En plena mañana de este 16 de septiembre, día del desfile militar en la Ciudad de México, el clavadista olímpico mexicano Juan Celaya vivió un incidente que rápidamente se volvió viral en redes sociales.
A través de una historia publicada en la cuenta de Instagram de su compañero y también clavadista Osmar Olvera, Celaya relató cómo perdió su teléfono celular tras sufrir un percance automovilístico cerca del Palacio de los Deportes.
Según explicó, ambos deportistas salieron del Centro Nacional de Desarrollo de Talentos Deportivos y Alto Rendimiento (CNAR) en dirección al Campo Militar para participar en los actos protocolarios de las celebraciones patrias. Durante el trayecto, el vehículo en el que viajaban cayó en un bache sobre avenida Añil y Churubusco, lo que les obligó a detenerse para cambiar la llanta.
Mientras realizaban la maniobra, Celaya utilizó su celular como linterna para iluminar el área donde colocarían el gato hidráulico. Una vez concluido el cambio de llanta, los atletas retomaron el camino sin percatarse de que el dispositivo había quedado olvidado en la calle.
“Me acordé a los dos minutos de haber subido al coche y cuando regresamos ya no estaba mi celular”, explicó Celaya en el video difundido por Olvera. Ante la imposibilidad de recuperarlo de inmediato, el clavadista olímpico decidió hacer un llamado público en busca de ayuda.
El mensaje no solo apeló a la buena voluntad de quien pudiera haber encontrado el dispositivo, sino que incluyó detalles precisos de la ubicación del percance. “Ayuda, para poder contar a esta persona y decirle que haga su buena obra del día, que regrese mi celular (…) ofrecemos una recompensa, quiero tener otra vez los contactos de mi celular y también contactarme con mi familia para que sepan que estoy bien”, añadió Celaya.
El atleta acompañó sus palabras con un mapa que señalaba la zona exacta del extravío: la intersección de avenida Añil con Río Churubusco, justo frente al Palacio de los Deportes.
La situación generó solidaridad entre los seguidores de Celaya y Olvera, quienes difundieron la historia con la esperanza de que llegara a la persona que recogió el dispositivo. Varios usuarios resaltaron la vulnerabilidad de los deportistas en este tipo de incidentes y la importancia de preservar la comunicación con sus familias, especialmente en fechas de gran exposición pública como las celebraciones del 16 de septiembre.
