Ante la actividad eruptiva del volcán de Fuego y los Colosos de Pacaya y Santiaguito, el Sistema de la Coordinadora Nacional para la Reducción de Desastres (Conred) mantiene supervisión continua para comunicar a la ciudadanía sobre cualquier modificación en las medidas de resguardo ante una posible crisis.
Este sábado 8 el Instituto Nacional de Sismología, Vulcanología, Meteorología e Hidrología (INSIVUMEH) ha dado a conocer el más reciente boletín vulcanológico en el que reporta la situación de estos tres importantes volcanes de Guatemala.
Volcán de Fuego
Actividad: Se observa desgasificación débil de color blanco, (vapor de agua y otros gases magmáticos) que se eleva hasta 300 metros sobre el cráter. Los vientos acelerados a baja altura pueden remover sedimentos lo cual podría generar una cortina de ceniza, esto podría ocasionar caída de ceniza en las comunidades cercanas al volcán. Por la noche y madrugada se observó leve incandescencia sobre el cráter. No se han reportado sonidos o retumbos. La dirección del viento a alturas sobre el cráter es principalmente en dirección oeste y noroeste, según modelos numéricos continuará así durante las siguientes 24 horas.
Volcán de Pacaya
Actividad: En los periodos de despeje se ha observado desgasificación débil sobre el cráter. Las estaciones sísmicas de INSIVUMEH continúan registrando eventos cortos de baja frecuencia, lo que sugiere actividad del magma y gases en el interior del volcán, así como periodos de desgasificación prolongados o abundantes en el cráter.
Volcán de Santiaguito
Actividad: Se observa desgasificación sobre el cráter. Se registran explosiones débiles y moderadas expulsando columnas de gas y ceniza que alcanzan hasta 900 metros de altura sobre el cráter y se dispersan al suroeste y oeste. Por la noche y madrugada se observó incandescencia en el cráter del domo caliente y en la parte alta del flujo de lava en dirección Oeste-Suroeste. Se registran avalanchas de bloques débiles, moderadas y algunas fuertes sobre el flujo de lava, en el flanco Sur y en el flanco sureste. Debido a la dirección del viento, se espera caída de ceniza fina en las fincas cercanas al suroeste y oeste del domo Caliente. No se descarta la posibilidad de flujos de bloques y ceniza de características moderadas a fuertes, así como flujos piroclásticos de largo alcance en diferentes direcciones, por lo tanto, no se debe permanecer cerca ni dentro de los cauces de los ríos cercanos a las faldas del volcán.
Cuántos volcanes hay en Guatemala
Debido a su localización en el Cinturón de Fuego del Pacífico, los volcanes cubren la mayor de la geografía del país, lo que lo convierte en una de las regiones con mayor densidad de estas formaciones rocosas.
Aunque en Guatemala se han determinado al menos 324 estructuras de origen volcánico, el Instituto Geográfico Nacional (IGN) valida únicamente 32 volcanes, mientras que la Federación Nacional de Andinismo dice que son 37. Los 287 restantes son llamados por el INSIVUMEH como “focos eruptivos”.
Sin embargo, independientemente de las discrepancias, hoy en día son tres los volcanes que se encuentran activos y que son objeto de vigilancia de las autoridades guatemaltecas: el volcán de Fuego, de Pacaya y de Santiaguito.
El volcán de Fuego y sus erupciones
Ubicado entre los departamentos de Sacatepéquez, Escuintla y Chimaltenango, el de Fuego es el estratovolcán más activo de América Central y uno de los que tiene mayor relevancia a nivel mundial.
Con más de 3763 metros sobre el nivel del mar, este volcán ha registrado a lo largo de su historia diversas erupciones violentas, como la de 1932, cuando cubrió con ceniza a la ciudad de Antigua Guatemala y algunas partes de Honduras y El Salvador; la de 1974 cuando sus flujos piroclásticos destruyeron parte de la vegetación de los alrededores y escondió parcialmente las comunidades de San Pedro Yepocapa y Acatenango.
El 3 de junio de 2018 tuvo su mayor erupción en lo que va del nuevo milenio, con columnas de ceniza que alcanzaron los 10 mil metros de altura sobre el nivel del mar. Esta actividad dejó 300 personas muertas, 200 extraviadas y 600 heridos; así como dos millones de habitantes perjudicados.
El reporte de su última actividad fuerte fue el pasado 12 de diciembre de 2022, cuando el volcán entró en erupción dejando columnas de ceniza de 500 metros de altura y generando un flujo de lava de 800 metros, con caída de ceniza en asentamientos de 45 kilómetros a la redonda.