
La gira más polémica de Junior H arrancó con un sabor amargo en Tijuana, Baja California, donde el cantante de corridos tumbados fue objeto de un aluvión de críticas por presentarse con casi siete horas de retraso en su primer concierto.
El evento, programado para comenzar a las 8:30 p.m. del domingo 9 de noviembre, terminó iniciando después de las 3:00 de la mañana, provocando la frustración —y el éxodo— de miles de asistentes que perdieron la paciencia tras horas de incertidumbre.
Según la información oficial, el retraso se debió a condiciones climáticas adversas: el avión que transportaba al intérprete fue desviado hacia Mexicali por la intensa niebla sobre Tijuana, lo que impidió el aterrizaje a tiempo.
Sin embargo, la falta de comunicación y actualizaciones por parte de la producción hizo escalar la molestia en el recinto, donde muchos estuvieron esperando sin saber si el concierto se realizaría.
Algunos decidieron abandonar el lugar antes de que Junior H llegara, pero varios cientos de seguidores aguantaron la espera y presenciaron el show cuando finalmente apareció en el escenario, recibiendo al artista con una mezcla de aplausos y cansancio.

Durante dos horas, Junior H interpretó lo mejor de su repertorio, incluyendo éxitos como “Que lloro” y “Ella”.
“Agradezco a quienes se quedaron a pesar de todo”, expresó el cantante, aunque el gesto no fue suficiente para calmar a quienes consideraron que la noche fue una falta de respeto hacia el público.
A través de redes sociales, los asistentes compartieron su descontento por la mala organización y la ausencia de alternativas logísticas ante el retraso, lo que dejó una huella de desilusión en la comunidad tijuanense.
“No hay justificación, dos semanas lleva el clima así en Tijuana, prevees eso con tiempo o pospones el concierto, no dejas esperando a la gente hasta que amanezca”, denunció uno de los fans a través de TikTok.

Este revés para Junior H llega en un momento particularmente delicado en su carrera. El cantante fue recientemente vetado en Jalisco tras incumplir acuerdos sobre la interpretación de narcocorridos, específicamente por la canción “El Azul”, considerada apología del delito por las autoridades.
El veto estatal marcó tendencia nacional y avivó el debate sobre la prohibición y la libertad creativa dentro del regional mexicano, poniendo a Junior H bajo un reflector que no siempre juega a su favor.
El accidentado inicio de tour plantea desafíos para la joven estrella, tanto en la organización de sus presentaciones como en la relación con su base de fans, que exige profesionalismo y mayor compromiso con el público.
Por ahora, la expectativa para las siguientes fechas está marcada por el deseo de que estos problemas no se repitan y que el focus vuelva a la música y no a la controversia.


