
Desde que se aprobó el Decreto de Necesidad y Urgencia 70/2023 de Javier Milei que habilitó aumentos ilimitados en las cuotas de las escuelas de gestión privada, muchas familias se enfrentan a la imposibilidad de asumir estos costos, poniendo en riesgo la continuidad educativa de sus hijos en la escuela a la que concurrían. En este contexto, el Gobierno nacional implementó en el año 2024 (y reimplementó para 2025) una nueva modalidad de financiamiento educativo en los niveles obligatorios, denominada “vouchers educativos”.
Esta política supone un modelo de financiamiento a la demanda y ya fue aplicado en algunos países como Chile, Suecia o Nicaragua. Con algunas diferencias locales, el sistema apunta a que las familias elijan una escuela y la paguen a través de vouchers. De este modo, se instala una suerte de mercado de servicios educativos en el que los mecanismos para conseguir vacantes privilegian a quienes tienen más recursos económicos y simbólicos. Por ejemplo, en los casos en los que se implementó, ha sucedido que cuando aumenta la demanda de vacantes (en ciertos barrios y ciertas escuelas), se emplean criterios como el mérito académico del estudiante o un “copago” (como sucede en el sistema de prepagas de salud). De este modo se retroalimenta la segregación propia de los sistemas privados de educación.
En el caso de Argentina, si bien se denominan vouchers educativos, solo se trata de un subsidio del Estado nacional a las familias cuyos hijos concurren a escuelas privadas, que ya cuentan con subvención jurisdiccional del 75 al 100%.
Esta política irrumpe, por un lado, con el reparto de funciones en un sistema federal ya que, desde la transferencia de los servicios educativos a las jurisdicciones, la administración y financiamiento del sistema educativo obligatorio es responsabilidad de las provincias, mientras que las universidades nacionales, actualmente desfinanciadas, dependen del gobierno nacional. Por otra parte, la política denominada “Vouchers Educativos” genera un nuevo agrupamiento de “subsidiados”, curiosamente algo que los votantes del gobierno de Milei rechazan y denuncian tal como él mismo lo hizo en todos sus discursos y en la campaña.
En síntesis, en este contexto, en lugar de revisar la normativa que origina el problema que deben afrontar las familias que eligen el sistema de educación de gestión privada, el Estado Nacional opta por medidas paliativas a través de nuevos subsidios, aumentando así la dependencia de las familias al nuevo Estado “libertario”. Emergen muchas preguntas, aunque quizás se pueda esbozar una propositiva: ¿Es posible diseñar políticas públicas equitativas que respeten, siguiendo el sistema federal de financiamiento educativo, los fondos estatales asignados a las universidades nacionales y, además, destinar otros recursos hacia las escuelas de gestión estatal?
Últimas Noticias
Una propuesta para eliminar la carga tributaria del impuesto al cheque
El plan del Iaraf sugiere incrementar progresivamente el porcentaje del tributo que puede computarse como pago a cuenta de otros impuestos nacionales, con el objetivo de reducir distorsiones y aliviar la carga fiscal sobre las empresas

Reforma laboral: debate para todos, más que un tema sectorial
El proyecto de ley para la modernización laboral propone que los fondos de indemnización sean financiados con aportes previsionales, lo que podría desfinanciar el sistema de seguridad social y beneficiar a los empleadores

De sospechosos a ciudadanos
El Proyecto de Inocencia Fiscal enviado por el Ejecutivo nacional al Congreso viene a cambiar el eje y parte de una premisa tan simple como revolucionaria en la Argentina: el contribuyente no es delincuente

Reforma laboral y creación de empleo
Cuáles son las soluciones que necesita el país para generar trabajo registrado

La licitación de fin de año consolida el giro hacia los instrumentos CER
El Tesoro logró un rollover del 102,01%, cubriendo la totalidad de los vencimientos y mostrando confianza del mercado




