El Observatorio Social de Tuberculosis del Perú (OSTB Perú) ha lanzado la campaña “PANTBC: Sin alimentos, la cura es más difícil”, una iniciativa destinada a resaltar la importancia de una nutrición adecuada en el tratamiento integral de la tuberculosis (TB).
La campaña tiene como objetivo sensibilizar a la población sobre el papel crucial de la alimentación en la recuperación de las personas afectadas por esta enfermedad, además de promover una mayor transparencia y responsabilidad en la gestión del programa estatal PANTBC, el cual debe entregar una canasta alimentaria mensual a los pacientes en tratamiento.
Los promotores buscan “generar conciencia sobre las denuncias de mal manejo en los programas de alimentación social del Ministerio de Desarrollo e Inclusión Social (Midis)”, que incluyen demoras en la entrega, falta de insumos adecuados y la entrega de productos en mal estado, según una nota difundida por el OSTB.
Ante estas dificultades, el Observatorio subraya la necesidad de que el Estado asegure que los recursos lleguen en condiciones óptimas a quienes más lo necesitan, ya que la tuberculosis afecta principalmente a las poblaciones más vulnerables, quienes sin una nutrición adecuada corren el riesgo de desnutrición y, por tanto, disminuir la efectividad del tratamiento.
El Programa de Alimentación y Nutrición para el Paciente con Tuberculosis y Familia (PANTBC) es parte del Programa de Complementación Alimentaria (PCA). Sin embargo, ha enfrentado serias dificultades en su implementación, como demoras en la adquisición y distribución de los alimentos, falta de monitoreo efectivo y la entrega de canastas incompletas.
De acuerdo con el Observatorio, las canastas alimentarias, que deben cumplir con un contenido nutricional específico para apoyar el tratamiento de la tuberculosis, a menudo no cubren las necesidades de calorías, proteínas y micronutrientes esenciales.
Nutrición adecuada es crucial
Carlos Rojas, activista y coordinador general del OSTB Perú, subrayó que “la recuperación de la tuberculosis no solo depende de los medicamentos, sino también de una nutrición adecuada que potencie el efecto del tratamiento y contribuya a la adherencia al mismo”.
Asegurar que los pacientes con esta condición tengan acceso a una alimentación digna y adecuada es esencial para fortalecer su salud y mejorar las probabilidades de éxito del tratamiento. Ante las denuncias sobre la negligencia en la entrega de alimentos, Rojas destaca la necesidad de poner mayor énfasis en la gestión eficiente de los programas sociales de alimentación.
La tuberculosis sigue siendo una de las enfermedades infecciosas más mortales en el Perú, con alrededor de 30,000 nuevos casos cada año, según el Ministerio de Salud. A pesar de los avances en diagnóstico y tratamiento, la enfermedad se mantiene como “una amenaza significativa para la salud pública”.
Según el informe global sobre la tuberculosis 2024 de la Organización Panamericana de la Salud y la Organización Mundial de la Salud, Perú es el país con más casos de esta enfermedad en las Américas. En 2023, el país reportó 173 casos por cada 100 mil habitantes, un incremento del 47.8% en comparación con 2020, además de 9.513 casos de secuelas del mal.
Desde 2017, se ha registrado un aumento en las muertes por TB, alcanzando 5.578 fallecimientos a nivel nacional el año pasado. Los casos de tuberculosis multirresistente (MDR), o resistente al medicamento rifampicina, aumentaron un 63.1% respecto a 2020.
Uno de los principales desafíos en el tratamiento es el abandono, un problema que persiste desde hace años sin una atención específica. Como resalta el activista, “la tuberculosis no termina con la ingesta de la última pastilla”.