
La Fiscalía General de la República (FGR) llevó a cabo la destrucción de 22 vehículos blindados de fabricación artesanal, conocidos como “monstruos”, en el estado de Tamaulipas. Dicha acción fue realizada en el marco del programa “Destino de Bienes y Objetos del Delito” que, según informaron, busca dar un destino legal a los bienes asegurados en operativos contra la delincuencia organizada.
De las 22 unidades aseguradas, 19 estaban vinculadas a expedientes distintos, por lo que fueron incautados en diferentes operativos realizados en la entidad.
Estas acciones fueron resultado de la colaboración entre el Gabinete de Seguridad del Gobierno de México, la Secretaría de la Defensa Nacional y la Guardia Estatal. Según la información oficial, los vehículos presuntamente eran empleados por integrantes de grupos delictivos para actividades ilícitas. Cabe recalcar que en la región operan grupos criminales como el Cártel del Golfo, el Cártel del Noreste y Grupo Escorpión.

Durante el procedimiento de destrucción, participaron representantes del Ministerio Público Federal, quienes se encargaron de coordinar la identificación de los vehículos y supervisar todas las diligencias requeridas. Además, estuvieron presentes peritos oficiales y personal del Órgano Interno de Control de la FGR, con el objetivo de garantizar que el proceso se realizara conforme a la normativa vigente.
Finalmente, las instituciones involucradas en las acciones, señalaron que la destrucción de los vehículos forma parte de los esfuerzos institucionales para combatir el crimen organizado y debilitar su infraestructura, además de reforzar la coordinación entre las autoridades federales y estatales en la región.
Decomisan otros vehículos “monstruos” presuntamente pertenecientes al Cártel del Golfo y al Cártel del Noroeste

A mediados del año pasado, en el estado de Tamaulipas fueron decomisados medio centenar de vehículos blindados artesanalmente en Reynosa, Tamaulipas, ha puesto de relieve la sofisticación y el alcance de los grupos criminales que operan en la región. Estas unidades, conocidas como “autos monstruos”, estaban vinculadas a treinta expedientes y fueron aseguradas en operativos conjuntos de la Secretaría de la Defensa Nacional y la Guardia Estatal, según informó la Fiscalía General de la República (FGR).
El procedimiento de destrucción fue enmarcado en las acciones del Programa Destino de Bienes y Objetos del Delito, que contempla la eliminación de objetos relacionados con actividades ilícitas. Las imágenes difundidas por la FGR muestran vehículos con pintura similar a la utilizada por el Ejército mexicano, mientras que otros presentaban colores oscuros y grafitis.
Cabe recalcar que las modificaciones estructurales eran evidentes: algunos automotores tenían la parte delantera reforzada, otros exhibían transformaciones en la parte trasera y varios contaban con estructuras superiores diseñadas para transportar a sujetos armados, lo que revela su uso frecuente en enfrentamientos tanto con organizaciones rivales como con fuerzas de seguridad.
Así eran las unidades aseguradas en el estado
Entre los vehículos destruidos, uno destacaba por su recubrimiento verde y la presencia de ventanas improvisadas, mientras que otros, de color negro o con camuflaje militar, mostraban abolladuras en la carrocería. Los restos de estas unidades fueron apilados en el lugar tras la intervención de una grúa, que volcó y desmanteló los automotores, como se observa en una grabación difundida por la autoridad.
El comunicado oficial de la FGR subrayó la presencia del Ministerio Público Federal, quien coordinó el proceso de identificación y supervisó las diligencias, acompañado de peritos, oficiales y personal del Órgano Interno de Control de la institución. “En el desarrollo de las diligencias se contó con la presencia del Ministerio Público Federal (MPF), quien coordinó el evento de identificación y realizó las diligencias, así como de peritos, oficiales y personal del Órgano Interno de Control de la FGR, quienes verificaron que el procedimiento se llevara a cabo en los términos de la norma aplicable”, señaló la FGR en su comunicado.
Aunque el reporte oficial no especificó a qué organizaciones delictivas pertenecían los vehículos, informes de inteligencia citados por la FGR apuntan al Cártel del Noreste y al Cártel del Golfo como los principales grupos a los que se les decomisaron estas unidades. Además, reportes policiales indican que entre el material destruido había vehículos utilizados por el Grupo Escorpión, una facción del Cártel del Golfo asociada a mensajes amenazantes en Tamaulipas.


