La atmósfera tiene una estructura compleja compuesta por varias capas, cada una con características y funciones distintas. Los dos primeros estratos terrestres, la troposfera y la estratósfera, son especialmente importantes para la vida en el “planeta azul”.
La troposfera, que se extiende desde la superficie hasta unos 10 km de altura, es donde se desarrollan los fenómenos meteorológicos. Aquí también es donde encontramos el oxígeno necesario para la respiración, lo que hace que esta capa sea importante para la existencia de la vida tal como la conocemos.
Por encima de la troposfera se encuentra la estratósfera, que se eleva hasta los 50 km de altitud. Esta capa es conocida principalmente por albergar la capa de ozono, un componente esencial que actúa como un filtro natural para los rayos ultravioleta del sol.
Esta zona fue seleccionada por los investigadores de la Asociación Peruana de Astrobiología (ASPAST) para llevar a cabo una serie de experimentos relacionados con la disciplina científica que integra conocimientos de biología, química, física, astronomía y geología para explorar las posibles condiciones de formación y desarrollo de vida más allá de la Tierra.
Desde hace una década, los integrantes de ASPAST han enviado material biológico, como líquenes, hongos, semillas y minerales, a la estratósfera con el objetivo de evaluar su resistencia en condiciones extremas. La temperatura en esta región varía de manera progresiva, pasando de −55 °C en la tropopausa hasta alcanzar los 0 °C en la estratopausa.
En diálogo con la Agencia Andina, Julio César Tineo, miembro de ASPAST, indicó que algunos de los organismos enviados lograron sobrevivir a las temperaturas extremas y la radiación presentes a 25 km de altura. “A diferencia de los líquenes, que no resistieron, los tardígrados sí lo hicieron”, explicó. Cabe señalar que los tardígrados son microanimales que se encuentran en una variedad de entornos, desde los fondos marinos hasta las copas de los árboles.
También se enviaron tres variedades de semillas de quinua a la estratósfera, de las cuales solo una mostró una buena tasa de germinación. Recientemente, se lanzaron semillas de uvas pisqueras a esta capa atmosférica para verificar si los resultados son igualmente favorables. Cabe señalar que estos granos fueron acompañados de café.
Café colombiano y semillas de uvas pisqueras de Ica en la estratósfera
Con el propósito de estudiar cómo las condiciones extremas de la estratósfera afectan a los granos de café de Colombia y determinar si las semillas de uvas pisqueras de Ica pueden germinar en este entorno, un equipo de investigadores de la Asociación Peruana de Astrobiología (ASPAST) arribó el 26 de enero al desierto de Yauca del Rosario, en Ica, donde prepararon los equipos que serán enviados a la segunda capa de la atmósfera terrestre.
En esta locación se preparó la plataforma de fibra de carbono que contenía las semillas de uvas pisqueras y los granos de café. A dicha estructura se le instaló una cámara GoPro de 360° con un cobertor diseñado para resistir temperaturas extremas, que oscilan entre -60 y 50 grados Celsius, además de una cámara fotográfica, baterías y sensores especializados. Posteriormente, se infló el globo estratosférico y se unió todo de manera que permaneciera compacto durante el vuelo.
A las 13:00 horas, una plataforma de fibra de carbono, cargada con semillas de uvas pisqueras y granos de café, fue lanzada hacia la estratósfera. Durante aproximadamente dos horas, las muestras estuvieron expuestas a condiciones extremas a gran altitud. Mientras tanto, el equipo en la Tierra monitorizó en tiempo real su trayectoria, temperatura y altitud mediante un sistema GPS y un aplicativo especializado.
En conversación con la Agencia Andina, el doctor Octavio Chon Torres, docente de la Universidad de Lima y presidente de la Asociación Peruana de Astrobiología (ASPAST), aseveró que este lanzamiento marca el inicio de la internacionalización del proyecto Estratósfera, impulsado por ASPAST junto con la casa de estudios mencionada.
“Esta misión es muy importante porque representa el inicio de la internacionalización del proyecto Estratósfera. Esta vez nos acompaña la pasante Melissa Gutiérrez, investigadora del Instituto de Astrobiología de Colombia (IAC), para aprender cómo se realiza este tipo de lanzamientos con la finalidad que se replique en Colombia y posteriormente en otros países de la región como Paraguay”, indicó Chon Torres.
La colombiana Gutiérrez, quien también dio declaraciones al medio citado, mencionó que el café enviado a la estratósfera es artesanal, proviene de finca y es representativo de su país. Además, expresó su interés en replicar esta experiencia en Colombia. “Queremos llevar a cabo este proyecto en Colombia. La idea es aprender todo lo que podamos del proceso, ver los materiales que necesitan y encontrar los sitios idóneos para un posible lanzamiento”, dijo.
Para asegurar la integridad del proyecto, se añadió un paracaídas que se despliega automáticamente tras la explosión del globo. De este modo, se garantiza un descenso controlado y se evita el daño de las muestras transportadas en la plataforma.
Tras más de dos horas, la plataforma aterrizó cerca de la playa de Carhuaz, en Ica, en pleno desierto. Luego de un par de horas de búsqueda, los investigadores lograron localizarla intacta, gracias al sistema de GPS que facilitó su rastreo.
Según informa Andina, la misión fue un éxito. “Se confirmó que las muestras de semillas de uvas y el café alcanzaron los 30 mil 249 metros de altura y la temperatura mínima que soportaron fue -49 grados Celsius”, se lee en la página web. Cabe señalar que los especímenes serán enviados a los laboratorios para su análisis.
Finalmente, este proyecto busca promover la investigación en astrobiología, enfocándose en una región de la estratósfera que científicos identifican como un análogo de Marte. Así lo explicó el doctor Chon Torres.