En un contexto de creciente preocupación sanitaria, el dengue experimenta un aumento en el Perú, desde finales de septiembre de 2024, las estadísticas revelan una tendencia ascendente en los casos semanales de esta enfermedad, que pasó de 400 a casi 1.800 entre septiembre de 2024 y enero de 2025, así informó el analista de datos, Juan Carbajal en sus redes sociales.
El incremento de casos de dengue dejó claro que la situación es preocupante, con 3.247 casos reportados hasta la segunda semana de enero de 2025. Entre las regiones más afectadas, San Martín lidera la lista con 1.105 casos, seguido por Loreto con 801, Piura con 321 y La Libertad con 140. Lima, la capital del país, registró 82 casos hasta la fecha, lo que demuestra que la propagación de la enfermedad no se limita solo a las regiones más alejadas, sino que también afecta áreas urbanas con alta concentración de población.
El perfil demográfico de las personas afectadas por el dengue presenta una variabilidad interesante. Si bien los adultos de entre 30 y 59 años constituyen el grupo más afectado, representando el 34,2 % de los casos, los niños y adolescentes no están exentos de sufrir las consecuencias de esta enfermedad. Las tasas de incidencia en niños y adolescentes alcanzan cifras alarmantes, con 10,88 y 14,53 casos por cada 100 mil habitantes, respectivamente.
Medidas claves ante el avance del dengue
En respuesta a este brote, el Ministerio de Salud puso en marcha un programa de vacunación piloto en 16 distritos de alto riesgo, en las regiones de Piura, Tumbes, Loreto y Ucayali. A partir del 23 de noviembre de 2024, se distribuyeron 445.500 vacunas, lo que permitió aplicar dosis a 222.750 niños y adolescentes de entre 10 y 16 años. Sin embargo, los resultados hasta el momento muestran que solo un 24,5% de la meta fue alcanzada, con 53.571 dosis aplicadas a finales de diciembre del mismo año.
A pesar de estos esfuerzos, el aumento de las temperaturas, propias de la temporada de verano, son un factor determinante en la proliferación del mosquito Aedes aegypti, el principal vector del dengue. Este fenómeno climático ha creado un entorno ideal para la reproducción de los zancudos, incrementando las posibilidades de contagio. Además, las altas temperaturas también favorecen la actividad de otros peligrosos vectores, como las arañas venenosas, especialmente la Loxosceles laeta, conocida como la araña casera, cuya mordedura puede ocasionar complicaciones graves en caso de no ser tratada adecuadamente.
El médico infectólogo Manuel Espinoza, del Instituto Nacional de Salud (INS), alertó sobre los riesgos asociados a las altas temperaturas, destacando que estas favorecen la proliferación de estos vectores. Según el experto, “es fundamental mantener los recipientes de agua cubiertos y limpios para evitar criaderos de mosquitos. Asimismo, en caso de mordedura de araña, se debe inmovilizar la zona afectada y buscar atención médica inmediata”. La recomendación es clara: mantener la higiene en los hogares y eliminar cualquier posible criadero de zancudos, como maceteros o depósitos de agua.
Estrategias de prevención y el llamado a la acción
La prevención del dengue es una prioridad para el Ministerio de Salud, que además de implementar la vacunación y fomentar el control de criaderos, dispuso diversos mecanismos de atención para la población. Se ha puesto a disposición de los ciudadanos la línea gratuita 113, así como servicios de consulta a través de WhatsApp y Telegram, con el fin de ofrecer orientación sobre síntomas, prevención y manejo del dengue.
Por otro lado, el ministro de Salud, César Vásquez, destacó la importancia de un diagnóstico temprano para evitar complicaciones y muertes asociadas con el dengue. El ministro recordó que “en el dengue se mueren porque no los diagnostican temprano, no los atienden temprano. Si el dengue se atiende rápido, no tendrían por qué morirse”. Este llamado a la acción busca sensibilizar a la población sobre la importancia de reconocer los síntomas iniciales de la enfermedad, como fiebre, dolor muscular y malestar general, y acudir rápidamente a los centros de salud.
El ministro también hizo un llamado a la responsabilidad ciudadana, instando a los peruanos a tomar medidas preventivas en sus hogares para evitar que el dengue siga propagándose. Entre las principales recomendaciones, se destaca la necesidad de eliminar los criaderos de mosquitos, evitando almacenar agua en lugares como depósitos y maceteros, que se han convertido en focos de reproducción para los vectores de la enfermedad.