Demoras afectan la red de fibra óptica en Perú: Contraloría investiga supuestas irregularidades

La implementación de la Red Dorsal Nacional de Fibra Óptica (RDNFO) en Perú, esencial para mejorar la conectividad en regiones rurales, sigue enfrentando problemas de irregularidades y retrasos que afectan el avance de esta infraestructura clave, que recorre 13.500 km a lo largo del país. En el 2019 se esperaba enlazar 21 proyectos regionales, pero, debido a diversos problemas, solo tres de estos proyectos estaban en operación para esa fecha. Actualmente, de los 18 proyectos regionales planeados, 10 están en funcionamiento y los otros ocho se esperan para mediados de 2025.

Las demoras han afectado especialmente a regiones como Cusco, Piura, Tumbes y Cajamarca, donde el Programa Nacional de Telecomunicaciones (Pronatel) tuvo que resolver contratos con los operadores debido a incumplimientos, lo que han ralentizado el despliegue de la fibra óptica.

Uno de los casos de supuestas irregularidades se dio en la red regional de Cusco, asignada en 2015 a la empresa Gilat Networks para la implementación de acceso y transporte de banda ancha. La red, parte de un proyecto destinado a mejorar la conectividad de instituciones públicas en áreas rurales, sufrió múltiples retrasos. De acuerdo a lo informado por Pronatel, en 2021, Gilat entregó la red de transporte sin completarla al 100%.

En 2023, cuando Gilat solicitó la renovación de su contrato para operar y mantener las redes de Cusco y otras tres regiones (Ayacucho, Apurímac y Huancavelica), Pronatel optó por no renovarlo, aduciendo que detectó problemas en el uso de la infraestructura. Lennin Quiso Córdova, director de Pronatel, señaló que actualmente se está revisando si la referida empresa cumplió a cabalidad con sus obligaciones en estos proyectos regionales.

En agosto de 2024, Pronatel detectó una situación preocupante: tráfico de datos de empresas no autorizadas transitaba por la red de Cusco. Durante una prueba, los técnicos de la institución documentaron un tráfico de 4,904.88 Mbps (entrada) y 797.64 Mbps (salida), identificando conexiones de empresas de telecomunicaciones privadas. Este hallazgo implica que la red de transporte estatal, reservada para fines públicos, estaba siendo utilizada con fines comerciales sin autorización (Oficio N° 2128-2024-MTC/24.09).

Estas conexiones, de acuerdo con los términos de uso de la infraestructura de transporte de Pronatel, no estaban permitidas, ya que la red debe emplearse exclusivamente para servicios destinados a instituciones beneficiarias en áreas rurales.

Según Lennin Quiso, el uso de la red de transporte por parte de Gilat requeriría una revisión exhaustiva para determinar si el servicio que la empresa pretendía ofrecer era compatible con el contrato original. No obstante, aún no se han emitido detalles adicionales y se espera una resolución de las áreas encargadas de Pronatel.

Frente a las denuncias de presuntas irregularidades en la ejecución de contratos de financiamiento con el Programa Nacional de Telecomunicaciones (Pronatel), la empresa Gilat ha emitido un comunicado en el que rechaza las acusaciones.

La empresa niega estar generando tráfico no autorizado en la red de transporte del proyecto regional Cusco y asegura que, según el contrato de financiamiento, puede ofrecer servicios adicionales en la red de acceso, por lo que afirma que todo el tráfico registrado se encuentra dentro de los términos permitidos.

Gilat sostiene que la entrega de los proyectos regionales a Pronatel se realizó tras verificar el cumplimiento de las especificaciones técnicas de construcción e instalación de la red de transporte y que las actas de conformidad, que certifican la finalización de cada red regional, fueron firmadas en distintas fechas entre 2019 y 2021, de acuerdo con el cronograma establecido. Asimismo, la empresa señala que los contratos de operación y mantenimiento de las redes de Ayacucho, Apurímac, Huancavelica y Cusco se suscribieron después de la firma de dichas actas, en cumplimiento de los acuerdos con Pronatel.

La Contraloría General de la República ha iniciado una investigación sobre el proyecto en Cusco, para garantizar que los contratos y el uso de la red cumplen con el objetivo social de mejorar la conectividad en áreas excluidas. A través del Memorando N° I000093-2024-MTC/24-OCI, el Órgano de Control Institucional (OCI) dispuso una recolección exhaustiva de información sobre el proyecto, buscando aclarar las posibles irregularidades en el uso de la red.

Abel Huamán, experto en telecomunicaciones, señaló que la red de transporte de Pronatel no debería ser utilizada por operadores privados para fines comerciales hasta que exista una concesión específica. Agregó que espera que la entidad pueda aclarar la situación y garantizar que la infraestructura de transporte de redes esté dedicada a los beneficiarios del proyecto.

“Esperemos que Pronatel pueda aclarar. La red de transporte, según se sabe, no puede ser utilizada por ningún operador hasta ser concesionada, salvo para soportar el tráfico de instituciones beneficiarias que forman parte del contrato original”, dijo el especialista en telecomunicaciones.