
En el centro de Cuernavaca, la capital de Morelos, el Jardín Borda destaca como uno de los sitios con mayor valor histórico y ambiental del país. Ubicado a pocos pasos del zócalo y rodeado de cafeterías y calles pintorescas, este recinto ofrece un recorrido por la memoria de la ciudad y por las distintas etapas que han marcado la cultura mexicana.
Construido por José de la Borda, minero originario de Taxco, este espacio surgió como casa de verano y refugio botánico, resultado de su afición por la horticultura. Sus jardines reúnen especies nativas de la flora mesoamericana, como palma de abanico, amate prieto, guayabo, zacate borracho, pascualxochitl (Nochebuena), copal y aguacate, muchas de las cuales se utilizan para fines medicinales, alimenticios y ornamentales dentro de las comunidades locales.
El diseño del Jardín Borda incluye terrazas de diferentes niveles, albercas, escalinatas, fuentes y juegos de agua inspirados en modelos franceses. En 1865, tras una visita a Yucatán, los emperadores Maximiliano y Carlota eligieron este lugar como su residencia veraniega. A lo largo de ese periodo, organizaron elegantes reuniones y bailes que marcaron la vida social de la ciudad. La historia también consigna que celebridades como Francisco I. Madero, Emiliano Zapata, Sebastián Lerdo de Tejada, Francisco Leyva, Porfirio Díaz y Diego Rivera caminaron por sus senderos.
Años después, el abandono casi llevó a la destrucción el jardín y sus instalaciones. Tras funcionar como hotel, la decadencia amenazó con borrar su legado. Hoy, gracias a la intervención de la Secretaría de Cultura, el lugar se mantiene como museo y centro de actividades artísticas, donde se organizan exposiciones, talleres, conciertos y espectáculos de danza y teatro, permitiendo que el espacio recobre su dinamismo original.

El Jardín Borda no solo es un lugar propicio para el descanso o la reflexión. Los visitantes pueden disfrutar de un lago con paseos en lancha y admirar la arquitectura de los recintos, que combina influencias versallesca, mudéjar y barroco italiano. Además, en sus instalaciones es común encontrar artesanías locales, entre ellas figuras de madera, utensilios de cocina, arte en papel amate y objetos de cerámica.
El recinto ofrece una experiencia completa: cuenta con restaurante, cafetería, librería y tienda de artesanías. Para quienes buscan aprendizaje y convivencia, existen cursos y talleres de arte contemporáneo abiertos a público de todas las edades.
El Jardín Borda se ubica en Avenida Morelos No. 271, Centro, Cuernavaca, y se encuentra abierto de martes a domingo de 10:00 a 17:30 horas. El costo de entrada es de $30 pesos, con acceso libre los domingos y descuentos para estudiantes, profesores y adultos mayores con credencial vigente.
Explorar el Jardín Borda significa adentrarse en la historia, la naturaleza y el arte que distinguen a Cuernavaca como un destino imprescindible tanto para viajeros como para habitantes locales.


