
Erik Rubín volvió a colocarse en el centro de la atención mediática tras expresar su hartazgo hacia la prensa de espectáculos, especialmente la llamada “prensa rosa”.
El exintegrante de Timbiriche mostró molestia por la manera en que los paparazzi lo siguen y graban sin su consentimiento, situación que considera una invasión a su privacidad.
Su postura llega en un momento donde el debate sobre los límites de la prensa rosa se encuentra en ebullición. Esto, luego de que Ricardo Pérez, integrante del pódcast La Cotorrisa, respondiera a un altercado con reporteros que involucró a su pareja, Susana Zabaleta, con un sketch en el que se burla de programas como Ventaneando y Sale el Sol, además de figuras como Gustavo Adolfo Infante, Flor Rubio y Ana María Alvarado.

“No necesito permiso de Andrea”
Rubín, de 54 años, fue cuestionado sobre los rumores que surgieron después de que en septiembre se le captara con una mujer misteriosa. Ante ello, dejó en claro que Andrea Legarreta, su exesposa, no tiene por qué opinar sobre su vida sentimental.
“Ya no estamos juntos, ¿qué tiene que opinar de mi vida sentimental? Y menos ante las cámaras. Si lo hiciera, me lo diría a mí directamente”, expresó.
El cantante subrayó que, si en algún momento decide iniciar una relación, la única opinión que contará será la suya: “Si tuviera nueva pareja tendría que gustarme a mí, no necesito la aprobación de Andrea”.

Hartazgo con los paparazzi
Más allá de los rumores amorosos, lo que realmente irritó a Rubín fue la insistencia de algunos medios por grabarlo sin aviso. “Hay que tener cuidado porque ya lo graban a uno hasta en lo que está diciendo. Eso no es legal. He visto que usan los audios para otras cosas. Es una invasión a la intimidad”, afirmó.
El músico distinguió entre su faceta pública y su vida privada: “Una cosa es la vida pública y otra la vida privada. Se me hace delicado que te anden siguiendo. Al rato cómo sabes que no es para otra cosa”.

Relación con Andrea Legarreta
Rubín también aclaró que, aunque su matrimonio con Andrea Legarreta terminó en febrero de 2023 tras 22 años, la relación entre ambos sigue siendo sólida en otros ámbitos. “Nosotros tenemos una gran relación, creo que hay un amor ahí que siempre va a estar. Somos socios, nos llevamos increíble. La amo, es una persona a la que nunca voy a dejar de amar, siempre va a ser mi familia”.
El exmatrimonio, que procreó a dos hijas, Mía y Nina, ha reiterado en varias ocasiones que su vínculo está basado en el respeto y la cooperación como padres, sin planes de reconciliación romántica.
El trasfondo de la molestia
Las declaraciones de Rubín se suman al debate en torno a la forma en que la prensa rosa aborda la vida de los famosos. Mientras figuras como Ricardo Pérez recurren al humor para criticar a los programas de espectáculos, Rubín apuesta por exigir límites claros al periodismo de entretenimiento.
