La reciente gira de reencuentro de Libido, icónica banda peruana de rock, que se dio en el 2024, dejó al descubierto las tensiones internas entre sus integrantes. Salim Vera y Manolo Hidalgo, se presentaron en el programa Así Somos de RPP, donde hablaron sobre los conflictos que resurgieron tras 20 años de separación, una situación que también refleja las históricas diferencias entre Salim y el bajista Toño Jáuregui, otro miembro clave de la banda.
Aunque todo parecía fluir bien entre la exagrupación lo que se vivía tras bambalinas era completamente lo contrario. Pese a que ya había rumores que finalizando la gira en la ciudad de Piura, los integrantes casi no se podían ni ver, esto fue confirmado por el propio Vera.
“En algún momento de la gira pasaron cosas y eso determinó que nos separáramos”, expresó Salim Vera, vocalista y actual integrante de Coral. “Fueron cosas fuertes; nosotros (Manolo y Salim) no somos los victimarios. Tuvimos que proceder a lo que estaba sucediendo. Lo que nos quedaba era ser profesionales, actuar a la medida y cumplir con lo que habíamos prometido. Trabajamos duro para darle al público lo que se merece. Nos pusimos por encima de la desavenencia”, mencionó sobre esta relación rota.
La gira comenzó con un concierto en el Estadio Nacional de Lima y continuó en ciudades como Cusco, Chiclayo, Arequipa, Trujillo y Piura, reuniendo a los cuatro integrantes originales de la banda. Sin embargo, la falta de química entre ellos se hizo evidente.
Manolo Hidalgo, guitarrista y compositor, describió la experiencia como un desafío: “Era una experiencia que queríamos hacer, aun sabiendo cómo iba a ser. Disfrutábamos mucho el Estadio Nacional, volver a tocar canciones después de mucho tiempo. Pero sabíamos que la química no era la misma, por algo en algún momento nos separamos”.
Resaltó que esta experiencia trajo altos y bajos, aunque la disfrutó profesionalmente hablando, por sus puestas en escena, Manolo confiesa que pudo ser completamente mejor si entre todos habría una buena relación. Sin embargo, desde el inicio sabían que esto podía pasar.
“Tenía esos sabores dulces y agrios. Disfrutas más cuando te llevas bien, pero es algo que teníamos que hacer, por el lado musical lo disfruté, por el lado de química, nos separamos tanto tiempo que sabíamos que no iba a ser la mejor”, confesó al especto.
A pesar del éxito de la gira, Salim Vera fue categórico sobre un posible reencuentro en el futuro: “Van a pasar muchos años. Siendo sincero y directo, hay diferencias insalvables entre nosotros que son muy importantes. La química musical no existe; eso es insalvable completamente”.
Una relación histórica marcada por conflictos
Las declaraciones de Vera e Hidalgo remiten inevitablemente a las tensiones históricas entre Salim Vera y Toño Jáuregui. Jáuregui, fundador y compositor principal de Libido, abandonó la banda hace más de una década en medio de acusaciones de exclusión y desacuerdos creativos con Vera e Hidalgo.
En su libro Más allá de Libido, Jáuregui detalló cómo se deterioró su relación con Vera, a quien acusó de obstaculizar sus propuestas musicales y de apartarlo de la banda. “Sentí que la banda dejó de ser un grupo para convertirse en un dúo”, afirmó Jáuregui en una entrevista previa.
A pesar de estos conflictos, en 2024, los miembros originales decidieron reunirse para una serie de conciertos. Según relatos de ambos músicos, la iniciativa surgió tras un contacto de la esposa de Jáuregui con Vera, quien aceptó retomar la colaboración musical. Sin embargo, tanto Toño como Salim han reconocido que las diferencias personales persisten, y que su relación actual se basa exclusivamente en el ámbito profesional.