Chilaquiles con salsa de flor cempasúchil, un platillo que no te puedes perder

Una receta que fusiona tradición y modernidad, resaltando el aroma y color de la flor emblemática del Día de Muertos

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El platillo utiliza ingredientes frescos
El platillo utiliza ingredientes frescos como pollo, nueces y flores de cempasúchil para un desayuno festivo. - (Imagen Ilustrativa Infobae)

Para quienes buscan innovar en la cocina durante el otoño, los chilaquiles con salsa de flor de cempasúchil se han convertido en una propuesta aromática y colorida, especialmente propicia para los días cercanos al Día de Muertos.

Este platillo fusiona lo tradicional con lo contemporáneo, conservando el alma festiva de la temporada y añadiendo los inconfundibles matices de una flor de cempasúchil. La receta, difundida por Gastrolab, resalta la importancia de los ingredientes frescos y invita a experimentar el sabor único que la planta aporta al desayuno.

El primer paso es reunir los ingredientes adecuados: media pechuga de pollo, una tercera parte de cebolla, ajo, una hoja de laurel, sal al gusto, una taza de crema, una taza de leche evaporada y media taza de nueces. A esto se añade un chilacate (chile ancho) cocido y sin semillas, medio litro de caldo de pollo, 45 gramos de mantequilla, cuatro flores de cempasúchil limpias y desinfectadas, junto a tortillas troceadas y fritas para el servido (totopos).

Flor de cempasúchil, Tradicion, Día de Muertos Credito: Infobae - Max Alonso

La preparación comienza cocinando la pechuga de pollo en suficiente agua junto con la cebolla, ajo, laurel y sal. Cuando la carne esté tierna, se retira del caldo y se desmenuza, reservando una parte del líquido de cocción para más adelante. En paralelo, dentro de una licuadora, se mezclan la crema, leche evaporada, nueces, ajo, el chilacate y una pequeña cantidad de caldo de pollo hasta obtener una salsa suave; luego, se cuela para eliminar restos sólidos.

En una cacerola, se derrite la mantequilla a temperatura media y se agregan los pétalos de las flores de cempasúchil, permitiendo que liberen su aroma y color distintivo. Seguidamente, se vierte el resto del caldo de pollo, la salsa recién colada, sal y pimienta al gusto.

Es fundamental integrar bien todos los ingredientes y esperar hasta que la mezcla hierva. Cuando esto ocurra, se incorpora el pollo desmenuzado y se cocina todo junto aproximadamente por diez minutos, permitiendo que los sabores se fusionen.

Para servir, se disponen las tortillas fritas en platones individuales, se bañan generosamente con la salsa de cempasúchil, y se corona cada porción con más pollo deshebrado. Se puede añadir crema, rodajas de cebolla y queso al gusto, obteniendo así un platillo que destaca tanto por su color como por su sabor otoñal. Este desayuno, además de ser festivo y aromático, resulta una forma sencilla pero significativa de rendir homenaje a la temporada.

Historia y usos de la flor de cempasúchil: tradición, medicina y gastronomía

El cempasúchil se emplea en
El cempasúchil se emplea en altares y senderos de pétalos para guiar a las almas durante el Día de Muertos. REUTERS/Raquel Cunha

La flor de cempasúchil, originaria de México, sobresale en el marco del Día de Muertos por su color anaranjado intenso, significativo para la cultura mexica que la asociaba con el sol y la empleaba en altares y rituales funerarios. Según la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural, en la actualidad se utiliza para trazar senderos de pétalos desde la entrada del hogar hasta el altar, guiando a las almas de los difuntos hasta la ofrenda familiar.

Tradicionalmente, se ha incorporado a la medicina popular la flor de cempasúchil para atender padecimientos digestivos, fiebre, tos y diversas dolencias cutáneas. Además, su uso trasciende al ámbito culinario y artesanal: en avicultura, provee color a la piel de las aves y la yema de los huevos; en la industria alimentaria, funciona como colorante natural para productos y bebidas, desde cervezas hasta nieves.