
Originaria de África, el áloe vera, conocida también como sábila, cuenta con cerca de 500 variedades identificadas. Entre ellas, la aloe barbadensis miller destaca por su amplio uso en la industria cosmética y sus múltiples beneficios parta los constipados y el estreñimiento.
Su uso en la piel se debe a sus propiedades hidratantes, calmantes y regeneradoras, ya que su gel contiene vitaminas, minerales, enzimas y aminoácidos que contribuyen a aliviar irritaciones, quemaduras solares y pequeñas heridas.
Asimismo, ayuda a reducir la inflamación y favorece la cicatrización de la piel, por lo que es un ingrediente común en productos para el cuidado cutáneo, como cremas, lociones y geles.

Actualmente, existen cientos de productos en el mercado que lo contienen, pero también se puede crear una crema casera que humecta y brinda colágeno al rostro.
Como preparar una crema natural de aloe vera
Ingredientes:
- Gel de aloe vera
- Aceite de coco
- Aceite de jojoba
- Cera de abejas
- Aceite esencial de lavanda
Preparación:
- La preparación comienza al mezclar los dos aceites y la cera. La mezcla se calienta a fuego bajo y luego se deja enfriar lejos de la lumbre.
- Una vez que ha bajado la temperatura, se incorpora el aloe vera y se bate hasta integrar completamente los ingredientes.
- Después se añade el aceite esencial, se mezcla de nuevo y el producto final se guarda en un tarro de cristal, protegido de fuentes de calor.

Cómo utilizar correctamente el aloe vera en el rostro para producir colágeno
La crema debe aplicarse sobre piel limpia y seca. Además, se recomienda usarla antes del protector solar en la mañana y también antes de dormir. Al igual que cualquier otro remedio casero, es fundamental realizar una prueba en el antebrazo antes de aplicarla en el rostro para descartar posibles reacciones alérgicas.
Usualmente, provoca algunas reacciones adversas, especialmente en personas con piel sensible o alergias, donde los riesgos más frecuentes incluyen irritación, enrojecimiento, picazón o erupciones.
Aunque su uso puede estimular la producción natural de colágeno en la piel, debido a que sus componentes pueden favorecer la síntesis de colágeno y mejorar la elasticidad cutánea, lo que apoya los procesos de reparación y cicatrización de la piel.

Es importante mencionar que nunca se debe usar sobre heridas abiertas, quemaduras severas o áreas con infecciones, ya que podría retrasar la cicatrización o provocar molestias adicionales. Asimismo, es recomendable realizar una prueba en una pequeña zona de la piel antes de usar cualquier producto con aloe vera en el rostro.