Un caso de propiedad intelectual ha captado la atención de emprendedores y juristas en el Perú. La disputa entre un compatriota que buscaba registrar su marca YAPA y el gigante financiero Banco de Crédito del Perú (BCP), propietario de YAPE, llegó a manos del Indecopi, lo que marcó un precedente en el análisis de similitudes entre marcas. Sin embargo, cuando parecía que la victoria estaba asegurada para la marca YAPA, un nuevo rival inesperado cambió el rumbo de la historia.
¿Qué llevó a la entidad a rechazar el registro de YAPA pese a que no existía riesgo de confusión con YAPE? Según el portal Pasión por el Derecho, esta historia no solo revela las tensiones en el registro de marcas, sino que también pone en evidencia los desafíos legales que enfrentan los emprendedores frente a grandes corporaciones.
La controversia inicial: YAPA vs.YAPE
El conflicto comenzó en los tribunales de propiedad intelectual del Indecopi cuando un peruano decidió registrar su marca YAPA . Esta propuesta llamó inmediatamente la atención del BCP, el mayor banco del país y propietario de la popular marca de pagos electrónicos YAPE . Según el banco, las similitudes entre ambas marcas, tanto visuales como fonéticas, podrían inducir un error al público, creando confusión en el mercado.
El BCP no solo defendió su posición argumentando el parecido entre ambas marcas, sino que también acusó al solicitante de actuar de mala fe. Según el banco, era inconcebible que el emprendedor no hubiera tenido conocimiento previo de YAPE , una marca ampliamente conocida en el país. Además, afirmó que el solicitante buscaba aprovecharse de la reputación y el liderazgo del banco en el rubro financiero.
Sin embargo, el ente regulador descartó estas acusaciones. Tras analizar el caso, se concluyó que no había pruebas suficientes para demostrar que el solicitante tenía intenciones deshonestas. El hecho de que el peruano conociera la existencia de YAPE no implicaba automáticamente mala fe.
El análisis fonético y semántico que marcó la diferencia
Una de las claves del caso fue el análisis detallado que realizó el Indecopi sobre las similitudes entre YAPA y YAPE. Aunque ambas marcas compartían las tres primeras letras, el organismo determinó que sus diferencias eran significativas. El hecho de que YAPA terminara con una “A” y YAPE con una “E” resultó crucial para evitar el riesgo de confusión fonética entre ambas.
Además, el significado de cada marca también fue un factor determinante. Mientras que YAPE es una creación inédita sin un significado inherente, YAPA es una palabra de uso común en el español peruano, que hace referencia a un regalo o propina. Esta connotación cultural agregó un nivel de distinción entre las marcas, favoreciendo la posición del emprendedor frente a la oposición del BCP.
El fallo inicial de la entidad fue contundente: no existía un riesgo suficiente de confusión en el público como para impedir el registro de YAPA . Todo parecía indicar que la marca del emprendedor peruano se abriría camino en el mercado.
El giro inesperado: SUPERYAPA ENTEL entra en escena
Cuando el camino parecía despejado para YAPA, un segundo examen realizado por el Indecopi cambió por completo la situación. Esta vez, la entidad comparó la marca YAPA con SUPERYAPA ENTEL, una marca registrada por la compañía de telecomunicaciones Entel. El análisis reveló que el término “YAPA”, compartido por ambas marcas, podía generar confusión en los consumidores.
El ente regulador concluyó que el público podría asumir erróneamente que YAPA y SUPERYAPA ENTEL pertenecían a la misma empresa debido a la coincidencia del término principal. Aunque la oposición del BCP había sido rechazada, esta nueva comparación fue suficiente para que el registro de YAPA fuera finalmente denegado.
Los retos de registrar marcas en Perú
El resultado del caso deja importantes lecciones para los emprendedores peruanos. Según el portal Pasión por el Derecho, este tipo de conflictos evidencian las múltiples barreras que enfrentan quienes buscan registrar una marca en un mercado saturado y competitivo. Aunque YAPA logró superar la oposición del BCP , no pudo evitar el veto de una marca registrada previamente por una corporación de otro rubro, como Entel.
Además, el caso resalta la importancia de realizar un análisis exhaustivo antes de presentar una solicitud de registro. Factores como similitudes fonéticas, visuales y semánticas, así como la presencia de términos comunes, pueden ser determinantes en el resultado final.
La historia de YAPA y YAPE también ilustra cómo las grandes empresas utilizan las herramientas legales para proteger su posición en el mercado. Para los emprendedores, esto puede traducirse en una batalla cuesta arriba, donde incluso pequeños detalles pueden marcar la diferencia entre el éxito y el rechazo.
En última instancia, de no haber sido por la existencia de SUPERYAPA ENTEL , YAPA y YAPE podrían haber coexistido en el mismo sector comercial, demostrando que en el mundo de las marcas, una sola vocal o palabra puede ser suficiente para cambiar el destino de un proyecto.