
El domingo por la noche, millones de pantallas mexicanas se iluminaron al unísono cuando la identidad detrás de “Bebeeeee”, una adorable ovejita de peluche con voz tierna y pasos torpes, quedó al descubierto.
Bajo esa botarga estaba Marlene Favela, y su destape no solo sacudió al foro, también capturó la atención de todo el país.
El segundo episodio de la temporada 2025 de ¿Quién es la Máscara? se convirtió en un fenómeno de conversación inmediata.
Las redes se llenaron de clips, memes y teorías sobre la actuación de Favela, quien sorprendió al público con una versión juguetona y despreocupada que contrastó con su imagen habitual en los melodramas televisivos.

Cuando se escucharon los gritos de “¡Fuera máscara!”, el momento adquirió tintes de evento nacional: un instante de pura televisión, donde la curiosidad, el espectáculo y la nostalgia se fundieron en un solo golpe visual.
Marlene Favela, con una sonrisa luminosa tras el despojo de la máscara, resumió la experiencia con sencillez: “Me divertí mucho, hice cosas que Marlene nunca haría. Me dejé llevar y jugué”.
Aquella confesión, pronunciada entre aplausos, explicó por qué su participación resultó tan entrañable: el público no solo vio a la actriz, sino a la mujer que se permitió romper su propio molde.
La audiencia de ¿Quién es la Máscara?
El episodio alcanzó 11.7 millones de espectadores, una cifra que confirma el dominio del formato en la televisión dominical mexicana. Bajo la producción de Miguel Ángel Fox, el programa volvió a demostrar su capacidad para combinar misterio, música y espectáculo en una fórmula que mantiene cautiva a la audiencia.
El panel de investigadores —Juanpa Zurita, Carlos Rivera, Anahí y Ana Brenda Contreras— aportó la mezcla exacta de intuición, humor y química que sostiene el ritmo del show. En especial, Anahí destacó al revelar que había sospechado la identidad de Marlene: “Vi lo de Gata salvaje y me la imaginé ahí adentro”, dijo entre risas, celebrando su acierto.
La conducción de Omar Chaparro volvió a ser el hilo conductor del juego escénico: un tono entre la broma y la tensión que mantiene viva la expectativa. Todo, enmarcado en la fastuosidad característica de una producción conjunta de TelevisaUnivision y EndemolShine Boomdog, basada en el exitoso formato surcoreano The King of Mask Singer de MBC.

Cada temporada, el programa logra un equilibrio poco común entre lo lúdico y lo emocional. Lo que sucede en el escenario trasciende el disfraz: se convierte en un espacio donde las celebridades desarman su figura pública para entregarse al juego, al anonimato temporal, al placer de sorprender.
Marlene Favela encarnó ese espíritu con sutileza. Detrás de los brillos, los reflectores y el disfraz de oveja, su participación evocó la esencia del formato: el gozo de descubrir, de adivinar, de jugar. En un país donde la televisión se transforma cada año, ¿Quién es la Máscara? mantiene viva la vieja costumbre de mirar juntos, de compartir la sorpresa en tiempo real.