El congresista Américo Gonza Castillo, miembro de Perú Libre, ha presentado un proyecto de ley que establece como requisito obligatorio que los historiadores estén inscritos y habilitados en el Colegio Profesional de Historiadores del Perú para poder ejercer. Este colegio fue creado en 2022 mediante la Ley N.º 31393, pero hasta ahora no se había exigido la afiliación como condición para la práctica profesional.
El proyecto cuenta con el respaldo como coautores de los parlamentarios Américo Gonza Castillo, Cruz Mamani, Flavio Taipe Coronado, María Elizabeth Mita Alanoca, Isaac Portalatino Ávalos, Kelly Roxana Cerrón Rojas y Waldemar José Cerrón Rojas, quienes figuran como impulsores de la propuesta legislativa en el Congreso.
De acuerdo con el texto del proyecto, los historiadores deberán cumplir con una serie de requisitos formales para ejercer legalmente. Entre ellos, se incluye la obtención de un título profesional de Licenciado en Historia otorgado por instituciones educativas reconocidas en el Perú. En el caso de títulos obtenidos en el extranjero, será necesaria su revalidación ante la Superintendencia Nacional de Educación Superior Universitaria (Sunedu).
Además, la inscripción en el Colegio Profesional de Historiadores del Perú será obligatoria. Este organismo, creado en 2022, se encargará de supervisar el cumplimiento de las normativas y de garantizar un marco ético y funcional para los profesionales de la Historia.
Reacciones y críticas a la propuesta
La iniciativa ha generado opiniones divididas entre los especialistas y la ciudadanía. Según el historiador peruano José Ragas, investigador de la Universidad Católica de Chile, criticó duramente el proyecto, a través de cuenta de X (antes Twitter) calificándolo como una medida que no aporta a la investigación ni a la divulgación histórica. Según Ragas, esta ley solo beneficiaría a un grupo que busca controlar puestos y recursos financieros, creando clientelas políticas en el Congreso.
En redes sociales, varios usuarios también expresaron su descontento, cuestionando la utilidad de los colegios profesionales en general. Algunos señalaron que estas instituciones suelen imponer cobros sin contribuir al desarrollo de las áreas profesionales, mientras que otros lamentaron que las Ciencias Sociales no sean consideradas en concursos de investigación nacional.
¿Qué señala el PL de Américo Gonza?
El proyecto de ley, titulado “Ley del Ejercicio Profesional en Historia”, tiene como objetivo principal regular formalmente la profesión de historiador en el Perú. Según el documento, esta regulación busca fortalecer la calidad y el reconocimiento de la disciplina en los ámbitos sociales, culturales y académicos. Además, se plantea como una medida para contribuir al desarrollo social, consolidar la identidad nacional y preservar el patrimonio cultural del país.
El proyecto de ley también define un campo de acción para los historiadores. Según el documento, las principales funciones de estos profesionales incluyen:
- Investigación histórica con rigor académico.
- Gestión y supervisión de museos, archivos y bibliotecas.
- Conservación documental y estrategias para preservar fuentes primarias.
- Docencia en niveles educativos diversos, con enfoques didácticos innovadores.
- Asesorías y consultorías en políticas públicas, planes culturales y proyectos sociales desde una perspectiva histórica.
El artículo 3 del proyecto subraya que el trabajo de los historiadores es crucial para la comprensión y preservación de la identidad nacional. Asimismo, se espera que estos profesionales promuevan el diálogo social y reflexiones sobre el pasado, con el objetivo de construir bases sólidas para un futuro informado.
Los motivos para hacer obligatorio que los historiadores esten colegiados
El proyecto de ley argumenta que es necesario debido a una serie de problemáticas que afectan actualmente a los historiadores en el Perú. Entre estas se destacan:
- La ausencia de un marco regulatorio que dificulta el reconocimiento formal de los historiadores y debilita la calidad de la disciplina.
- La proliferación de estudios históricos superficiales realizados por personas ajenas a la carrera, lo que ha contribuido a la desinformación.
- La precariedad laboral y la falta de oportunidades, que han menoscabado el estatus de los historiadores en el país.