Perú enfrenta una crisis sin precedentes en su sector agrícola debido a la sobreproducción de mango, especialmente en las regiones norteñas de Piura y Lambayeque. Esta situación provocó una caída drástica en los precios, afectando gravemente la economía de miles de agricultores.
Tradicionalmente, el norte del país ha sido una zona propicia para el cultivo de mango debido a sus condiciones climáticas favorables. Sin embargo, en la última temporada, la producción se triplicó, pasando de un promedio anual de 150 toneladas a 450 toneladas. Esta sobreoferta ha provocado que el precio por kilogramo de mango caiga a S/0.20, muy por debajo del costo de producción, que suele ser de, aproximadamente, S/1.00 por kilogramo.
Ante esta problemática, el titular del Ministerio de Desarrollo Agrario y Riego (Midagri), Ángel Manero, hizo un llamado a los agricultores para que suspendan la siembra de mango durante los próximos tres años, con el objetivo de controlar la sobreoferta y estabilizar el mercado.
Como alternativa, el ministro Manero propuso diversificar los cultivos, sugiriendo la siembra de frambuesa como una opción viable. Además, anunció la implementación de cinco plantas procesadoras de mango deshidratado, incluyendo opciones orgánicas, para reducir las pérdidas de la fruta y darle nuevos usos.
Sin embargo, esta propuesta generó preocupación entre los agricultores. Daniel Enriques, dirigente de los productores de mango en Motupe, Lambayeque, expresó su inquietud.
“El ministro no está informado, porque tiene razón, tres años no se debe sembrar mango, pero ¿qué propone el Ejecutivo? ¿Qué programa agrícola desarrolla? ¿Qué estrategias nos propone el ministro?”, declaró Enriques para RPP.
Los agricultores explicaron que el cultivo de mango fue una elección estratégica debido a su resistencia a la sequía y a la menor necesidad de agua en comparación con otros cultivos.
La falta de infraestructura hídrica adecuada, como represas, limita la posibilidad de diversificar hacia otros cultivos que requieren más agua. “Nosotros no tenemos agua segura en el Valle de Motupe. Esa es la razón por la que hemos optado por el cultivo de mango porque no requiere de mucha agua”, explicó un productor local.
Entierran toneladas de mangos a la semana
La crisis también ha llevado a medidas extremas por parte de los agricultores, quienes, ante la imposibilidad de vender su producto, optaron por regalar o incluso enterrar más de trescientas toneladas de mango a la semana para evitar la proliferación de plagas como la mosca de la fruta.
“Todo el valle de Motupe tiene la producción de mango caída. Hemos tenido que emplear con obreros para juntar los mangos y enterrarlos porque prolifera mucho la mosca de la fruta”, comentó José De la Cruz Carrillo, productor de mangos en el distrito de Chóchope.
Al respecto, el doctor Félix Bobadilla, director ejecutivo del Servicio Nacional de Sanidad Agraria (Senasa) en Lambayeque, sostuvo que vienen trabajando en colaboración con el Gobierno Regional para garantizar mejores beneficios para el sector agroexportador en los próximos años.
“Nosotros estamos reforzando nuestro trabajo y nuestras medidas de control, como el recojo de frutas y enterramiento, también la aplicación de cebos tóxicos, la toma de muestras y nuestra red de vigilancia oficial”, manifestó para Tv Perú noticias.
“Actualmente estamos enterrando 300 toneladas de mangos caídos de manera semanal. Ahora contamos con apoyo del gobierno regional que se ha comprometido con trabajadores para esta tarea. Lo importante es que estamos brindando toda la asistencia médica a los vecinos de la zona para intensificar las actividades de control y no vernos afectados en el futuro”, agregó.
Bobadilla destacó que la mosca de la plaga también puede afectar diversas frutas, como arándanos, uvas, paltas, aparte de mango. “Venimos trabajando de manera articulada con todas las partes afectadas para beneficio del sector agroexportador”, finalizó.