores registrados en el mismo periodo de 2023. Según el BCRP, este incremento estuvo impulsado principalmente por la recuperación del empleo en Estados Unidos, país que se mantiene como la principal fuente de remesas para el Perú.
Crecimiento sostenido en los últimos años
El informe del BCRP también detalla la evolución de las remesas en los últimos años. En 2019, el país recibió 3.326 millones de dólares, cifra que disminuyó a 2.904 millones en 2020 debido a los efectos de la pandemia. Sin embargo, los envíos comenzaron a recuperarse en 2021, alcanzando los 3.608 millones de dólares, y continuaron en ascenso en 2022 con 3.708 millones.
En 2024, el flujo de remesas mostró un comportamiento estable a lo largo del año. Durante el primer trimestre, se registraron 1.193 millones de dólares, mientras que en el segundo y tercer trimestre las cifras ascendieron a 1.241 millones y 1.231 millones, respectivamente. Este crecimiento constante reafirma la importancia de las remesas como un pilar económico para muchas familias peruanas.
Impacto de las remesas en la economía y la sociedad
Las remesas no solo representan un aporte significativo al PIB, sino que también son un mecanismo clave para la reducción de la pobreza en el país. Según un estudio del BCRP, aproximadamente el 60 % de estos envíos se destina a cubrir necesidades básicas como alimentación y vivienda, mientras que el 20 % se utiliza en educación y salud. El restante 20 % se emplea en ahorro e inversión en pequeños negocios, lo que contribuye al desarrollo económico local.
Además, la Encuesta Nacional de Hogares (ENAHO) 2021 reveló que el 65 % de las remesas se envía de manera mensual, mientras que el resto se distribuye entre envíos trimestrales y semestrales. Este flujo constante de dinero permite a muchas familias mantener una estabilidad económica y mejorar su calidad de vida.
Incremento en transacciones hacia España
Por otro lado, el mercado de envíos de dinero desde Perú hacia el extranjero también experimentó un crecimiento significativo. Según datos de la fintech Global66, las transacciones desde Perú hacia España aumentaron en más del 105 % al cierre de 2024, movilizando más de 28 millones de dólares, frente a los 15 millones registrados en 2023.
La empresa reportó que el mercado peruano realizó más de 34.000 transacciones durante el último año, con un ticket promedio superior a los 800 dólares. Este incremento se atribuye, en parte, al creciente número de familias que envían dinero a sus hijos que estudian en España, muchos de los cuales optan por establecerse en el país europeo tras completar sus estudios, según explicó María José Artacho, Country Manager de Global66 en Perú.
Nueva legislación busca incentivar el ingreso de remesas
Este crecimiento se materializa poco después de que el Congreso de la República promulgara, en diciembre de 2024, la Ley N.º 32211, que exonera del pago del Impuesto General a las Ventas (IGV) a las remesas enviadas al Perú desde el extranjero a través de empresas de transferencias de fondos. Esta medida, impulsada por insistencia, busca incentivar el ingreso de remesas al país y beneficiar a los peruanos que residen fuera del territorio nacional.
Además, la normativa permite al Banco de la Nación ofrecer servicios financieros a los peruanos en el exterior, como la apertura de cuentas bancarias y la concesión de créditos personales, hipotecarios o vehiculares. Según el Congreso, estas disposiciones buscan fortalecer el vínculo financiero entre los migrantes y el sistema económico peruano. Sin embargo, todavía hace falta la reglamentación de la ley.
Contexto regional y perspectivas de las remesas en 2025
A nivel regional, las remesas hacia América Latina y el Caribe alcanzaron un total de 160.000 millones de dólares en 2024, según un informe del Banco Interamericano de Desarrollo (BID). Este flujo monetario, que proviene principalmente de países como Estados Unidos, España, Argentina, Italia y Chile, representa un incremento del 9,5 % respecto a 2022.
En el caso de Perú, alrededor del 56% de las remesas provienen de Estados Unidos, según el Instituto de Economía y Desarrollo Empresarial (IEDEP) de la Cámara de Comercio de Lima. La recuperación económica y el fortalecimiento del mercado laboral en ese país han sido factores clave para sostener el crecimiento de los envíos.
Sin embargo, el IEDEP advirtió que las políticas migratorias y arancelarias de Estados Unidos podrían generar incertidumbre y afectar el dinamismo de las remesas en el corto plazo. A pesar de este panorama, se espera que las remesas hacia Perú continúen creciendo, aunque a un ritmo más moderado, con un incremento proyectado del 5% en el primer trimestre de 2025, alcanzando un valor estimado de 1.250 millones de dólares.
