
El torneo Apertura 2025 de la Liga MX concluyó con un desenlace poco común, tres jugadores compartieron el campeonato de goleo individual, al cerrar la fase regular con 12 anotaciones cada uno.
Se trata de Joao Paulo Dias (Paulinho), delantero portugués de Toluca; Armando González, atacante mexicano de Guadalajara; y Joao Pedro Geraldino, ariete italiano de Atlético de San Luis.
Este triple empate representa la cuarta ocasión en la historia de los torneos cortos que el título de goleo se reparte entre tres o más futbolistas.
Los antecedentes se registraron en los torneos Verano 2000, Bicentenario 2010 y Clausura 2025, lo que convierte al año 2025 en un caso excepcional, con dos empates múltiples en un mismo año futbolístico.
Entre los tres campeones, Paulinho fue el más eficiente frente al arco. Anotó sus 12 goles en 988 minutos jugados, lo que equivale a una anotación cada 82.33 minutos.
Además, este título representa su tercer campeonato de goleo consecutivo, consolidando su dominio ofensivo en el fútbol mexicano y su papel como referente en el ataque de Toluca.
Armando González, con apenas 22 años, se convirtió en el primer mexicano en ganar el título de goleo con Chivas desde Alan Pulido, que lo ganó en el Apertura 2019.

Disputó 1127 minutos, con un promedio de un gol cada 93.92 minutos. Su irrupción confirma el resurgimiento del talento nacional en posiciones ofensivas y lo perfila como una de las figuras jóvenes más prometedoras del torneo.
Por su parte, Joao Pedro Geraldino fue el más constante en minutos: jugó 1499 minutos y promedió un gol cada 124.92 minutos. Aunque su frecuencia goleadora fue menor, su presencia en el área y su aporte sostenido fueron fundamentales para mantener a Atlético de San Luis en zona competitiva.
Este triple empate también refleja el alto nivel competitivo entre los clubes, donde ningún delantero logró despegarse en la tabla. La presión constante, las defensas equilibradas y la efectividad puntual marcaron un torneo donde cada gol tuvo peso decisivo.
Este campeonato de goleo compartido no solo refleja la paridad ofensiva entre clubes, sino también la diversidad de estilos y nacionalidades que enriquecen el espectáculo de la Liga MX.
Ninguno de los tres logró despegarse en la recta final, y todos anotaron en la jornada 17, manteniendo viva la disputa hasta el último minuto. El campeonato de goleo compartido premia la constancia, pero también abre el debate sobre quién fue realmente el más determinante del torneo.

