En la recta final de La Casa de los Famosos México, la emoción dio un giro inesperado con la llegada de Marta Guzmán como visita especial para su gran amiga Dalilah Polanco. La entrada de la reconocida conductora y periodista mexicana fue un auténtico bálsamo para la actriz, quien no pudo contener un grito de sorpresa al verla cruzar la puerta: “¡La Guzmán, no manches!”.
La visita de Marta, como parte de la dinámica de convivencia con los finalistas y sus seres queridos por 24 horas, estuvo marcada por la complicidad y el sentido del humor que caracteriza la amistad entre ambas.
Apenas pisó la casa, Marta bromeó: “Te quería taclear, pero creo que ya estás un poco mal”, a lo que Dalilah contestó entre risas: “Ya no me hagas daño”.
El momento más emotivo llegó durante el brindis grupal convocado por La Jefa. Marta no perdió la oportunidad de dedicarle palabras inolvidables a su amiga y colega:
“Dalilah Estela Pérez Polanco, qué ganas a veces de agarrarte de la greña, de abrazarte, atacarme de la risa, de repente llorar, he pasado por todas esas emociones por tu culpa. Me da un orgullo, porque esta cosa entró sin estrategia y también creíste que ibas a durar una semana y que era tu campamento de verano, ha estado duro y fuerte, pero créanme que ha sido una de las casas más nobles que he visto, todos ustedes lo hicieron posible... pero mi gallo es mi Dalilah Polanco”.
¿Quién es Marta Guzmán?
Amiga entrañable, Marta Guzmán tiene una sólida carrera que abarca periodismo de espectáculos, conducción y meteorología en televisión nacional. Durante años, ha sido referente en noticiarios matutinos y programas de entretenimiento, valgan como ejemplo su paso por espacios de Foro TV y la conducción de noticias sobre el clima y la farándula.
Rica en experiencia, Marta también ha incursionado en radio, asesoría y coaching de medios. Gracias a ello, se ha ganado el aprecio del público; por su estilo auténtico, carisma y cercanía con audiencias de todas las edades.
La entrada de Marta a la casa no sólo sorprendió a Dalilah, también se convirtió en un alivio para la tensión que se sentía tras semanas cruciales de convivencia, nominaciones y emociones desbordadas.
En una conversación íntima, Polanco preguntó si su amiga la había escuchado desde fuera del reality. Marta, fiel a su humor, respondió: “Te hemos oído, me quería meter a la tele para darte un abrazo, pero tú y yo no somos de abrazos. ¡Llora!”, dijo, provocando así las lágrimas de la comediante.
La visita de Marta Guzmán dejó claro que, más allá de la competencia, hay amistades que resisten encierros, rivalidades y la presión de la televisión en vivo.
