Agua de pasas: un remedio natural para mejorar la digestión, su alto contenido en carbohidratos las hace ideales para el día

Desde la antigüedad, son un alimento esencial en diversas culturas gracias a su proceso de deshidratación, que permite conservar sus propiedades por más tiempo.

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Agua de pasas: un remedio
Agua de pasas: un remedio natural para mejorar la digestión, su alto contenido en carbohidratos las hace ideales para el día. (Campo grande Perú)

Las pasas son un alimento presente en diversas culturas a lo largo de la historia. Su producción se basa en un proceso de deshidratación de la uva fresca, lo que permite conservar sus propiedades nutricionales y extender su vida útil. En la actualidad, su consumo es común en diferentes preparaciones culinarias y se les atribuyen múltiples beneficios para la salud.

Según la Fundación Española de la Nutrición (FEN), las uvas pasas son una fuente importante de hidratos de carbono y fibra, además de contener calcio, fósforo, sodio y hierro. También poseen vitaminas K, B3 y B1, lo que las convierte en un alimento con una amplia variedad de nutrientes esenciales. Su composición nutricional permite su inclusión en dietas equilibradas, aunque con ciertas consideraciones en cuanto a su consumo excesivo.

Propiedades del agua de pasa

El consumo de pasas también se puede realizar a través de una preparación en agua. Esta bebida mantiene algunos de los beneficios del fruto y es utilizada principalmente para mejorar el tránsito intestinal.

El agua de ciruela pasa conserva su contenido de fibra y compuestos como el sorbitol, que favorecen la actividad digestiva. Además, aporta hidratación junto con minerales esenciales como el potasio, el cual es importante para la regulación de la presión arterial y el equilibrio de los electrolitos.

Para su preparación se requiere:

  • 5 a 7 ciruelas pasas
  • 1 vaso de agua (250 ml aproximadamente)

Procedimiento:

  • Lavar las pasas con agua para eliminar impurezas.
  • Colocarlas en un vaso o recipiente.
  • Llenar el recipiente con agua hasta cubrir completamente las ciruelas.
  • Dejar en remojo durante la noche o al menos ocho horas para permitir la liberación de nutrientes.
  • Retirar las ciruelas pasas del agua antes de consumirla. También pueden ser ingeridas, ya que mantienen sus propiedades nutricionales.

Es recomendable beber esta preparación en ayunas para optimizar su efecto laxante y mejorar la digestión. Su inclusión en la dieta puede ser una alternativa natural para el cuidado del sistema digestivo.

Beneficios de las pasas

(Imagen Ilustrativa Infobae)
(Imagen Ilustrativa Infobae)

Especialistas en nutrición de la FEN destacaron que las pasas ofrecen ventajas para la prevención de enfermedades. Su contenido en ácidos omega-3 ayuda a controlar la glucosa, lo que resulta beneficioso para personas con alteraciones en los niveles de azúcar en sangre. También contribuyen a la regulación de la presión arterial y pueden ser un apoyo en el manejo de la diabetes tipo 1 y 2.

Otro aspecto relevante es su alto nivel de antioxidantes, que puede ayudar a prevenir la hipertensión. Asimismo, su consumo favorece el flujo sanguíneo, evitando la formación de coágulos y promoviendo la correcta irrigación de sangre al cerebro. Estos efectos pueden estar relacionados con la reducción del riesgo de enfermedades cardiovasculares.

Su contenido en potasio y magnesio también desempeña un papel importante en la eliminación de toxinas del organismo y en la reducción de la acidez. Esta propiedad las hace útiles en la prevención de afecciones como la gota, la artritis y la formación de cálculos renales.

Las pasas son consideradas un “superalimento” por su densidad nutricional. Sin embargo, su aporte energético es elevado, con un valor calórico de 289 kcal por cada 100 gramos. Este dato es valioso para quienes siguen planes de alimentación específicos o buscan controlar su ingesta calórica diaria.

Contraindicaciones y valor nutricional

(Imagen Ilustrativa Infobae)
(Imagen Ilustrativa Infobae)

Si bien las pasas contienen nutrientes esenciales, su consumo debe ser moderado, especialmente en personas con diabetes. Debido a su contenido de fructosa y glucosa, el exceso de ingesta puede provocar alteraciones en los niveles de azúcar en sangre.

Su composición nutricional por cada 100 gramos es la siguiente:

  • Valor energético: 1223 kJul / 289 kcal
  • Grasas: 1,17 g

    Saturadas: 0,56 g

    Monoinsaturadas: 0,56 g

    Poliinsaturadas: 0,41 g

    Grasas trans: <0,005 g
  • Colesterol: <1,99 mg
  • Hidratos de carbono: 65,5 g

    Azúcares: 60,16 g
  • Proteína: 1,84 g
  • Humedad: 25,68%
  • Fibra dietética: 4,38 g
  • Sodio: <0,010 g
  • Sal: <0,01 g

El proceso de secado de la uva influye en la concentración de estos nutrientes. La reducción de humedad en un 25,68% permite preservar compuestos esenciales tanto hidrofóbicos como hidrofílicos.

Los hidratos de carbono representan el 65,5% de su composición, de los cuales el 60,16% corresponden a azúcares. Su función principal es proporcionar energía, siendo un recurso clave para el cerebro y los músculos.

Las grasas son el grupo de nutrientes menos representativo en este alimento, con solo un 1,17%, y dentro de ellas, las saturadas constituyen un 0,56%. Se destaca la ausencia de grasas trans y colesterol, lo que las hace una opción adecuada dentro de una alimentación balanceada.

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