El estudiante Gabriel Cárdenas, director e intérprete de la obra María Maricón, que generó una intensa controversia con posterior censura, ha defendido su trabajo y aclaró que no se trata de un “ataque” a la religión católica, sino de una reflexión sobre su experiencia personal y su visión de la fe.
El creador de la pieza se pronunció este martes a través de su cuenta pública de Instagram, horas antes de que su propuesta fuera rechazada por el alcalde de Lima, Rafael López Aliaga, la bancada Renovación Popular en conjunto, el Ministerio de Cultura, la Conferencia Episcopal Peruana y el recientemente investido cardenal Carlos Castillo.
“¿Por qué hago una obra sobre la religión católica? Porque fui formado 14 años bajo sus normas machistas y opresoras. (...) Porque, por su formación, mi papá tenía los mismos pensamientos, pero gracias a Dios recapacitó”, escribió en un extenso mensaje. Infobae Perú solicitó sus descargos después de que su obra fuera censurada, pero la producción indicó que hablaría más adelante.
Cárdenas explicó que María Maricón, una pieza que aborda temas de religión, género y discriminación, ha sido un vehículo para explorar, siempre según su mirada, las contradicciones entre su identidad como homosexual y su educación religiosa.
“Fueron los mismos católicos quienes me decían que no podía serlo porque tenía comentarios distintos y no podía haber un gay en la parroquia”, mencionó. Para él, la obra es una oportunidad para cuestionar esas normas impuestas durante su formación católica, un proceso que no considera necesariamente destructivo hacia la fe. “Uso a las vírgenes y santas de las cuales he sido o soy devoto (...) para que me sostengan escénicamente poder contar mis vivencias como homosexual en una Lima machista donde me han discriminado varias veces”, resaltó.
El joven director también reflexionó sobre la contradicción entre el Perú, un estado laico, y la fuerte presencia del catolicismo en la vida pública. “Que exista una gran mayoría que se autodenomina católico, es otra cosa”, señaló. De igual modo, compartió experiencias personales vinculadas a su educación religiosa, como momentos de humillación y represión.
“En el colegio me dijeron que las mujeres no podían usar falda porque eso no era de señoritas. Un sacerdote me preguntó si me había masturbado y luego dónde y en qué pensaba (obvio no respondí) y me dijo que no había hecho una confesión sincera. Un sacerdote fue sacado de la parroquia porque le mandaba mensajes fuera de lugar a una profesora del colegio. Mejor no sigo”, agregó.
Finalmente, indicó que los comentarios con tinte homofóbico dirigidos a él y a su trabajo le “hacen pensar que hice bien en alejarme de la religión, no de Dios y de las deidades” en las que cree. “Créanme que si Jesús regresa, a los primeros que los golpearía con su cruz son a todos esos discriminadores y falsos católicos”, concluyó.
Cancelado
María Maricón iba a formar parte de la 24.ª edición del Festival Saliendo de la Caja, un evento anual de la Pontificia Universidad Católica (PUCP) que sería inaugurado este miércoles y permitiría a los estudiantes de los últimos ciclos de la Facultad de Artes Escénicas presentar sus proyectos finales en teatro, música y danza.
Sin embargo, la universidad decidió cancelarlo después de las críticas, rechazó el “mal uso de símbolos religiosos” y pidió disculpas “a la comunidad y a la opinión pública”. En contraparte, colectivos y activistas protestaron por haber cedido a lo que consideraron una “presión ultraconservadora”.
La programación del festival incluía una amplia variedad de actividades, como danza contemporánea, conciertos, performances y obras teatrales dirigidas tanto a niños como a público en general. Además, se destacaba el segmento ‘Bitácora: Ciclo de conferencias performáticas’, una serie de actividades gratuitas que ofrecían un vistazo a los procesos creativos detrás de las obras.