El asesinato de la extrabajadora del Congreso de la República, Andrea Vidal, ha generado un terremoto político con el destape de una presunta red de prostitución al interior del Parlamento. Ajuste de cuentas, delincuencia común y hasta organización criminal, son las hipótesis que la Policía manejaba respecto al caso.
En un primer momento, todo apuntaba a que el objetivo de los sicarios era el conductor del taxi que tomó la joven, José Daniel Vargas Briceño, pero esto fue desmentido por los investigadores. Según el hermano de la víctima, agentes de la PNP confirmaron que el ciudadano extranjero no era víctima de extorsión, ni de amenazas.
Pese a eso, el Congreso de la República, publicó un polémico comunicado donde aseguraba que el taxista era el objetivo de los delincuentes, por el número de impactos de bala que tenía en el cuerpo. Para respaldar esta versión, también se compartió la necropsia de las víctimas, junto a una pericia forense.
Sin embargo, la División de Homicidios de la PNP maneja otra hipótesis. Según revelaron fuentes de la entidad al diario La República, el objetivo del ataque era Andrea Vidal Gómez.
“Primero que todo, tenemos la convicción de que se trata de un crimen por encargo. Los indicios que hemos recopilado hasta el momento, así lo indican. Estos mismos indicios señalan que Andrea Vidal, y no el taxista José Vargas, encaja con el perfil de objetivo que tenían los sicarios. Por la cantidad de disparos, por el curso de los proyectiles y por la ubicación de las víctimas, entre otros elementos”, señaló la División de Homicidios a La República.
Con estos nuevos detalles, continúan las investigaciones para descubrir cuál fue el móvil del asesinato. En ese contexto, surgen dos sospechosos: Rodrigo Falcón, novio de la abogada y ‘Germán médico’, un misterioso contacto que se encontró en su celular.
Los contactos
Las indagaciones policiales señalan a Rodrigo Falcón, pareja sentimental de la víctima, como uno de los principales sospechosos, surge a raíz de las conversaciones halladas en el celular de Andrea Vidal y a otro teléfono que Falcón compró el día del crimen.
En estas comunicaciones, Andrea Vidal tenía un trato cariñoso con diferentes hombres y su pareja parecía estar al tanto de esto. Uno de sus interlocutores, a quien la joven guardó como “Germán médico”, sería una persona que vive en el extranjero y que tenía encuentros ocasionales con Andrea cuando llegaba al Perú. Su identidad aún está siendo verificada.
Sobre Rodrigo Falcón, las investigaciones parecen ser un poco más concisas. Los investigadores de la PNP revelaron a La República, que Falcón puso un chip de rastreo en el celular que le entregó a Andrea Vidal, algo que la joven desconocía. “Él no confiaba en ella. Eso nos llamó la atención”, indicaron las fuentes policiales del medio.
El día del crimen, Falcón habría realizado reiteradas llamadas al padre de Andrea preguntando si ella había llegado a casa, pese a que aparentemente conocía su ubicación. También contactó a una amiga de la víctima para indagar sobre su paradero.
La amiga con la que Falcón se contactó fue Alexandra Gil, una de las jóvenes acusadas de pertenecer a la presunta red de prostitución que formó Jorge Torres Saravia. La joven fue citada a la Comisión de Fiscalización del Congreso, pero no confirmó su participación. La extrabajadora parlamentaria confirmó que colaboraría con todas las investigaciones para esclarecer la muerte de Andrea Vidal, a quien consideraba su amiga.
En una entrevista con Milagros Leiva, Alexandra reveló detalles sobre la relación entre Andrea y Rodrigo, calificándolos como una pareja estable con planes de matrimonio. También indicó que fue Falcón quien la alertó sobre el ataque que sufrió Andrea.