
La decisión de un tribunal federal de Estados Unidos permitió que Gerardo Ortiz libre una condena de cárcel, tras una acusación que lo relacionaba con operaciones financieras de una empresa presuntamente ligada al Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG).
La jueza Maame Ewusi Frimpong resolvió que el intérprete de corridos cumpla un periodo de tres años en libertad supervisada, considerando las recomendaciones tanto de sus representantes legales como de la fiscalía.
Abogado señala al mánager de Gerardo Ortiz como el causante del delito

La defensa del intérprete argumentó que, en 2018, el artista realizó una serie de conciertos en colaboración con la empresa Gallística Diamante, que pertenecía a Jesús Pérez Alvear, señalado como operador de fondos para el CJNG.
Mark Werksman, representante legal de Gerardo Ortiz, explicó que esta relación se limitó a cuestiones contractuales por la influencia de José Ángel del Villar, quien gestionaba la carrera del artista en ese momento.
“Por su cooperación en contra de su ex manager y productor, José Angel del Villar, el señor Ortiz se puso en gran riesgo y en peligro de daño personal al testificar en contra de su ex manager. Se trataba de un individuo con intereses alineados con el Cártel Jalisco Nueva Generación”.
La cooperación de Gerardo Ortiz con las autoridades de EEUU

La decisión judicial que evitó la prisión para Gerardo Ortiz viene tras la cooperación del cantante con las autoridades y luego de haberse declarado culpable en 2024 de violar la Ley Kingpin, misma que prohíbe realizar negocios con individuos o entidades designados como narcotraficantes por el Departamento del Tesoro de Estados Unidos.
El acuerdo de culpabilidad incluyó la cooperación del artista con las autoridades, lo que lo llevó a testificar durante dos días en el proceso judicial contra su exmánager y productor musical, Ángel del Villar.
Las disculpas de Gerardo Ortiz y el miedo de su esposa

Durante la audiencia de sentencia, Ortiz se dirigió a la jueza con palabras de arrepentimiento: “Quiero ofrecer unas disculpas por la falla que tuve, mi inexperiencia como ser humano”, expresó con la voz quebrada. El cantante suplicó una segunda oportunidad para continuar con su carrera y permanecer junto a su familia, a la que calificó como lo más valioso en su vida.
El abogado defensor, Mark Werksman, reforzó la petición al leer fragmentos de una carta escrita por la esposa de Ortiz, en la que se describía el temor constante que enfrenta la familia desde que el artista decidió colaborar con la justicia en un caso relacionado con un cartel mexicano.
El riesgo personal que asumió Ortiz al testificar fue un argumento central de la defensa. Werksman sostuvo que su cliente se ha convertido en un objetivo del narcotráfico, lo que ha dificultado la organización de conciertos en territorio mexicano y representa una amenaza que podría extenderse durante años..
La cooperación de Ortiz resultó determinante en el caso contra Del Villar, propietario de la disquera Del Records y su antiguo mánager. Del Villar fue acusado de más de diez cargos, entre ellos conspiración para realizar transacciones con un traficante de drogas designado y negocios ilícitos por un monto aproximado de 175 mil dólares. Tras un juicio de dos semanas en Los Ángeles, el productor fue sentenciado en agosto a cuatro años de prisión y una multa de 2 millones de dólares.


