Patricia Barreto de ‘Nina de azúcar’: Su pasión por el teatro, el cariño de los niños y sin apuros por la internacionalización

Patricia Barreto, la carismática actriz que cada noche conquista a grandes y chicos con su papel de ‘Nina’ en ‘Nina de Azúcar’, se ha convertido en una de las figuras más entrañables de la televisión peruana.

En una conversación con Infobae Perú, Barreto habló sobre su amor por el teatro y su paso por las telenovelas de Del Barrio Producciones. A pesar de la gran popularidad que ha alcanzado con personajes como ‘Maricucha’, asegura que su vida sigue siendo la misma. Lo que más disfruta es el cariño del público, en especial el de los niños, quienes la abrazan con espontaneidad cuando la ven en la calle.

Sobre la internacionalización, la actriz es clara: no es algo que la desvele. Ha tenido la oportunidad de participar en proyectos internacionales sin dejar el Perú y, por ahora, su prioridad es seguir brillando en el teatro y la televisión local. “Estoy feliz aquí, haciendo lo que amo”, afirma con una sonrisa.

¿Cuál ha sido el mayor reto al interpretar a Nina?

El universo de la pastelería era algo completamente nuevo para mí. He tratado de nutrirme con información sobre tecnicismos y procesos para representar mejor a mi personaje. Antes de la novela, no tenía mucho conocimiento sobre cómo hacer un pastel, pero ahora estoy mucho más conectada con el mundo de la cocina.

¿Qué te motivó a aceptar el papel de Nina?

Porque muestra a la mujer que soy y que quiero representar. Nina es una mujer actual, independiente, que busca desarrollarse profesionalmente, hacer crecer su emprendimiento y encontrar un amor sano y equilibrado. Es un personaje con el que muchas mujeres pueden identificarse.

La novela incluyó algunas escenas con un personaje que se comunicaba mediante lenguaje de señas. ¿Qué significó para ti esta experiencia?

Fue algo muy especial. Adel Tarazona, mi profesora de lengua de señas, ha sido una gran guía en este proceso. Desde hace un año, me interesa mucho impactar en la comunidad sorda. He trabajado en obras en el Gran Teatro Nacional para esta comunidad y siento que como artista tengo la responsabilidad de trascender y comunicar de manera inclusiva.

¿Cómo ha cambiado tu vida luego de interpretar papeles masivos como ‘Maricucha’ y ‘Nina’?

Me encanta el contacto con la gente, eso viene también mucho de cómo me formé, digamos, con un público mirándome en el teatro. Mi vida no ha cambiado en absoluto. Puedo salir a hacer mis compras con normalidad y seguir mi rutina, solo que con el contacto de la gente, agradeciéndome por mi trabajo con niños mucho más espontáneos, que te abrazan. Pero mi vida es igual, es la misma.

¿Cómo ha sido tu experiencia trabajando con Marcela Citterio, también guionista de Nina de azúcar?

Ha sido maravillosa. Marcela es una dulzura y sabe escuchar. Ella creó el universo de Nina con mucho detalle, de la misma manera en que construyó el mundo de ‘Patito Feo’. Ella genera este tipo de proyectos que impactan en una generación, crea universos en el que no se escapa nada.

Hemos tenido una gran cercanía, cuando llego a Lima salimos a cenar, conversamos muchísimo. Hasta ahora compartimos mucho diálogo porque estamos construyendo juntas el personaje.

Cuéntanos sobre el recetario de Nina, ‘Dulcifícate’.

Este sábado 15 de febrero lanzamos el libro de recetas ‘Dulcifícate’, inspirado en el universo de Nina. La preventa ya está disponible para que todos puedan disfrutar de estas recetas en casa y compartir en familia.

Iniciaste tu carrera en el teatro y muchos te han conocido por tus papeles en exitosas novelas. Si tuvieras que escoger entre el teatro y la televisión, ¿cuál elegirías?

Difícil decisión. No podría dejar el teatro porque es el alma de mi vida. El trabajo que yo tengo en cuanto a desarrollo personal se encuentra en el teatro. Cuando me dedico a hacer proyectos, tal vez comerciales, un poco más de entretenimiento, utilizo las herramientas que he construido con el proceso teatral. La construcción de mi ser artístico se da en el teatro.

¿Y no te quedarías con la televisión?

Los procesos son completamente opuestos. La televisión es para ayer. Tienes que sacar capítulos muy pronto y rápido. El trabajo de la actuación, como es más inmediato, esa herramienta que yo había trabajado de la inmediatez, ese oficio que se aprende en el teatro, se ejecuta mucho más en la televisión. Entonces, el oficio de entrar y salir de las emociones, la memoria ayuda a poder desarrollar y crear personajes rápidamente.

Por otro lado, vemos a varios actores salir al extranjero y buscar oportunidades en cadenas como Telemundo o plataformas como Netflix. ¿La internalización está en tus planes?

He tenido la suerte de participar en proyectos internacionales sin salir del país. Claro que lo he pensado. He pensado muchas veces en poder viajar, establecerme fuera durante un tiempo, pero gracias a Dios en los proyectos que van saliendo y van surgiendo, me toman aquí en Perú y yo agradecida por ello.

Aún no he sentido la necesidad de establecerme fuera o tener esa aspiración, pero si la oportunidad se presenta, claro que la consideraría. Ahorita estoy bastante contenta con el teatro que vengo haciendo, con las obras y proyectos que vengan.

¿Has pensado en dirigir teatro o cine?

Sí, de hecho, estoy en proceso de escribir y producir mis propias obras. Mi aspiración es comenzar dirigiendo teatro y luego explorar otros formatos.

¿Qué nos puedes adelantar sobre ‘Amor Erizo’?

Es una historia bastante honesta y sencilla sobre las relaciones y los vínculos familiares y también sentimentales. Es la historia de Alicia y Eduardo que llevan casi más de diez años juntos como pareja. Deciden por una situación, vender la casa en la que han vivido toda su vida porque se están separando y a partir de esa premisa ellos se cuestionan mucho sobre cómo vivieron su vida y cómo será su futuro.

Estoy muy agradecida por los comentarios positivos que ha recibido la película y por el apoyo del público al cine peruano independiente.