Jeanette Enmanuel ha logrado lo que muchos considerarían un sueño imposible: convertir un remedio casero en un negocio internacional. Fundadora de Santa Natura, la marca de productos naturales peruanos, ha dejado una huella profunda en el mundo empresarial. Con más de 30 años de trayectoria, ha consolidado su empresa en el mercado nacional e internacional, convirtiéndola en un referente de la medicina natural. A lo largo de su carrera, Enmanuel no solo se ha destacado por sus productos, sino también por su visión de promover la salud y el bienestar a través de lo que el Perú ofrece de forma única: sus superalimentos y plantas medicinales.
A pesar de su éxito actual, el camino de Jeanette no fue sencillo. Emprender en un país como el Perú no es tarea fácil, y menos cuando se empieza desde cero. Su marca Santa Natura nació de la necesidad de solucionar problemas de salud dentro de su círculo más cercano. Enmanuel, sin recursos ni experiencia empresarial previa, construyó una marca que hoy se distribuye en varios países de América Latina y hasta en Europa. Todo comenzó con un pequeño gesto: regalar remedios naturales a los vecinos. Así fue como esta empresaria encontró el camino para hacer realidad lo que hoy es uno de los mayores éxitos de la medicina natural peruana.
Los primeros pasos hacia el emprendimiento
Jeanette Enmanuel nació en Arequipa en 1952, en el seno de una familia de seis hermanos. A temprana edad, su familia se trasladó a Lima, donde realizó sus estudios en el Colegio Nacional Rosa de Santa María. Su historia empresarial comenzó de manera inusual, sin grandes recursos ni conocimiento previo de los negocios.
Tras varios fracasos en emprendimientos previos, el destino le presentó la oportunidad de dar un giro a su vida. Según el portal Infomercado, en uno de sus viajes a Arequipa, Enmanuel sufrió de una gastritis severa, pero un remedio natural hecho con “uña de gato” le permitió aliviar su malestar. Años más tarde, su hijo enfermó de asma, y fue un remedio casero recomendado por una campesina en Huaraz lo que mejoró su salud. Estos dos hechos fueron claves para que Jeanette se interesara profundamente en la medicina natural, lo que dio origen a Santa Natura.
El nacimiento de Santa Natura: un negocio impulsado por la demanda
La historia de cómo nació Santa Natura está ligada a la curiosidad y la perseverancia. Enmanuel, impulsado por el interés de ayudar a su comunidad, comenzó a preparar los remedios naturales en su hogar. Fue entonces cuando las madres de los compañeros de su hijo comenzaron a acudir a su casa, pidiéndole los productos que ella había preparado.
A medida que la demanda crecía, Jeanette y su esposo, Enrique Galdós, decidieron emprender formalmente. Con recursos limitados, empezaron a llenar botellas vacías con sus productos ya recorrer las tiendas naturistas. El boca a boca fue su principal herramienta de promoción, y pronto lograron establecer sus primeras ventas. En 1996, fundaron Agroindustrias Floris, que a la postre se convertiría en el pilar de la marca Santa Natura, creando una línea de productos medicinales elaborados con los ingredientes más representativos de la biodiversidad peruana.
El salto a la internacionalización y el modelo de redes de mercado
El modelo de negocio de Santa Natura evolucionó con el tiempo, permitiendo que la marca se expandiera más allá de las fronteras de Perú. En lugar de depender únicamente de tiendas físicas, los fundadores apostaron por un modelo de redes de mercadeo. Este cambio fue clave para el crecimiento de la empresa. En lugar de depender del comercio minorista, los productos comenzaron a llegar directamente a los consumidores a través de distribuidores independientes, quienes también se beneficiaron de comisiones por ventas.
Este modelo no solo permitió la expansión a otros países de América Latina, sino que también consolidó la presencia de Santa Natura en el mercado peruano, donde su imagen creció rápidamente gracias a la televisión y otros medios. En 2004, Jeanette Enmanuel fue invitada a participar en un programa de televisión, lo que amplió el alcance de la marca. Fue así que la empresa pudo entrar en mercados internacionales, destacándose especialmente en Brasil, Argentina y Estados Unidos. Santa Natura se convirtió en un referente de los productos naturales peruanos a nivel global, abriendo nuevos horizontes para el negocio y la medicina natural.
Reconocimientos y adversidades en el camino
A pesar de los avances, los retos para Santa Natura fueron constantes. En 2006, Jeanette Enmanuel recibió el reconocimiento como Empresaria del Año, un galardón que llegó en un momento de gran presión, ya que la empresa enfrentaba críticas y amenazas. En ese mismo año, incursionó en la política como candidata presidencial por el partido Perú Posible, pero debido a las controversias que rodearon su postulación, decidió retirarse poco tiempo después.
La empresa también vivió momentos difíciles en 2010, cuando Enmanuel sufrió un accidente de tránsito junto a su esposo, lo que le provocó un traumatismo encéfalo craneano ya su esposo fracturas. Este evento fue un punto de inflexión para la empresa, pues los hijos de Enmanuel tomaron las riendas del negocio y, con esfuerzo y dedicación, lograron llevar a Santa Natura a nuevas alturas. En los años siguientes, la empresa logró consolidar su presencia en el mercado con nuevas franquicias y tiendas, además de diversificar sus líneas de productos.
A pesar de los desafíos, Jeanette Enmanuel y su equipo lograron mantener viva la visión original de Santa Natura: promover la salud integral a través de productos naturales y ancestrales. Con el respaldo de la familia y un modelo de negocio sólido, Santa Natura sigue siendo un referente para los emprendedores peruanos, destacando el valor de la perseverancia y la innovación.