“Es una venganza del gobierno”: Restos de Nicolás Yerovi no serán velados en el Ministerio de Cultura

Ante el silencio del gobierno de Dina Boluarte, la hija del fallecido escritor y periodista anunció que sus seguidores podrán despedirlo en la Biblioteca Central de Barranco

Guardar
Restos de Nicolás Yerovi serán
Restos de Nicolás Yerovi serán velados el 20 y 21 de enero en la Biblioteca Central de Barranco. (Foto: Caretas)

Nicolás Yerovi falleció el domingo 19 de enero y se esperaba que sus restos fuesen velados en las instalaciones del Ministerio de Cultura. Esta facilidad está reservada para aquellas figuras que han dejado huella en la historia del Perú; sin embargo, desde la institución a cargo del gobierno de la presidenta Dina Boluarte se ha preferido el silencio.

La hija del recordado poeta, periodista, dramaturgo, novelista y humorista gráfico, Paloma Yerovi, confirmó a través de sus redes sociales que intentó comunicarse con representantes del Mincul. “Ayer nos dieron largas y hoy también”, dijo para luego revelar que el nombre de su padre no figuraba en la “lista de artistas”. Frente a esa situación era necesario enviar una carta, la misma que fue enviada el 20 de enero a las 8:52 a.m. al correo cpoma@cultura.gob.pe del funcionario Claudio Félix Poma Hermoza.

“Mi papá fue siempre un crítico mordaz de la política de turno. Claramente es por eso que no contestan, porque es una venganza del gobierno. Cuando en realidad deberían agradecerle que nos haya hecho reír en tiempos oscuros en una democracia fantasma sin libertad de expresión”, escribió.

Falleció Nicolás Yerovi, destacado periodista
Falleció Nicolás Yerovi, destacado periodista y escritor que impulsó la sátira política en Perú, a los 73 años

Finalmente, la familia Yerovi confirmó que la despedida de los seguidores de Nicolás Yerovi será en la Biblioteca Central de Barranco ubicado en el Parque Municipal de Barranco. El lunes 20 de enero se podrá visitar entre las 2:00 p.m. a 10:00 p.m. mientras que el martes 21 de enero serán entre las 8:00 a.m. a 12:30 p.m. “El mejor homenaje para nuestro querido padre es, como dice mi hermano, en su pueblo Barranco”, recalcó Paloma Yerovi.

Recordado artista

Nicolás Yerovi fue un escritor, periodista, humorista y poeta conocido por su trabajo en la literatura, el periodismo y la sátira. Fue miembro de una destacada familia de intelectuales y artistas peruanos entre los que destaca su abuelo Leonidas Yerovi Douat, un reconocido poeta, periodista y dramaturgo del siglo XX. Siguió los pasos de su abuelo con un enfoque en la creación literaria y humorística.

Yerovi ha destacado en diversos campos:

Periodismo y humor político: Fue director de publicaciones satíricas y humorísticas como Monos y Monadas y El Idiota Ilustrado, en las que utilizó el humor y la sátira para comentar y criticar la política y la sociedad peruana.

Poesía y literatura: Ha publicado varios libros, combinando poesía y narrativa breve, y a menudo incorpora un toque humorístico o reflexivo en sus obras.

Defensa de la libertad de expresión: Su trabajo lo llevó a ser conocido como un crítico de los regímenes autoritarios, enfrentándose a situaciones de censura, especialmente durante el gobierno de Alberto Fujimori.

El último mensaje

Nicolás Yerovi murió el 19
Nicolás Yerovi murió el 19 de enero de 2025 en Lima, Perú (Facebook / Nicolás Yerovi)

En agosto de 2024, Nicolás Yerovi celebró su cumpleaños número 73 y compartió en su cuenta de Facebook un mensaje cargado de humor, gratitud y reflexión. Con su estilo inconfundible, escribió:

“Hoy cumplo 73 años. Nunca pensé que llegaría a esta edad, porque sobrevivir 73 años en el Perú equivale a vivir 800 años en Suiza. Ha sido una aventura intensa, sorprendente, desafiante, hilarante y perseverante.

Tengo, pues, 73 años, 6 corbatas y ningún remordimiento. Aunque puedo carecer de muchas cosas, lo único que me sobra es gratitud.

Gracias a quienes han sonreído leyendo lo que he escrito y publicado durante el último medio siglo, porque sus sonrisas han enriquecido mi vida. Gracias también a quienes se ríen cuando digo que soy anticuado: me gustan las mujeres, no tengo tatuajes y, además, pago mis deudas.

Al final, pertenezco a un linaje de escritores satíricos que, con discreción, ha convertido incluso el dolor en una elegante forma de maravillarse ante el misterio de la vida”.

Guardar